La hemodiálisis incremental (HDI), con 2 sesiones a la semana, basada en la diuresis residual, es una práctica poco extendida. En nuestra unidad la pauta de diálisis incremental ha sido una alternativa para nuestros pacientes. Mostramos los resultados de su desarrollo en nuestro hospital desde marzo de 2008 hasta septiembre de 2014.
Material y métodos: Para indicar HDI los pacientes debían presentar una diuresis residual de al menos 1.000ml/24 h, encontrarse en una situación de estabilidad clínica, en ausencia de edemas, sin evidencia de hiperpotasemia >6,5 mEq/L ni de fosforemia >6mg/dl de forma persistente y con una aceptable compresión de cuidados dietéticos.
Resultados: En este periodo de tiempo, 25 pacientes han sido incluidos en técnica incremental, 11 de ellos no cumplieron al menos 6 meses en esta modalidad (5 porque requirieron pasar a 3 HD/semana por motivos clínicos, 5 porque recuperaron función renal y uno porque en el momento del estudio no había cumplido 6 meses en técnica incremental). El resto de los pacientes (14) cumplieron al menos 6 meses en HDI. Su edad media al inicio de TRS era de 60±16 años. La permanencia media en TRS fue de 24±21 meses, rango: 74-6, con un tiempo medio en técnica incremental de 16±18 meses, rango de 74-6 meses. La diuresis residual al año es de 1.400±300ml/día, aunque desciende respecto a la inicial de 2.100±600ml/día (p=0,15). El aclaramiento de urea y la función renal residual calculada, basal de 5,7±1,5 vs. 3,5±2,1ml/min al año (p=0,02) y basal de 8,8±2,3 vs. 6,9±4,3ml/min al año (p=0,15), también descienden respectivamente.
Conclusiones: La HDI puede preservar la función renal residual. Es una opción que debe valorarse al inicio del tratamiento renal sustitutivo y, aunque probablemente no sea aplicable a todos los enfermos, puede ser una alternativa en un grupo seleccionado de pacientes.