La red social de apoyo influye en la identificación de la necesidad de salud, en el autocuidado y en la búsqueda de atención médica, haciéndose imprescindible la cooperación de familiares. El entorno psicosocial y las condiciones asociadas a eventos estresantes coexisten en la experiencia cotidiana e influye en el núcleo familiar. En pacientes con insuficiencia renal se ha documentado el apoyo social en el período previo al trasplante, o en pacientes con hemodiálisis1,2, así como la asociación de factores psicosociales y evaluación de la calidad de vida3.
Objetivo. Evaluar el efecto que tiene la red familiar de apoyo en la asistencia al enfermo con insuficiencia renal crónica.
Diseño. Estudio descriptivo, transversal, por encuesta a pacientes.
Emplazamiento. Población conurbada de la ciudad de México, con características de marginalidad social.
Participantes. Pacientes con insuficiencia renal crónica, mayores de 15 años, de ambos sexos, residentes en el área de influencia, seleccionados de los registros hospitalarios, por muestreo no probabilístico por conveniencia, que incluyó una muestra de 225 pacientes inscritos a esa fecha. Las pérdidas de pacientes fueron del 12%.
Mediciones principales. Se entrevistó a los pacientes en su domicilio o en el hospital, según su preferencia, y se aplicó un cuestionario previamente validado.
Las variables fueron: red familiar de apoyo, asistencia al enfermo y funcionalidad familiar, entre las más importantes. La red familiar se fundamentó, conceptual y metodológicamente, en un constructo basado en la calificación de Apgar familiar4; para explorar las dimensiones de funcionalidad familiar se utilizo el test de Holmes5,6, que permite clasificar a la familia, de acuerdo al grado de estrés existente.
Resultados. La edad tuvo un rango de 17-82 años, con un promedio de 53 años y desviación estándar de 14 años. El 52% son varones y un 48%, mujeres. El número de integrantes de las familias en promedio fue de 5, con un rango de 1-15 personas. El 75% de los pacientes mostró nivel bajo de escolaridad, un 21% nivel medio y el 4% nivel superior. Un 57% no cuenta con recursos económicos y el 73% de los pacientes muestra dependencia económica de algún familiar. Un total de 182 pacientes (81%) recibieron cuidados de un familiar directo (madre, hermanos), 9 pacientes (4%) de un familiar indirecto o lejano y 35 pacientes (15%) no recibieron cuidados de familiar alguno.
La evaluación del grado de estrés familiar mostró que el 30% de los pacientes no presentaba problemática relevante, el 20% mostró crisis leve, un 32% moderada y el 9% severa. Un 41% tiene familia disfuncional. La asistencia y cuidados del paciente con insuficiencia renal depende de forma significativa de las dimensiones facilitadoras de la función familiar (tabla 1).
La red familiar influyó de forma significativa en la asistencia que recibe el paciente (p < 0,01). También participan de manera significativa apoyo mutuo (p < 0,01), compañerismo (p < 0,01), capacidad resolutiva de la familia (p < 0,01), búsqueda de ayuda (p < 0,01) y participación del grupo familiar (p < 0,01).
Discusión. La mayor proporción de pacientes presentó bajo nivel educativo, y nivel socioeconómico deficiente, lo que concuerda con datos publicados que apoyan la relación que existe entre el bajo nivel socioeconómico y mayor riesgo de morbilidad psicosocial, incluyendo depresión, hostilidad, conflictos familiares, relacionados con eventos estresantes y aislamiento, entre otros efectos7.
Al evaluar el contexto familiar, el apoyo familiar estuvo presente en un 41% de los pacientes. A pesar de que el paciente manifiesta apoyo familiar por tener el cuidado de un familiar directo, este elemento no parece suficiente para afirmar que su participación se da en situaciones extremas.
Los resultados contrastan con los ofrecidos por algunos sociólogos, que han mostrado un gran interés en los efectos de las relaciones sociales o familiares en la salud y bienestar, que explican la función de protección e integración social, como parte del concepto de apoyo familiar y social, que es benéfico en situaciones de crisis8. Con el desarrollo del análisis de las redes sociales, se hace énfasis en las características del individuo, en sus relaciones interpersonales, y por otra parte el contexto familiar o social que puede facilitar, modificar o incluso impedir, que la red de apoyo familiar se otorgue, si la conducta del enfermo muestra desadaptación, trastorno o conflicto, ante la condición crítica en que se encuentra. No obstante las limitaciones del estudio, la contribución respecto a las características de la dinámica familiar del paciente, con enfermedad crónica como la insuficiencia renal, permite identificar los patrones de funcionalidad de la familia y su influencia en la red de apoyo familiar, que dependen fundamentalmente de la eficiencia familiar, de los patrones de liderazgo, expresión de conflictos y claridad en la comunicación9, conceptos que pueden ser las directrices de futuras investigaciones.
Por otra parte el tema resulta relevante, ya que la atención y el control de las enfermedades crónicas representan un reto para los servicios de salud. La información puede ser útil, como parte integral de los programas de atención primaria, dirigidos a estructurar intervenciones, con estrategias individuales y familiares que permitan reforzar los valores familiares y sociales, ya que se reconoce y acepta que la familia es una fuente disponible y accesible de apoyo para los enfermos. Más que sustituir las fuentes de apoyo informal, como es el caso de la familia, se deben buscar las estrategias tendentes a aumentar su capacidad de ayuda y funcionamiento, por parte del equipo de salud, a partir de intervenciones en grupos de apoyo a pacientes y familiares, en particular tomando en cuenta los problemas estructurales y de recursos económicos a los que se enfrenta el sistema de salud en la actualidad10.