Analizar la calidad de vida mediante el test SRS 22 en los pacientes con escoliosis de 20 o más grados Cobb.
Material y métodoEstudio descriptivo prospectivo realizado a pacientes con escoliosis de al menos 20 grados Cobb y con edad comprendida entre 10 y 20 años. Fue realizado entre abril y mayo de 2016.Se les registró peso, talla, índice de masa corporal y cuestionario SR 22, que es un cuestionario específico de calidad de vida para pacientes con escoliosis. Los pacientes se dividieron en 2 grupos para su análisis: a) escoliosis entre 20 y 29 grados Cobb (n=44); y b) escoliosis de 30 grados Cobb o superior (n=32).
ResultadosExisten diferencias significativas en las dimensiones que evalúan el dolor, la autopercepción de la imagen y la satisfacción del tratamiento, siendo peor valoradas cuando el grado de escoliosis es de 30 grados Cobb o superior. No hay diferencias significativas en la función/actividad ni en la salud mental. La puntuación global del cuestionario también fue peor en el grupo con mayor grado de escoliosis. El peso, talla e índice de masa corporal no han mostrado diferencias significativas según el mayor o menor grado de escoliosis.
ConclusionesLa escoliosis afecta de forma importante a la calidad de vida de las personas que la padecen, existiendo una correlación negativa entre la gravedad de la escoliosis medida mediante grados Cobb y la calidad de vida.
To assess the quality of life using the SRS 22 test in patients with scoliosis of 20 or more degrees Cobb.
Material and methodsA prospective descriptive study was conducted between April and May 2016 on patients with scoliosis of at least 20 degrees Cobb and aged between 10 and 20 years. A record was made of weight, height, body mass index, and the SR 22 specific quality of life questionnaire for patients with scoliosis was completed. Patients were divided into two groups for analysis: a) scoliosis between 20 and 29 degrees Cobb (n=44); and b) scoliosis with a Cobb of 30 degrees or greater (n=32).
ResultsThere were significant differences in the dimensions that assess pain, image self-perception, and satisfaction with treatment, being valued worse when the degree of scoliosis Cobb is 30 degrees or higher. There were no significant differences in function/activity or mental health. The overall score of the questionnaire was also worse in the group with the highest degree of scoliosis. The weight, height, and BMI showed no significant differences due to the varying degrees of scoliosis.
ConclusionsScoliosis significantly affects the quality of life of people who suffer it, and there is a negative correlation between the severity of scoliosis measured by degrees Cobb and quality of life.
La palabra escoliosis proviene del griego y significa curvatura. No es una enfermedad, sino una deformidad tridimensional. La Scoliosis Research Society (SRS) la define como una curvatura lateral de la columna con rotación de las vértebras dentro de la misma. Se considera que una escoliosis es estructurada cuando la magnitud de la curva es mayor de10° de ángulo Cobb. Se denomina actitud escoliótica a las curvas que se sitúan por debajo de los 10° y que no tienen rotación vertebral (con frecuencia son secundarias a desviaciones posturales, dolor o dismetría leve de miembros inferiores)1.
La escoliosis se divide en idiopática y secundaria. Definimos la escoliosis idiopática como aquella en la que no podemos establecer una causa. La escoliosis idiopática es la forma más frecuente de escoliosis, y se desarrolla sobre una columna que no tiene alteraciones previas. Su diagnóstico es por exclusión, es decir, solo puede realizarse cuando se han descartado otras causas de escoliosis, como malformaciones vertebrales, trastornos neuromusculares y otras enfermedades concretas que pueden producir la escoliosis. La escoliosis secundaria normalmente se asocia a enfermedades neuromusculares (parálisis cerebral, poliomielitis, mielomeningocele, miopatía, etc.) o a enfermedades del tejido conjuntivo (síndrome de Marfan, síndrome de Ehler-Danlos, etc.). Cuando la escoliosis es secundaria a una malformación vertebral se denomina escoliosis congénita. La escoliosis suele ser idiopática en el 75%, congénita en el 10%, paralítica en el 10% y por otras causas en el 5%2,3.
