Se ha estimado una prevalencia de psoriasis en México cercana al 3%. Por otro lado, se conoce que la presentación más frecuente de la enfermedad es la psoriasis en placa1.
Con frecuencia las personas que padecen esta enfermedad son estigmatizadas, así que resulta importante evaluar el nivel de apoyo de la familia al enfermo, la cual representa la principal red de apoyo social en nuestro medio2. Este trabajo se hizo con el objetivo de explorar el funcionamiento familiar y el uso de terapias complementarias en el tratamiento de pacientes con psoriasis en una unidad de medicina familiar.
Es un estudio transversal en el que participaron pacientes con psoriasis en placa captados entre enero y mayo del año 2015 en la Unidad 80 de Medicina Familiar del Instituto Mexicano del Seguro Social en la ciudad de Morelia, México. El tamaño muestral se calculó para población finita con la fórmula:
Se partió de 175 pacientes (unidades de observación conocida) y de un error de estimación del 10%. De acuerdo a esta fórmula se incluyeron 41 pacientes, 19 mujeres y 22 varones con edades comprendidas entre 48,27±13,69 años de edad y tiempo de diagnóstico de 11,2±8,34 años que cumplieron con los criterios de inclusión siguientes: mayores de 18 años de edad con diagnóstico confirmado de psoriasis por el dermatólogo, se aceptaron pacientes con diabetes mellitus tipo 2 e hipertensión arterial si estaban controlados en los últimos 2 meses según criterios de las guías mexicanas de práctica clínica para estas enfermedades3,4. Todos los pacientes firmaron el consentimiento informado antes de ser incluidos. Se determinó el Psoriasis Area and Severity Index (PASI) y los pacientes se clasificaron en las categorías daño leve (0-20), moderado (21-50) y severo (51-72), y el funcionamiento familiar se evaluó con el test de percepción del funcionamiento familiar5. Esta prueba evalúa a la familia en las áreas: cohesión, armonía, comunicación, permeabilidad, afectividad, roles y adaptabilidad. La suma de los puntajes por área permite clasificar a la familia en funcional de 50 a 57 puntos, moderadamente funcional de 56 a 43 puntos, disfuncional de 42 a 28 puntos y severamente disfuncional de 27 a 14 puntos. El test de percepción del funcionamiento familiar fue validado antes de su uso; el coeficiente alfa de Cronbach=0,967, el coeficiente rho de Spearman-Brown=0,983 y el coeficiente de dos mitades de Guttman=0,981.
Respecto al funcionamiento familiar, 34 pacientes (82,9%) percibieron vivir en familias funcionales, 4 (9,8%) en familias moderadamente funcionales, uno (2,4%) en familias disfuncionales y 2 (4,9%) en familias severamente disfuncionales. El 73,2% tenía PASI leve y el 26,8% PASI moderado. Para el control de la enfermedad solo 4 (9,8%) usó terapias complementarias (remedios botánicos, 3 de ellos sábila y uno jengibre, en preparaciones tópicas durante los últimos 6 meses). Se ha reportado que más del 60% de los pacientes con psoriasis pueden optar por incluir en su tratamiento terapias alternativas6.
No se encontró asociación entre la severidad de la enfermedad y el funcionamiento familiar (p=0,564), ni entre el funcionamiento familiar y el uso de terapias complementarias (p=0,312), y tampoco entre el uso de estas últimas y la severidad de la enfermedad (p=0,677).
En nuestra clínica los adultos con años de evolución con la enfermedad suelen mostrar mayor aceptación de la misma, empleo de estrategias de afrontamiento más eficaces, buen apoyo familiar y mejor nivel de aceptación de la enfermedad que en aquellos con diagnóstico de menos de 3 meses.
En acuerdo con otros autores no fue posible establecer una asociación clara entre el impacto de la enfermedad, la percepción de bienestar y la gravedad de la enfermedad estimada con PASI7, tampoco entre la severidad de la enfermedad y el funcionamiento familiar o entre estos factores y el uso de terapias complementarias.
AutoríaJosé Suquilvide-Miranda: diseño, base de datos, análisis de datos y aplicación de instrumentos.
Alain R. Rodríguez-Orozco: diseño, asesoría metodológica, análisis de datos y redacción del artículo.
Martha Estrella García-Sánchez: diseño, asesoría metodológica y análisis de datos.
Libertad Escudero-Hernández: diseño y asesoría metodológica.
Carlos Gómez-Alonso: análisis estadístico, base de datos, procesamiento de datos y evaluación de instrumentos.
Christian Cortés-Rojo: análisis de datos y redacción del artículo.
Registro ante el Comité Local de Investigación en Salud. R-2018-1602-016.