Sr. Director: En referencia al reciente editorial de la Dra. Verónica Casado1, desearía realizar una serie de comentarios.
Ante todo felicitarla por la iniciativa y por la valentía en tratar un tema de tanta actualidad como puede ser la entrada de la Medicina Familiar y Comunitaria (MFyC) en la formación de pregrado de los futuros médicos españoles. No son pocas las vetustas estructuras universitarias que se están cimbreando con estas inquietudes, máxime a sabiendas de que en otros países tienen el tratamiento igualitario que otras asignaturas. De hecho, en algunas universidades de nuestro país, tienen un grupo de médicos de familia integrados en algunos departamentos de las facultades. Suponen el germen de la futura asignatura, por todos deseada.
Se le ha olvidado a la presidenta de la Comisión de nuestra especialidad tratar el tema de las plazas sin cubrir en las dos pasadas ediciones del MIR. No es nada baladí que 241 plazas del MIR de nuestra especialidad2 hayan quedado vacantes. Desconozco los datos de todos aquellos que, tras iniciar el período de formación, deciden su salida antes de finalizar el período de formación, si bien sería interesante que la presidenta pudiera facilitárnoslo.
Creo que en su origen se puede determinar una serie de variables que todos conocemos y que es incluso públicamente expuesto por otros colegas como pudiera ser el vocal de especialistas en formación de la semFYC3: escasa presencia de profesores de nuestra especialidad, desconocimiento de nuestra especialidad por los alumnos, ausencia de un concepto claro de nuestra especialidad, desconocimiento de las salidas tras cursar nuestra especialidad, o sencillamente la minusvaloración de nuestra especialidad al ser tratada como «útimo recurso» de enganche a la vía de la especialización.
Sería interesante que desde la misma comisión se realizara una serie de aproximaciones a este problema que se nos avecina. Propongo, como acciones que estimo serían de gran utilidad, realizar una encuesta por nuestras facultades de medicina (al igual que otros médicos de familia han realizado4) para evaluar la imagen y los conocimientos que los estudiantes tienen del médico de familia y realizar cursos o talleres que sirvan como medio de aproximación de nuestra especialidad y evitar de esa forma que se queden plazas del MIR sin cubrir.
Dejo en el tintero tratar el tema de la salida de los médicos de familia de nuestro país a otros países como Portugal, Reino Unido o Francia.