Nos ha parecido interesante el artículo publicado por Del Valle et al1 porque, en la actualidad la incidencia de la tuberculosis está aumentando en los países desarrollados debido a la inmigración, resistencia a fármacos e inmunodepresión2.
Así, la tuberculosis abdominal representa la sexta causa de tuberculosis extrapulmonar, suponiendo el 11% de los casos de tuberculosis, y siendo su localización más habitual la región ileocecal y el peritoneo3,4. La ascitis puede aparecer hasta en el 97% de los casos. Puede presentarse de tres formas distintas: tipo ascítico (la más frecuente), tipo seco con adherencias y tipo fibrótico con engrosamiento del omento y ascitis loculada3. Dada la sintomatología inespecífica es necesario establecer un diagnóstico diferencial con enfermedades de origen neoplásico (neoplasia intestinal, de ovario y linfoma), infecciosas (parasitosis en inmunodeprimidos, amebiasis, giardiasis y estrongiloidiasis) e inflamatorias (enfermedad de Crohn y colitis ulcerosa)5. Se han descrito hasta un 5% de ascitis con doble patología y no es excepcional encontrar una TP y una carcinomatosis peritoneal simultánea.
Centrándonos en el diagnóstico, el Mantoux tiene poca utilidad. Un líquido ascítico correspondiente a exudado linfocitario con niveles de ADA superiores a 36U/l debe sugerir el diagnóstico. Las tinciones de BAAR y los cultivos de la ascitis son positivos en pequeños porcentajes3. La tomografía axial computarizada puede ser útil en los casos de masas mesentéricas o engrosamiento peritoneal6. Estamos de acuerdo con los autores, que en ascitis de origen indeterminado debe realizarse una laparoscopia o laparotomía para la obtención de biopsias cuyo análisis anatomo-patológico y cultivo microbiológico confirmarán el diagnóstico definitivo7.
El tratamiento recomendado es la cuádruple terapia con isoniazida, rizampizina, pirazinamida y etambutol durante un periodo de seis meses.
El pronóstico es favorable en la mayoría de los casos; la morbimortalidad aumenta cuando se abandona el tratamiento, existe resistencia a los fármacos y se producen complicaciones severas8.