La cirugía del cáncer de esófago constituye una de las áreas más complejas de la cirugía digestiva, asociada, además, con una elevada morbimortalidad, estancias hospitalarias largas y elevados costes sanitarios. La calidad del proceso que conduce al diagnóstico y al tratamiento quirúrgico del cáncer de esófago depende de que los “sistemas de asistencia clínica” se encuentren bien integrados y coordinados. El cirujano con una especial dedicación y formación en la cirugía esofagogástrica debe ser competente a la hora de evaluar el estudio de extensión de la enfermedad para posteriormente decidir, dentro de un planteamiento multidisciplinario, la opción terapéutica más apropiada. Los resultados clínicos y la mortalidad tras la esofaguectomía se relacionan directamente con el número de estos procedimientos que se realizan en un determinado hospital. La selección adecuada de los pacientes candidatos a la resección esofágica, especialmente si han recibido tratamiento neoadyuvante, y la utilización de un “protocolo” sistematizado para la esofaguectomía y para el control postoperatorio influyen positivamente en los resultados clínicos.
The surgery of esophageal cancer is one of the most complex areas of digestive surgery. Moreover, it is associated with elevated morbidity, prolonged length of hospital stay and high costs. The quality of the process leading to the diagnosis and surgical treatment of esophageal cancer depends on the integration and coordination of “clinical care systems”. Surgeons with special dedication and training in esophageal-gastric surgery should be competent in evaluating tumoral extension studies to subsequently choose the most appropriate therapeutic option within a multidisciplinary approach. Clinical outcome and mortality after esophagectomy are directly related to the number of these procedures performed in a particular hospital. Appropriate selection of candidates for esophageal resection, especially if they have received neoadjuvant therapy, and the use of a systematic “protocol” for esophagectomy and postoperative management positively influence the clinical outcomes.