La prevalencia de la escoliosis idiopática en edad de riesgo (individuos entre 10 años-16 años) es aproximadamente entre el 2-3%. La prevalencia de curvas mayores de 20° es de 0,3-0,5%. Se estima que la proporción de pacientes que requieren tratamiento quirúrgico no supera el 0,1%. La SRS clasifica la escoliosis estructural en función de su etiología o causa, de la edad de aparición y de la localización morfológica de las curvas4.
En los años 70 comenzaron a estudiarse las consecuencias psicológicas, tanto de la escoliosis idiopática como de sus tratamientos, especialmente en el caso de los corsés. En los años 80 se profundizó en este modelo buscando estrategias de adaptación psicológica para afrontar mejor las ortesis y se estudiaron también estas consecuencias en el contexto del tratamiento quirúrgico5. En los 90 se adoptó el modelo multidimensional y se crearon los primeros instrumentos de calidad de vida específicos disponibles desde 19956. Además de la imagen personal negativa, produce estados depresivos, y con ello una influencia negativa sobre la autoestima, y todo ello en conjunto puede afectar a la calidad de vida de estos pacientes. Aun así, no ha sido hasta los últimos 10 años en los que ya prácticamente todos los estudios de investigación en escoliosis incluyen medidas de calidad de vida7–11.
Por todo lo planteado anteriormente, el objetivo del presente trabajo es analizar la calidad de vida mediante el test SRS 22 en los pacientes afectos de escoliosis de 20 o más grados Cobb, y la hipótesis planteada es: la escoliosis afecta de forma importante a la calidad de vida de las personas que la padecen, existiendo una correlación negativa entre la gravedad de la escoliosis medida mediante grados Cobb y la calidad de vida.
Material y métodoSe trata de un estudio descriptivo prospectivo realizado a pacientes afectos de escoliosis y con edad comprendida entre 10 y 20 años. El estudio se ha realizado durante los meses de abril y mayo de 2016 con pacientes adscritos a los centros de salud de San Andrés y Beniaján en Murcia. El estudio fue aprobado previamente por el comité de investigación del área de salud de referencia.
Los criterios de inclusión han sido: 1) pacientes de ambos sexos con edad comprendida entre 10 y 20 años en los que constase en su historia clínica de OMI-AP (programa informático que se utiliza en las consultas de los centros de salud) el diagnóstico de escoliosis; 2) que la escoliosis fuese de al menos 20° Cobb; y 3) pacientes que mostraron su colaboración para realizar la encuesta de calidad de vida SR 22 (anexo 1).
Los criterios de exclusión fueron: 1) pacientes con trastornos mentales diagnosticados que les dificultasen comprender el contenido de la encuesta; y 2) pacientes que no respondieron a la llamada telefónica que se les realizó.
El procedimiento experimental se desarrolló del siguiente modo: 1) en el servicio de administración del centro de salud se localizaron todos los pacientes afectos de escoliosis mediante búsqueda por el código que identifica dicha afección; 2)en la historia clínica de los pacientes previamente localizados se busca su grado de escoliosis, seleccionando todos aquellos que presenten una desviación igual o mayor a 20° Cobb. De todos los seleccionados se registró su edad, peso, talla y grados Cobb de escoliosis; y 3) se contactó con todos ellos telefónicamente y se les realizó el cuestionario SR 22, que es un cuestionario específico de calidad de vida para pacientes con escoliosis. Previamente a la realización del cuestionario se les explicó telefónicamente el proceso y se les pidió el consentimiento informado de forma oral.
En 1999 se publicó el primer estudio con un cuestionario avalado por la SRS, el SRS 2212. Este instrumento ha tenido una difusión creciente y se ha convertido en el estándar para medir la salud en la escoliosis idiopática, con adaptaciones transculturales al chino, español, japonés, holandés, italiano, turco y alemán. Ha demostrado pruebas clinimétricas sólidas de validez y fiabilidad, tanto en sus versiones originales como en sus traducciones13,14.
