La cuestión del patrimonio industrial y científico empieza a encontrar su lugar en el mundo académico. El proceso ha sido relativamente largo, con las contribuciones de algunos profesores pioneros, como el británico Kenneth Hudson (1916-1999), el francés Maurice Daumas (1910-1984) o el también británico Robert Angus Buchanan (nacido en 1930). En los años 1950 y 1960, la entonces llamada arqueología industrial movilizó sus primeros recursos, y se logró algún resultado, como la declaración en 1986 como Patrimonio de la Humanidad de la zona de Ironbridge, en el valle del río Severn, que se había organizado como museo de sitio desde 1967. La disciplina ha ido desarrollándose de la mano de la historia de la tecnología, la historia económica, la geografía, el urbanismo, la arquitectura, la ingeniería, la arqueología y la museística, por mencionar algunos de los campos de estudio implicados. El estudio del patrimonio científico, técnico e industrial debe considerarse una pieza central de la historia cultural.
El volumen que reseñamos recoge las contribuciones al primer Workshop Internacional Heritage, Cultural Economics, Technology and Sustainability (HERITECHS) que se celebró en Alicante en junio de 2011. HERITECHS es un programa de doctorado promovido por un consorcio formado por las siguientes instituciones: Université Paris 1 Panthéon-Sorbonne (coordinador) (Francia); Università degli Studi di Padova (Italia); Universidade de Évora (Portugal); Universidad de Alicante (España); Faculté des Lettres et des Sciences Humaines de Sfax (Túnez); Polytechnic University of Prague (República Checa); Universidade Tecnológica Federal do Paraná (Brasil); Politecnico di Torino (Italia); Universidad Nacional Autónoma de México (México). Este programa empezó en 2010 en el ámbito del Máster Erasmus Mundus Techniques, Patrimoines, Territoires de l’Industrie, que patrocinan las 3 primeras universidades.
Los trabajos están distribuidos en 4 secciones: Aspectos económicos y sociales de los bienes patrimoniales y culturales (9 contribuciones); Paisaje natural y cultural (10 contribuciones); Paisaje industrial (8 contribuciones), y Modelos de gestión sostenibles aplicados a los bienes culturales (4 contribuciones), precedidas de una introducción general (firmada por A. F. Garçon; C. Barciela; G.L. Fontana y J. Melgarejo). Encontramos muchos estudios de caso referidos a regiones de Europa, América y África, a cargo tanto de profesores seniors como de estudiantes avanzados del doctorado. Los trabajos incorporan campos de estudio que, sin ser inéditos, son muy novedosos, como los paisajes culturales incluyendo los paisajes industriales y agrícolas, los patrimonios inmateriales, en los que la técnica tiene un papel muy destacado, y la perspectiva de la sostenibilidad, un elemento que, a pesar de ser una moda, es central para los estudios y la gestión de patrimonio. En este sentido, es imprescindible analizar las concepciones de sostenibilidad en la historia (un proceso complejo, que tiene unos antecedentes, una historia apasionante, a pesar de que casi no haya sido abordada hasta ahora), pero al mismo tiempo, las opciones de conservación (en general, reutilización) tienen que basarse en criterios de sostenibilidad.
Vamos a comentar brevemente los trabajos publicados. En la primera parte, además de analizar la economía del patrimonio cultural (por M. I. López Ortiz y M. A. Sáez García), se estudian las políticas públicas en el ámbito cultural (M. Ballesteros Huesca), la relación entre las estructuras constitucionales y los bienes culturales (J. Chofre Sirvent), el régimen jurídico de la protección de estos bienes (A. Molina Giménez) y el impasse italiano en la protección del patrimonio cultural (M. Giampieretti). Igualmente, se analiza la jurisdicción que ha elaborado UNESCO en relación con el patrimonio, en casos novedosos, como los bienes inmateriales que se regularon en 2003 (que entraron en vigor pleno en 2006, cuya aplicación problemática estudia L. Zagato). Un ejemplo analizado (por F. Crespo Rodríguez) es el Misteri d’Elx, declarado Patrimonio de la Humanidad en 2001. M. Desantes Real analiza el patrimonio inmaterial de las minorías. También se considera el patrimonio «mágico» de la prestidigitación (con referencia principal al siglo xix), una investigación de doctorado HERITECHS de L. Villiaume.
