Pacientes y método. En un estudio prospectivo y longitudinal se han evaluado 27 enfermos con ictericia obstructiva (10 obstrucciones benignas y 17 malignas) a su ingreso en el hospital y en los 6 días posteriores al drenaje de la vía biliar. La anorexia se ha evaluado mediante el test de Welch (evaluación subjetiva) y mediante la cuantificación del aporte calórico.
Resultados. Según los resultados del test de Welch, tras el drenaje biliar los enfermos pasaron de tener una puntuación de 3,4 ± 1,5 puntos en el momento del ingreso a 5,6 ± 1,2 puntos a los 6 días del drenaje (p < 0,001), lo que traduciría, según la escala de la prueba, que los enfermos pasaron de un hambre ligera a un hambre moderada. De forma global, los enfermos incrementaron la ingestión de alimentos en un 30%, siendo significativa esta mejoría tanto en las obstrucciones benignas (p < 0,01; F = 4,7) como en las neoplásicas (p < 0,05;
F = 2,5). El porcentaje de enfermos con alteraciones en la ingestión de alimentos descendió en un 40% en los casos con ictericia obstructiva benigna (p < 0,05) y en un 29% en los casos con ictericia obstructiva maligna (p = 0,053).
Conclusiones. El restablecimiento del flujo biliar en los enfermos con ictericia obstructiva se acompañó de una mejora significativa de las alteraciones de la ingestión de alimentos observadas antes del drenaje
Patients and method. A prospective, longitudinal study was carried out in a series of 27 patients with obstructive jaundice (10 benign and 17 malignant) to compare their status at hospital admission with that observed 6 days after drainage of the bile duct. Anorexia was evaluated according to the Welch test (subjective evaluation) and by quantifying the caloric intake.
Results. According to the Welch test, after biliary drainage, the patients scores rose from 3.4 ± 1.5 points at the time of admission to 5.6 ± 1.2 points 6 days after drainage (p < 0.001), indicating, according to the scoring system, that the patients went from being slightly hungry to moderately hungry. Overall the intake of the patients rose by 30%, an increase that was statistically significant in both the benign obstruction group (p < 0.01; F = 4.7) and the group presenting neoplasms (p < 0.05; F = 2.5). The percentage of patients with reduced food intake fell by 40% among patients with benign disease (p < 0.05) and 29% in those with malignant disease (p = 0.53).
Conclusions. The restoration of biliary flow in patients with obstructive jaundice is accompanied by a significant improvement in the eating disorders observed prior to drainage.