La violencia de género (VG) se considera un problema de salud pública1. La macroencuesta de Violencia contra la Mujer indica que una de cada dos mujeres (57,3%) de 16 o más años han sufrido VG2. En la población joven es un fenómeno que emerge de nuevo y con fuerza: el 71,2% de mujeres de 16 a 24 años y el 68,3% de 25 a 34 años han sufrido algún tipo de violencia a lo largo de sus vidas2. La detección activa de VG desde el sistema de salud es considerada una buena práctica1. Para la detección en atención primaria existen numerosos instrumentos, uno de ellos es el «Cuestionario breve para detectar situaciones de violencia de género en las consultas clínicas»3, que evalúa las formas más frecuentes de VG e indaga sobre la percepción del riesgo actual en el que se encuentra.
El objetivo principal de este estudio fue estimar la prevalencia de VG en mujeres de 18 a 35 años atendidas en un centro de atención primaria (CAP) mediante un cuestionario breve validado. También determinar los diferentes tipos de VG (psicológica, física, sexual y abuso sexual durante la infancia), la percepción del riesgo actual, y comparar la VG detectada con la registrada previamente en la historia clínica.
Se realizó un estudio observacional descriptivo transversal en el CAP Camps Blancs (Sant Boi de Llobregat, Barcelona). Se llevó a cabo una selección oportunista de mujeres de 18 a 35 años que acudieron al CAP durante el período de estudio. Se excluyeron las que presentaban barrera idiomática. Se realizaron 79 entrevistas, empleando el Cuestionario breve validado3,4.
Se determinó como variable independiente la edad (cuantitativa), y como dependiente la VG (cualitativa) obtenida en el cuestionario. Este consta de 5 preguntas y ≥1 respuestas afirmativas indica presencia de VG. Las preguntas se interpretaron de manera independiente para evaluar por separado los diferentes tipos de VG y la percepción del riesgo actual. La variable independiente se recodificó en una variable cualitativa con dos categorías (de ≥18 a ≤25 años y de ≥26 a ≤35 años).
Se hizo un análisis descriptivo inicial univariado, distribución relativa de frecuencias (prevalencia) para variables categóricas y medidas de tendencia central para variables continuas. Y también un análisis bivariado sobre la presencia o no de VG por grupos de edad y por tipo de violencia. Para describir las posibles respuestas positivas de varios tipos de VG en la misma mujer, se realizó un análisis de datos con tablas de respuesta múltiple, estableciendo conjuntos de variables y tablas de frecuencias para estos conjuntos.
Se detectaron 56 (70,9%) casos de VG, similar a los resultados a nivel estatal2. La prevalencia registrada previamente en la historia clínica era del 1,53%. En la tabla 1 se muestra la prevalencia de los diferentes tipos de VG. Las mujeres refirieron sufrir mayoritariamente violencia psicológica, siguiendo con la violencia física y la sexual. En Cataluña el 63% de las mujeres víctimas de VG manifiestan haber sufrido violencia psicológica y el 18% violencia física y/o sexual5.
Prevalencia, tipos de violencia de género y etapa en que tuvo lugar la violencia
Prevalencia | VGPsicológica | VGFísica | VGSexual | AbusoInfancia |
---|---|---|---|---|
Sí | 60,8% | 29,1% | 12,8% | 19% |
No | 39,2% | 70,9% | 87,2% | 81% |
Etapa | VGPsicológica | VGFísica | VGSexual |
---|---|---|---|
Niñez | 2,1% | 8,7% | 10% |
Adolescencia | 31,3% | 26,1% | 60% |
Juventud | 16,7% | 13% | 20% |
Adultez | 12,5% | 0% | 10% |
Varias etapas | 37,5% | 52,2% | 0% |
VG: violencia de género.
Se encontró superposición entre los diferentes tipos de violencia. Existe una estrecha relación entre las distintas formas de VG: en la pareja, la violencia física y sexual van siempre acompañadas de violencia psicológica2.
Tras el análisis realizado según grupos de edad, se observaron más casos de abuso sexual en la infancia en el grupo de 18 a 25 años (33,3%) que en el de 26 a 35 años (19,2%). En España un 18,5% de mujeres han sufrido acoso sexual en la infancia y en Cataluña el 45,2% de las víctimas de violencia sexual son menores de edad2,5.
La etapa más susceptible de sufrir VG fue la adolescencia y en segundo lugar la juventud (tabla 1). La OMS afirma que la VG se empieza a sufrir a edades alarmantemente tempranas: un 30% de las adolescentes han sufrido violencia en una relación de pareja6.
Esta investigación mostró una prevalencia de VG en la población estudiada muy superior a la registrada en la historia clínica. Promover el uso de mecanismos de detección permitiría visibilizar y actuar sobre este problema de salud. La atención primaria debería convertirse en un pilar fundamental para la detección, acompañamiento y tratamiento de las situaciones de VG.
Consideraciones éticasEl proyecto ha sido aprobado por el Comité Ético de Investigación Clínica (CEIC, código 21/175-P) del IDIAP Jordi Gol.
Se solicitó el consentimiento informado para acceder a la historia clínica, realizar la intervención y analizar los resultados.
El presente estudio no ha interferido en los cuidados habituales que las participantes han recibido en su centro de salud. En todos los casos se ha seguido el procedimiento de actuación correspondiente (Protocol per a l’abordatge de la violència masclista en l’àmbit de salut a Catalunya, Departament de Salut, Generalitat de Catalunya).
FinanciaciónSin financiación.
Conflicto de interesesNinguno.