La segunda sección trata sobre el paisaje natural y cultural. Se inicia con un trabajo de J. Melgarejo Moreno y J. A. Miranda Encarnación sobre el valle de Ricote, el Hondo y las Lagunas de Torrevieja. A continuación, M. Hernández Hernández y A. Morales Gil sobre el patrimonio agrario. S. Capelo, F. T. Barata y J. M. de Mascarenhas tratan sobre los proyectos de patrimonio en los valores culturales del paisaje. También se estudian los ecosistemas naturales en el medio urbano (en el caso de México, estudiado por M. Mazari Hiriart y R. M. Meza Paredes), el patrimonio de los Sao, en Chad (por M. Makrada Maina, doctorando HERITECHS), el patrimonio hidráulico en España con una revisión en perspectiva histórica (por A. Gil Olcina), un análisis de la historiografía de movilidad en Francia (por M. Flonneau), los paisajes naturales como patrimonio narrativo (por V. Zingari), un estudio de la constitución del patrimonio hidroeléctrico en Portugal (por A. Cardoso de Matos) y la cuestión del diseño de una autopista en Senegal (por A. Kantoussan, doctorando HERITECHS).
La tercera sección estudia el paisaje industrial y se abre con un texto teórico del profesor G. L. Fontana. El siguiente trabajo, por C. Rosa (doctoranda HTPS), trata sobre educación y conservación del patrimonio en relación con Río Tinto, en Paraíba, Brasil, una población impulsada por una empresa textil a principios del siglo xx. Sigue una reconstrucción muy útil del concepto de paisaje desde la década de 1970, cuando se consolidaron las primeras concepciones de patrimonio industrial (a cargo de M. Preite). A continuación se incluyen 5 estudios particulares sobre Spina 3 en Turín (M. Barosio), sobre el Borgo Rossini de la misma ciudad (M. Ramello), sobre la fábrica de Pathé Marconi, en Chatou (Francia), destruida en 2004, y la de Berliner Gram-o-phone, en Montreal (Canadá), que se ha beneficiado de una rehabilitación y reutilización (J.L. Rigaud), sobre el patrimonio minero de Cartagena-La Unión (M. A. Pérez de Perceval y A. Escudero) y sobre las prácticas sostenibles en la reutilización y valorización del patrimonio minero de Abbadia San Salvatore, en la Toscana, Italia (por el doctorando HERITECHS M. Rahmoun).
La cuarta sección está dedicada a modelos sostenibles de gestión de bienes culturales. El primer trabajo, de E. Casanellas, trata sobre la coordinación territorial de los museos técnicos en Cataluña. A continuación, J. A. Cortés Garrido y M. Olcina Domènech presentan la gestión del nuevo museo arqueológico de Alicante, el MARQ, inaugurado en su nueva orientación en 2000, pero que da continuidad al museo inaugurado en 1932. Seguidamente, J. Sagasta y E. Pineda tratan de la gestión del palmeral de Elche, y, finalmente, R. Capovin, analiza el museo de la industria y del trabajo de Rodengo Saiano, en Brescia, Italia, y su voluntad de llegar a un público lo más amplio posible.
El interés del volumen se centra, pues, en la consideración conjunta de las concepciones de paisaje natural, agrario e industrial, todas ellas integradas en el patrimonio cultural en sentido amplio, incluyendo los elementos inmateriales y los retos de la sostenibilidad.
El volumen está bien editado, aunque en algunos detalles se puede comprobar la gran dificultad de coordinar textos en 4 idiomas (castellano, francés, italiano e inglés), con varios autores redactando sus trabajos en lenguas distintas de su idioma nativo. Esto quiere decir que algunos textos podrían mejorarse.
Podemos concluir, pues, que no se trata de un simple libro de actas de un congreso (publicaciones hoy en día algo denostadas). En realidad, se trata de una contribución relevante a un nuevo campo de estudio en el que se necesitan muchas más aportaciones.