El cuestionario consta de 20 preguntas que forman 4 dimensiones: función/actividad, dolor, autopercepción de imagen y salud mental, y 2 preguntas más sobre la satisfacción del tratamiento. Cada dimensión está constituida por 5 ítems, excepto la satisfacción, que agrupa los 2 ítems. La escala de salud mental es una adaptación de la misma dimensión del cuestionario SF-36, del que ha tomado sus aseveraciones. Cada ítem se puntúa de 1 (lo peor posible) a 5 (lo mejor posible). Cada dimensión tiene una suma total con valores posibles entre 5 y 25, excepto la escala de satisfacción, que va de 2 a 10. Los resultados se expresan como la media de cada dimensión y la media de la puntuación global. El SRS 22 en castellano ha mostrado las siguientes cualidades métricas: escalamiento, validez, fiabilidad y sensibilidad al cambio. Presenta un coeficiente de alfa de Cronbach de 0,89, con un coeficiente de correlación intraclase de 0,96.
Los pacientes analizados se dividieron en 2 grupos según la gravedad de la escoliosis. Los grupos fueron: a) escoliosis entre 20 y 29° Cobb; y b) escoliosis de 30° Cobb o superior.
Con los datos registrados y resultados obtenidos en el cuestionario SR 22 se realizó el análisis estadístico de los datos, consistente en el cálculo de la media y desviación típica, la puntuación de cada dimensión del cuestionario y global. Para comparar las medias se utilizó el test de la «t» de Student y analizar así si hay diferencias significativas en la calidad de vida según el grado de escoliosis. Se consideró significación estadística cuando p<0,05.
ResultadosPara la obtención de la muestra fue preciso analizar un total de 170 historias clínicas con el diagnóstico de escoliosis. De todas ellas fueron excluidas para el estudio 94 (55,3%). El motivo fue porque en 58 (34,1%) no constaba el grado de escoliosis y en 36 (21,2%) sí constaba, pero la escoliosis era inferior a 20° Cobb. Por tanto, se incluyeron 76 pacientes que se dividieron tal y como se ha descrito previamente en 2 grupos: a) escoliosis entre 20 y 29° Cobb 44 pacientes; y b) escoliosis con 30 o más grados Cobb 32 pacientes.
La puntuación media de las variables analizadas en el cuestionario aparece reflejada en la tabla 1. En dicha tabla se muestra que existen diferencias significativas en las dimensiones que evalúan el dolor, autopercepción de imagen y satisfacción del tratamiento, siendo peor valoradas cuando el grado de escoliosis es de 30° Cobb o superior. No hay diferencias significativas en la función/actividad ni en la salud mental. La puntuación global del cuestionario también fue peor en el grupo con mayor grado de escoliosis (fig. 1).
Puntuación media en las diferentes dimensiones evaluadas por el cuestionario SRS 22 según la gravedad de la escoliosis
20-29 grados Cobb (n=44) | 30 o más grados Cobb (n=32) | p | |
---|---|---|---|
Función/actividad | 4,6±1,3 | 4,2±1,4 | ns |
Dolor | 4,2±1,3 | 3,5±1,2 | <0,05 |
Autopercepción de la imagen | 4,1±1,3 | 3,5±1,3 | <0,05 |
Salud mental | 4,8±1,1 | 4,7±1,1 | ns |
Satisfacción con el tratamiento | 4±1,5 | 3,2±1,4 | <0,05 |
Puntuación global | 4,34±1,6 | 3,82±1,6 | <0,05 |
El peso, la talla y el índice de masa corporal no han mostrado diferencias significativas según el mayor o menor grado de escoliosis (tabla 2 y fig. 2).
La escoliosis idiopática, y fundamentalmente la del adolescente, es una afección que suele desarrollarse en un niño sano, que casi nunca tiene otras enfermedades asociadas ni causas ostensibles de su deformidad. Así, en sus estadios iniciales presenta un compromiso estético que las medidas terapéuticas tratan de limitar y corregir. La cirugía de corrección de la escoliosis es un procedimiento bien establecido, de larga experiencia y con resultados muy satisfactorios.
