Presacral tumors are a rare and little known pathology. We present our experience in its surgical treatment.
MethodsAnalysis of a series (1995–2008).
ResultsTwenty patients (14 women and 6 men), average age 46 (29–71) years. Patients with benign tumors were younger (43.5 [10.2]) years that those who had malignant tumors (62 [10.7]; P=.002). The median duration of symptoms was 1 year (2 month–50 years). The first symptom was suppuration, palpable mass or constipation in 10 cases or constipation, abdominal pain in 4, back pain in 4 and a casual finding in 3. The surgical approach was perineal in 9 (45%), abdominal in 8 (40%), and combined in 3 (15%) cases. Fifteen (75%) tumors were benign, with teratomas being the most frequent (5 cases). Another 5 were malignant: 2 chordomas, 1 malignant cystic teratoma, 1 malignant mucinous cystadenocarcinoma, and 1 lymphoma. Mean postoperative stay was 6.6 (5) days. There were post-surgical complications in 5 (20%) patients. After an average follow-up of 3.5 (4) years, 2 patients died (malignant teratoma and cystadenocarcinoma, respectively) due to morbidity and to a non-resectable recurrence, and a benign schwannoma has recurred, the rest being free of disease.
ConclusionsSurgical treatment by a group of surgeons experienced in perineal and pelvic surgery can obtain good results with few complications, with the exception of some malignant tumors, depending on the infiltration of adjacent structures and their histological type.
Los tumores presacros son una enfermedad infrecuente y poco conocida. Presentamos nuestra experiencia en su tratamiento quirúrgico.
MétodosAnálisis de una serie (1995–2008).
ResultadosEstudiamos a 20 pacientes (14 mujeres y 6 varones), media de edad de 46 (29–71) años. Los pacientes con tumores benignos tenían una media±desviación estándar de edad (43,5±10,2 años) menor que los que presentaban tumores malignos (62±10,7; p=0,002). La mediana de duración de los síntomas fue de 1 año (2 meses–50 años). El primer síntoma fue supuración, masa palpable o estreñimiento en 10 casos; dolor abdominal en 4, lumbalgia en 4 y hallazgo casual en 3. El abordaje quirúrgico fue perineal en 9 (45%) casos, abdominal en 8 (40%) y combinado en 3 (15%). Hubo 15 (75%) tumores benignos; los más frecuentes, los teratomas, con 5 casos. Otros 5 fueron malignos: 2 cordomas, 1 teratoma quístico maligno, 1 cistoadenocarcinoma mucinoso y 1 linfoma. La media de estancia hospitalaria fue 6,6±5 días. Hubo complicaciones posquirúrgicas en 5 (20%) casos. Tras una media de seguimiento de 3,5±4 años, fallecieron 2 pacientes (teratoma maligno y cistoadenocarcinoma) por comorbilidad y recidiva inextirpable, respectivamente, y ha recidivado uno benigno (schwannoma); los demás están libres de enfermedad.
ConclusionesEl tratamiento quirúrgico realizado por un grupo de cirujanos experimentado en cirugía pelviana-perineal puede obtener buenos resultados con pocas complicaciones, a excepción de algunos tumores malignos, según la infiltración de estructuras vecinas y su tipo histológico.