Pacientes y métodos. Se realizó un estudio retrospectivo de los pacientes intervenidos quirúrgicamente de urgencias por patología gástrica (hemorragia digestiva alta y perforación gastroduodenal) desde enero de 1992 hasta junio de 1996, excluyendo vaguectomía troncular y piloroplastia.
Resultados. La morbimortalidad aumentó: a) con la edad, sobre todo en los pacientes mayores de 70 años y que presentaron hemorragia digestiva (p = 0,00083); b) con el número de antecedentes patológicos (superior a 2); c) con la enfermedad que provocó la cirugía (peor en la perforación gastroduodenal que en la hemorragia digestiva alta), y d) con la gastrectomía total como técnica quirúrgica. Una tercera parte de los pacientes tenían más de 70 años en el momento de la intervención.
Conclusiones. La cirugía gástrica urgente afecta a una población de edad avanzada y conlleva una elevada morbimortalidad que depende de las enfermedades previas, del tipo de
enfermedad que provoca la intervención y de la técnica quirúrgica utilizada. En los pacientes mayores de 70 años, con más de dos enfermedades previas y perforación gastroduodenal debe plantearse el tratamiento médico conservador como alternativa a la intervención quirúrgica
Patients and methods. A retrospective study was carried out of the patients who underwent emergency surgery to treat gastric disorders (upper gastrointestinal hemorrhage and gastroduodenal perforation) between January 1992 and June 1996, with the exception of truncal vagotomy and pyloroplasty.
Results. The morbidity and mortality rates rose: a) with age, especially in patients over 70 years of age presenting gastrointestinal hemorrhage (p = 0.00083); b) with the number of previous pathological episodes (over 2); c) according to the underlying cause for surgery (worse in association with gastroduodenal perforation than with gastrointestinal hemorrhage), and d) when total gastrectomy was performed. One third of the patients were over 70 years of age at the time of surgery.
Conclusions. Emergency gastric surgery is predominantly performed in an elderly population and is associated with high rates of morbidity and mortality, which depend on previous diseases, the underlying cause for surgery and the surgical technique employed. In patients over 70 years old, with more than two previous diseases, presenting with gastroduodenal perforation, the possibility of conservative medical treatment should be considered as an alternative to surgery.