Su indicación se reserva para curvas de alto valor angular o en estado evolutivo, dado el crecimiento del paciente. En general, deja conforme tanto al paciente como a su grupo familiar. Desde que en la evaluación de los tratamientos se han incorporado las técnicas de outcome o cuestionarios de satisfacción, como el SRS 22 y el SRS 30, se ha ampliado el concepto de los resultados al contemplar la perspectiva del paciente a través de su autoevaluación. «Ya no es solo lo que el doctor dice, sino que puedo expresar lo que yo siento y me sucede». Los términos de la autoevaluación incorporan elementos subjetivos englobados en la calidad de vida: presencia de dolor, función, estado mental, imagen de sí mismo y aspectos sociales.
En relación con la calidad de vida hay que mencionar distintos aspectos. Por un lado, las preocupaciones de salud de los pacientes con escoliosis se centran con más frecuencia en dimensiones como el dolor, la imagen corporal, la movilidad y los trastornos del sueño15. Por otro, la escoliosis disminuye la función psicosocial, mengua la autoestima y la energía vital y produce dificultades en la percepción de la salud física16. Hay que considerar que la medición de la calidad de vida en la deformidad espinal es relativamente reciente, iniciándose la publicación de estudios en relación con la misma a partir del año 2000. El primer estudio con el cuestionario SRS 22 fue publicado en el año 1999, valorando los resultados en pacientes con escoliosis idiopática del adolescente intervenidosquirúrgicamente12. Desde entonces este cuestionario se ha convertido en un referente para medir la calidad de vida, realizándose adaptaciones a numerosos idiomas, entre ellos al español. Existen estudios previos en los que no se ha podido usar, entre otros motivos por no estar disponible cuando se iniciaron.
En nuestro trabajo se aprecia de forma clara cómo afecta el grado de escoliosis en la calidad de vida de las pacientes, pues existen diferencias significativas en las dimensiones que evalúan el dolor, autopercepción de imagen y satisfacción del tratamiento, siendo peor valoradas cuando el grado de escoliosis es de 30° Cobb o superior. La puntuación global del tratamiento también fue peor en el grupo con mayor grado de escoliosis. En cambio, no hay diferencias significativas en la función/actividad ni en la salud mental. Probablemente la no aparición de diferencias en la función/actividad ni en la salud mental se deba a que se analizan pacientes muy jóvenes (edad entre 10 y 20 años), lo que hace que aún no se haya iniciado el proceso degenerativo articular (artrosis), y además son pacientes con un proyecto vital intenso, lo que minimiza su impacto sobre estas 2 dimensiones.
Comparando con otros trabajos se han encontrado estudios de seguimiento a largo plazo de la escoliosis analizando su repercusión en la salud. Así, existe un estudio que abarca 50 años realizado por Weinstein17 centrado en la salud y la función que analiza como medidas de resultado la mortalidad, el dolor de espalda, la sintomatología respiratoria, la función general, la depresión y la imagen corporal. Los resultados que aportan se resumen en un alto nivel funcional en estos pacientes, con poco impedimento físico (salvo el relacionado con el dolor y los problemas estéticos). Los resultados obtenidos por el trabajo de Weinstein son concordantes con los obtenidos en nuestro trabajo.
Danielsson et al.18 realizan un seguimiento prolongado (20 años) de pacientes con escoliosis idiopática del adolescente analizando la calidad de vida distinguiendo 3 grupos; los intervenidos, lo que habían sido tratados con corsé y un grupo control. Observaron que los pacientes con escoliosis tenían aproximadamente la misma calidad de vida relacionada con la salud que la población general, con un porcentaje pequeño (4%) que presentaban una «severa disminución del bienestar psicológico» y un porcentaje menor (1,5%) con una «severa discapacidad física debida al dolor», lo cual también va en la misma línea que los resultados obtenidos por nosotros.
