Métodos: Se ha llevado a cabo el seguimiento de un grupo de 50 enfermos, sometidos a trasplante renal, en los primeros 6 meses postrasplante. Todos ellos excepto seis eran seropositivos con anterioridad al trasplante, y únicamente uno de los pacientes seronegativos tuvo un donante igualmente seronegativo.
Resultados: En total se han analizado 750 muestras de sangre, de las cuales 8 fueron positivas por shell vial, 91 por detección de IgM específica, 115 por antigenemia, 225 por PCR convencional y 440 por nested PCR. Únicamente en 4 pacientes (uno de ellos el receptor seronegativo con donante seronegativo) no se detectó ninguna muestra positiva a lo largo del seguimiento mediante ninguna de las técnicas empleadas.
Conclusiones: La antigenemia ha constituido el método más rápido, barato y sencillo, presentando la ventaja de ofrecer resultados cuantitativos que pemiten establecer una relación con la aparición de infecciones sintomáticas. La PCR cualitativa en las dos variantes empleadas ha sido la técnica más sensible y precoz, pero a su vez la de mayor dificultad técnica, la más cara y con la desventaja de que su gran sensibilidad limita su utilidad clínica.
Methods: Fifty kidney transplant patients were followed for the first 6 post transplant months. All except 6 were seropositive for CMV prior to transplantation and only one seronegative patient had a seronegative donor.
Results: A total of 750 blood samples were analyzed, 8 of which were positive by shell vial, 91 by specific IgM detection, 115 by antigenemia, 225 for conventional PCR and 440 for nested PCR. No positive sample was detected throughout follow up by any of the techniques used in only 4 patients (one being the seronegative receptor with a seronegative donor).
Conclusions.: Antigenemia was found to be the fastest, cheapest and simplest method of diagnosing CMV, presenting the advantage of providing quantitative results which allow the establishment of a relationship with the appearance of symptomatic infections. With the two variants used qualitative PCR was observed to be the earliest and most sensitive technique, while being the most difficult and the most expensive, with the disadvantage that its great sensitivity limits its clinical usefulness