Ampliar la cobertura terapéutica con asistencia cardiorrespiratoria a hospitales externos cuando se agotan las vías convencionales de tratamiento del shock cardiogénico o la insuficiencia respiratoria grave refractaria en el paciente crítico.
Material y métodosDesde enero de 2009 las unidades de cuidados intensivos (UCI), a través del sistema de alertas y del centro de coordinación territorial de emergencias, activan este protocolo que pone en marcha a un equipo multidisciplinario que acude al centro solicitante para implantar un sistema de asistencia cardiorrespiratoria (tipo oxigenador de membrana extracorpórea [ECMO]) en pacientes críticos sin respuesta al tratamiento convencional, con su posterior traslado al hospital de referencia donde se completará el tratamiento definitivo.
ResultadosDesde su puesta en marcha hemos hecho un total de 6 trasladados, con trayectos comprendidos entre los 3–140km de distancia. En 3 casos con asistencia venoarterial (dos con shock poscardiotomía y un shock postinfarto) y el resto con asistencia venovenosa (por síndrome de distress respiratorio agudo de diversa etiología). Todos los operativos se finalizaron con éxito, sin complicaciones hemorrágicas ni fallos en la asistencia. La supervivencia global fue del 50%, consiguiendo el destete en dos casos y la llegada como puente a trasplante cardíaco en otro. Todos los fallecimientos se debieron a complicaciones inherentes al proceso patológico de base.
ConclusiónEn nuestra experiencia el traslado de este tipo de pacientes es complejo y arriesgado, pero factible. Con ello hemos conseguido que no se trate de un privilegio disponible sólo para pacientes ingresados en nuestro