Sr. Editor: Pasteurella multocida es un cocobacilo gramnegativo, que forma parte de la flora orofaríngea habitual de gatos y perros. Produce habitualmente infecciones de piel y partes blandas por arañazo o mordedura de gato o perro. La afectación ósea o articular es una complicación poco habitual, y menos frecuente, aún, es la infección de prótesis articular1. Presentamos el caso de una paciente con una infección de una prótesis articular por P. multocida.
Paciente de 79 años de edad con demencia degenerativa y antecedentes de heridas frecuentes por arañazo de un gato doméstico, a la que se le había realizado una artroplastia de ambas rodillas por gonartrosis en los años 1998 y 1999. Ingresó en nuestro centro en septiembre de 2005 con clínica de 3 días de evolución de dolor intenso y tumefacción en rodilla izquierda, sin fiebre acompañante. En la exploración física presentaba una rodilla tumefacta, caliente y eritematosa, sin lesiones por arañazo de gato. En la analítica destacaba una leucocitosis con neutrofilia, una PCR de 220,7 mg/l y una VSG de 51/83 mm. El líquido sinovial fue purulento (358.000 céls./μl con 93% PMN, proteínas 37,6 g/l y glucosa 3 mg/dl) y el cultivo positivo para P. multocida. Se realizó un lavado articular y se inició tratamiento con amoxicilina-ácido clavulánico 2 g i.v./ 8 h durante 3 semanas, seguido de ciprofloxacino 750 mg/12 h durante 4 semanas asociado a trimetoprima-sulfametoxazol 160-800 mg/12 h 12 semanas con excelente respuesta clínica y analítica.
Aunque las infecciones por P. multocida en humanos son raras, en los últimos años se están describiendo cada vez con más frecuencia casos aislados y series cortas. Tras un arañazo o mordedura de gato o perro este germen puede provocar infecciones de piel y partes blandas, aunque también puede originar infecciones en el tracto respiratorio, genitourinarias y puerperales, endoftalmitis, meningitis e infecciones osteoarticulares1,2. La infección de una prótesis articular de rodilla por P. multocida ha sido excepcionalmente descrita en la literatura especializada3-5. La artritis reumatoide, la toma de corticoides, la enfermedad ósea degenerativa y las prótesis articulares son factores que predisponen a padecer este tipo de infecciones1-5. La herida o mordedura de gato o perro está presente en un 59% de los casos; en un 29% hay exposición sin mordedura y en un pequeño porcentaje (12%) no existe el antecedente de exposición a animales1.
La presentación clínica de una infección de una prótesis articular es aguda. El líquido articular es purulento con un recuento leucocitario elevado con predominio de PMN, glucosa baja y proteínas altas. La tinción de Gram es positiva en un 45% de los casos1.
Con frecuencia el tratamiento conservador con antibioterapia y lavado articular o punciones aspirativas de repetición resuelven la infección1,3,5 aunque en ocasiones es preciso la retirada de la prótesis.
El tratamiento antibiótico puede realizarse con penicilina y derivados, cefalosporinas de segunda y tercera generación, tetraciclinas y quinolonas1,2.
Por todo ello consideramos que los pacientes con prótesis articular, especialmente si están inmunodeprimidos, que presenten una herida o mordedura de gato o perro deberían recibir profilaxis antibiótica frente a P. multocida.
