Agradecemos la carta de Burillo-Putze et al.1 en relación con nuestro reciente trabajo publicado en Atención Primaria2. Solo quisiéramos argumentar brevemente los 3 aspectos que se comentan sobre nuestro estudio. Comentar, inicialmente, que se trataba de un estudio sociológico mediante encuesta telefónica asistida por ordenador realizado por Metroscopia®, en el que se intentó disponer de una muestra representativa de los médicos de Atención Primaria (AP) de España (192 médicos generales y 108 pediatras), seleccionados mediante un muestreo aleatorio estratificado por comunidades autónomas, proporcional al universo de médicos de AP de cada comunidad, con un margen de error de los datos referidos al total de la muestra de±5,8%). Aunque el trabajo de campo se realizó en junio de 2009, el tiempo transcurrido desde entonces no invalida los resultados, en base a experiencias posteriores.
Respecto al tipo de revistas españolas más leídas, dado que el número de ellas volcadas en bases de datos y repertorios internacionales (principalmente PubMed y Science Citation Index como paradigma) es bajo, por lo que no sorprende que solo 3 de las 22 revistas referidas en la encuesta se encontraran en estos 2 repertorios en aquel momento. El hecho de que 4 de estas revistas sean del ámbito periodístico (más que revistas científicas estrictas), quizás permita una reflexión sobre cuáles son las preferencias de información científica de nuestros médicos de AP: los médicos generales están más interesados por los artículos sobre casos clínicos (73%) y los pediatras por las revisiones (74%), quedando los originales en posiciones posteriores. Como comenta López-Torres3, los editores de las revistas médicas deben tener presentes estos datos ante futuras estrategias editoriales, pues los hábitos de lectura reales no siempre se corresponden con los ideales.
Respecto a las fuentes de información secundarias (bases de datos) y terciarias (bases especializadas en síntesis de información valorada críticamente) utilizadas, los datos de la encuesta se corroboran con otras 2 encuestas que realizamos en otros ámbitos.
En una encuesta anónima con respuestas codificadas dirigida a 61 residentes de pediatría de cuarto año realizada en mayo de 20084, la fuente inicial para buscar la información era PubMed/Medline (66%) y Google (33%). Todos conocían y usaban PubMed, pero solo un tercio de los encuestados conocían el Índice Médico Español, por ejemplo. Asimismo, el 88% habían utilizado alguna vez Cochrane Library, pero otras fuentes terciarias fueron utilizadas de forma infrecuente: GuíaSalud el 28%, National Guideline Clearinghouse el 20% y Tripdatabase el 18%.
En una encuesta anónima con respuestas codificadas dirigida a 44 neuropediatras (36 adjuntos y 8 residentes) realizada en octubre de 20105, PubMed/Medline es la única base de datos bibliográfica internacional utilizada por todos, frente al resto de bases internacionales en que destaca su escaso uso (y casi desconocimiento). No han utilizado Embase el 73% de los encuestados, Current Contents el 82%, Scielo el 82%, Scopus el 93% y Lilacs el 98%. Respecto a las bases de datos nacionales solo Índice Médico Español es utilizado (por un 40%), con desconocimiento de otras bases de datos bibliográficas españolas, que ronda o supera el 90% en todos ellos.
Es cierto que en la encuesta sorprende que no estén algunas revistas de calidad, importancia e impacto en la formación médica de los médicos de AP, mientras que aparezcan algunas del ámbito del periodismo científico (con JANO liderando esta encuesta). Proyectos como la base de datos MEDES (MEDicina en Español) pretenden incluir las revistas biomédicas españolas de mayor interés para el médico de AP, en todos los ámbitos (y consideramos que la revista Emergencias pueda ser de próxima incorporación a este repertorio).