Sr. Director: La prevención primaria es una de las principales áreas de trabajo del médico de atención primaria (AP). La multiplicidad de campos que engloba la AP dificulta en ocasiones dicha tarea y facilita que se proceda, en ocasiones, de forma poco adecuada.
Acude a nuestra consulta una gestante de 35 semanas solicitando un certificado médico oficial en el que se refleje su estado actual de gestación con el fin de que se la exima de la necesidad de llevar colocado el cinturón de seguridad de su automóvil.
Valorado el riesgo/beneficio, se declinó resolver dicha solicitud y se aconsejó el uso adecuado del cinturón de seguridad (CS).
Los accidentes de tráfico (AT) y la violencia doméstica son las causas prevenibles de traumatismo más frecuentes en la gestante1. La mortalidad por accidente de tráfico es un grupo de mortalidad innecesariamente prematura y potencialmente evitable2.
Los AT constituyen en la actualidad una auténtica epidemia. En España, son la quinta causa más frecuente de muerte y la primera en el grupo de 15-34 años de edad, con una tasa de mortalidad en el 2002 de 13,1 por cada 100.000 habitantes2.
Los AT son la causa de muerte no obstétrica más frecuente de la madre y el feto3. La tasa de mortalidad fetal en el AT es del 3,4-38%, debida en primer lugar a la muerte materna y en caso de supervivencia de la madre, al desprendimiento de la placenta4.
La eyección de la madre fuera del vehículo en un AT va asociada a una mortalidad materna de un 33% y fetal de un 47%, frente al 5 y el 11%, respectivamente, en la embarazada no eyectada gracias a los sistemas de anclaje convencionales5.
Aunque los AT son los principales responsables de la morbimortalidad materno-fetal, persiste una baja tasa del 3,4 al 21% del uso del CS por parte de las mujeres embarazadas1.
Por su parte, el Reglamento de Circulación6, en el Capítulo IV del artículo 119 apartado 1 b) cita «... podrán circular sin los cinturones u otros sistemas de retención homologados... las mujeres encintas, cuando dispongan de un certificado médico en el que conste su situación o estado de embarazo y la fecha aproximada de su finalización».
Colocado adecuadamente, el uso del CS es el factor modificador más significativo en la disminución de la mortalidad materna y lesión fetal y muerte después de accidente de tráfico7.
La embarazada sin CS, se ha comunicado que presenta 2,8 veces más riesgo de perder el feto que la portadora de CS1.
La banda horizontal del CS debe colocarse por encima de caderas y debajo del abdomen y la banda oblicua entre las mamas y por la línea medioclavicular, nunca encima del vientre1.
Finalmente, según la bibliografía revisada, la solicitud de exención de llevar colocado el CS en la gestante no parece justificada, dada la elevada disminución de morbimortalidad fetal asociada al AT con adecuada colocación del CS.
Esto, asociado con el escaso uso del CS por parte de las gestantes, hace esencial el conocimiento del tema por parte de los médicos del servicio de AP, para realizar una adecuada educación sanitaria de la población gestante1.