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Vol. 29. Núm. 5.
Páginas 322 (marzo 2002)
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Sr. Director: Segui Díaz expone presuntos problemas derivados de la atención de los niños por pediatras. Dice que habrá quien considere que son sólo especulaciones. Así es, ya que apenas aporta referencias que apoyen sus argumentos; según él, existe hiperfrecuentación (HF) pediátrica sin aportar bibliografía. Sin embargo, donde sí parece existir actualmente HF es en las consultas de medicina familiar (MF) (tabla 1). Si existe HF, pediátrica o no, ¿no se deberá en parte a la excelente accesibilidad de nuestro sistema sanitario? ¿O, entre otros factores, a la progresiva delegación de responsabilidades que muchos usuarios realizan induciéndoles a consultar a pediatras o MF por patología banal? Dice que los MF están obligados a ver a los niños en urgencias. En España, con 17 servicios de salud, es peligroso generalizar: en el ICS muchos pediatras hacen guardias en AP atendiendo a niños y adultos. Seguí sugiere que, al ser vistos algunos niños en urgencias por MF, se induce a que el paciente vuelva a consultar a su pediatra. La reconsulta si se produce, ¿no tendrá más relación con la confianza en su médico habitual pediatra o no que con su nivel de especialización? Claro que todo esto son sólo las opiniones del que esto escribe; que el lector les dé la importancia (mucha o poca) que merezcan. La obra de Starfield facilita más información que la que Seguí expone: en relación con los MF, los pediatras recetan menos medicamentos, vacunan más, facilitan más información sobre el crecimiento y desarrollo, ofrecen más veces consejo sobre el control del peso, son más diestros en el manejo del niño sano...1 . Tras la lectura del capítulo del libro de Starfield1, el estudio de costes y de satisfacción del usuario referido por Seguí no parece comparar MF con pediatras; el grupo control del estudio referenciado por Starfield parece estar compuesto por una mezcla de pediatras e internistas3, siendo por tanto arriesgado extraer conclusiones de dicho trabajo. Llaman la atención algunos criterios de buena práctica clínica referidos por Seguí pinchar más a los niños o vacunarlos menos; no creo que ningún pediatra o MF los compartan. En la tabla 1 se ofrecen referencias más recientes que las contenidas en el libro de Starfield1, comparando la práctica clínica de pediatras y MF. A ellas me remito para rebatir las acusaciones sobre la presunta iatrogenización de los niños atendidos por pediatras o sobre el presunto aumento de costes derivado de su actuación. Seguí asoció la tasa de mortalidad infantil (TMI) española según él más elevada que la de la mayoría de países europeos con el tipo de atención infantil en AP2. Ahora afirma que España no se diferencia en general del resto de Europa, ya que todos compartimos un nivel socioeconómico similar. Su rectificación es de agradecer. Asociar un presunto aumento de la TMI española con una atención proporcionada por pediatras sería tan injusto como sugerir que la mayor TMI en el Reino Unido en 1999 (6/1.000, datos oficiales4) país considerado paradigma de la medicina general, donde los niños son vistos por generalistas, en comparación con la TMI española (4,47/1.000, datos oficiales5), se debe a que los médicos ingleses no atienden adecuadamente a sus niños. En fin, sería conveniente, por parte de algunos MF, huir de posiciones fundamentalistas y de dogmatismos; que no todo lo que viene del extranjero es necesariamente mejor que lo que tenemos aquí, mentalidad esta propia de décadas ya superadas; parece lógico poder asumir que, según los lugares y las circunstancias, puede existir más de una manera de entender la AP. Y en España, efectivamente, creo que los niños tienen lo que merecen: una asistencia primaria de calidad realizada por pediatras.
Bibliograf¿a
[1]
Médicos de atención primaria, especialistas y profesionales de salud no médicos. En: Starfield B, editor. Atención primaria. Equilibrio entre necesidades de salud, servicios y tecnología. Barcelona: Masson, 2001; p. 81-107.
[2]
¿Médico de familia, médico de adultos o médico de centro de salud? La infancia, una competencia a reivindicar. Aten Primaria 2001;28:441-2.
[3]
Utilization and cost-effectiveness of a family practice center. J Fam Practice 1982;15: 957-62.
[4]
The official UK statistics site [en línea] [fecha de consulta: 15 de enero de 2002]. Disponible en: http://www.statistics.gov.uk/statbase/xsdataset.asp?vlnk=4483&More=Y
[5]
Defunciones según la causa de muerte 1999. Tasas de mortalidad por causas (lista reducida), sexo y edad [en línea] [fecha de consulta: 15 de enero de 2002]. disponible en: http://www.ine.es/inebase /cgi/ um