Las conclusiones y/o novedades más interesantes en la Digestive Disease Week 2016 han sido: a) enfermedad por reflujo gastroesofágico: el reflujo refractario a inhibidores de la bomba de protones se asocia muy a menudo a poca adherencia al tratamiento, comorbilidades psiquiátricas y trastornos funcionales digestivos. Deben explorarse estas posibles entidades en todo reflujo refractario a inhibidores de la bomba de protones; b) esófago de Barrett: sigue sin quedar clara la eficacia del cribado; sin embargo, nuevas técnicas mínimamente invasivas, como la citoesponja, permiten una detección más eficaz tanto del esófago de Barrett como de la adisplasia o la neoplasia asociadas al esófago de Barrett; c) acalasia: la miotomía peroral submucosa se consolida como una alternativa tan eficaz y más segura que la cirugía; d) esofagitis eosinofílica: son necesarias dosis altas de inhibidores de la bomba de protones para descartar una eosinofilia esofágica con respuesta a inhibidores de la bomba de protones; montelukast no es claramente efectivo en el tratamiento de la esofagitis eosinofílica, aunque no puede descartarse una eficacia moderada.
The most interesting conclusions and/or advances presented at Digestive Disease Week 2016 were the following: a) gastroesophageal reflux disease: proton pump inhibitor-refractory reflux disease is frequently associated with poor treatment adherence, psychiatric comorbidities and functional gastrointestinal disorders. These possible entities should be investigated in all cases of proton pump inhibitor-refractory reflux disease; b) Barrett's oesophagus: the efficacy of screening remains unclear; however, new minimally-invasive techniques such as the cytosponge allow more effective detection, both of Barrett's oesophagus and Barrett's oesophagus-associated dysplasia or neoplasia; c) achalasia: evidence indicates that peroral endoscopic myotomy is as effective as surgery and is a safer alternative; d) eosinophilic oesophagitis: high-dose proton pump inhibitors are required to rule out proton pump inhibitor-responsive eosinophilic oesophagitis; montelukast is not clearly effective in the treatment of eosinophilic oesophagitis, although moderate efficacy cannot be ruled out.