Por otro lado, existen estudios que tratan de analizar la influencia del tratamiento ortésico sobre la calidad de vida. Así, Deceuninck et al. estudian este fenómeno en niños y adolescentes con escoliosis idiopática, comparando entre 2 tipos de corsés con el siguiente resultado: puntuación media del SRS de 4,05 para un corsé y de 3,77 para otro19. En nuestro trabajo no hemos diferenciado entre los tratamientos recibidos por las pacientes.
A pesar del conocimiento de la clínica, la epidemiología y la búsqueda de las ciencias básicas, la etiopatiogenia de la escoliosis idiopática continúa siendo desconocida20–22.
Son 6 los subgrupos de factores reconocidos implicados en la etiopatogénesis: los factores genéticos, anormalidades del sistema nervioso, anormalidades del crecimiento musculoesquelético, disfunción metabólica y hormonal. Los factores biomecánicos, factores medioambientales y de estilo de vida aún no bien definidos. En general se propone un modelo integrador de dichos factores en la etiopatogenia de la escoliosis idiopática.
Respecto a los factores genéticos hay que tener en cuenta que la escoliosis idiopática se observa a menudo en múltiples miembros de una misma familia, de lo que se deduce que existe un componente genético importante. En un metaanálisis de estudios en gemelos se demuestra la concordancia de escoliosis idiopática de hasta un 73% en monocigóticos y 36% en dicigóticos23. Sin embargo, Axenovich et al.24 analizaron el genealogía de 101 familias (738 individuos) y realizaron un complejo análisis de segregación. Apuntaron en el estudio genético, que las formas severas de escoliosis idiopática se podían atribuir a una herencia autosómica dominante, un mayor modelo del gen alelo con una penetrancia sexo-dependiente incompleto de los genotipos. En conjunto, los resultados de estos estudios se contradicen porque no está bien definido un locus. Esta ausencia de localización del locus puede ser explicada por la heterogeneicidad de los fenotipos y genotipos, la penetrancia incompleta y la expresión variable. Existen entonces múltiples genes que pueden estar implicados en esta alteración, y una fenocopia de éeta puede expresarse en algunas familias.
Otros factores que influyen son hormonales, metabólicos y neuromotores.
Varios investigadores han demostrado que la pinealectomía en pollos, ratas y hámsteres, produce escoliosis y que a esto se le puede atribuir el efecto del descenso en la producción de melatonina, aunque esto es controvertido3, pues puede que la melatonina produzca, por otros mecanismos, efectos desconocidos sobre el crecimiento. Se han sugerido también anormalidades en la estructura y en la función de las plaquetas en pacientes con escoliosis idiopática. La evidencia demuestra que concentraciones elevadas de calmodulina alteran la actividad musculoesquelética con una consecuente progresión de las curvas21.
Las alteraciones en el sistema nervioso central también han sido descritas clásicamente en la etiopatogénesis de la escoliosis idiopática. Los estudios más relevantes sobre el tema son los que abordan las alteraciones neuroanatómicas y neuromorfológicas y los que definen la disfunción neurofisiológica, siendo los más novedosos los que abordan la alteración dinámica en las pruebas de posturografía y análisis de la marcha25,26.
Otros autores21 atribuyen la progresión de la escoliosis al sobrecrecimiento del raquis anterior en el pico de crecimiento del adolescente. Estudios con RM de la morfología vertebral torácica muestran que el crecimiento longitudinal de los cuerpos vertebrales en pacientes con escoliosis idiopática es desproporcionado y más rápido que los controles de la misma edad y sexo, debido a las osificaciones endocondrales. Por el contrario, tienen el crecimiento circunferencial de la membrana de osificación más lento en los cuerpos y los pedículos vertebrales. Sin embargo, los mecanismos de esta asimetría en el crecimiento todavía no están bien definidos.
Entre los sesgos del presente trabajo hay que tener en cuenta que la entrevista se realiza vía telefónica, lo cual puede dar lugar a segos de información y selección.
Como conclusiones podemos afirmar que la escoliosis afecta de forma importante a la calidad de vida de las personas que la padecen, existiendo una correlación negativa entre la gravedad de la escoliosis medida mediante grados Cobb y la calidad de vida27. No hay diferencias significativas en la función/actividad ni en la salud mental entre las pacientes, según su menor o mayor grado de escoliosis. El peso, la talla y el índice de masa corporal no han mostrado diferencias significativas según el mayor o menor grado de escoliosis.
Los autores declaran que han seguido los protocolos de su centro de trabajo sobre la publicación de datos de pacientes.
Conflicto de interesesDeclaramos que no hay conflicto de intereses.
Este cuestionario está diseñado para valorar el estado de su espalda. Es importante que usted mismo responda a las diferentes preguntas y que señale la respuesta más adecuada a cada pregunta.
- 1.
Si tuviera que pasar el resto de su vida con la espalda como la tiene ahora, ¿cómo se sentiría?
- -
Muy descontento
- -
Bastante descontento
- -
Ni contento ni descontento
- -
Bastante contento
- -
Muy contento
- -
- 2.
¿Cuál es su nivel de actividad actual?
- -
Permanentemente en cama
- -
No realiza prácticamente ninguna actividad
- -
Tareas ligeras y deportes ligeros
- -
Tareas moderadas y deportes moderados
- -
Actividad completa
- -
- 3.
¿Cuál es su nivel actual de actividad laboral o escolar?
- -
0% de lo normal
- -
25% de lo normal
- -
50% de lo normal
- -
75% de lo normal
- -
100% de lo normal
- -
- 4.
¿Le limita la espalda la capacidad para realizar sus actividades habituales por casa?
- -
Siempre
- -
Casi siempre
- -
Algunas veces
- -
Sólo alguna vez
- -
Nunca
- -
- 5.
¿Cree que el estado de su espalda influye en sus relaciones personales?
- -
Mucho
- -
Bastante
- -
Regular
- -
Un poco
- -
Nada
- -
- 6.
¿Cuánto dolor ha tenido en los últimos 6 meses?
- -
Intenso
- -
Moderado
- -
Regular
- -
Ligero
- -
Ninguno
- -
- 7.
¿Cuánto dolor ha tenido en el último mes?
- -
Intenso
- -
Moderado
- -
Regular
- -
Ligero
- -
Ninguno
- -
- 8.
¿Tiene dolor de espalda en reposo?
- -
Siempre
- -
Casi siempre
- -
Algunas veces
- -
Sólo alguna vez
- -
Nunca
- -
- 9.
¿Toma medicamentos para su espalda?
- -
Calmantes fuertes a diario
- -
Calmantes fuertes 1 a la semana o menos
- -
Calmantes suaves a diario
- -
Calmantes suaves 1 a la semana o menos
- -
Ninguno
- -
- 10.
En los últimos 3 meses, ¿cuántos días ha faltado al trabajo o al colegio debido al dolor de espalda?
- -
4 ó más
- -
3
- -
2
- -
1
- -
0
- -
- 11.
¿Cómo le queda la ropa?
- -
Muy mal
- -
Mal
- -
Aceptable
- -
Bien
- -
Muy bien
- -
- 12.
¿Cómo describiría el aspecto de su cuerpo (sin tener en cuenta el de la cara y extremidades)?
- -
Muy malo
- -
Malo
- -
Regular
- -
Bueno
- -
Muy bueno
- -
- 13.
¿Ud. o su familia tienen dificultades económicas por su espalda?
- -
Mucho
- -
Bastante
- -
Regular
- -
Un poco
- -
Nada
- -
- 14.
¿Le dificulta la situación de su espalda salir de casa con sus amigos o su familia?
- -
Siempre
- -
Casi siempre
- -
Algunas veces
- -
Sólo alguna vez
- -
Nunca
- -
- 15.
¿Se siente atractivo/a con el estado actual de su espalda?
- -
En absoluto
- -
No, no demasiado
- -
Ni atractivo/a ni poco atractivo/a
- -
Sí, bastante
- -
Sí, mucho
- -
- 16.
Durante los últimos 6 meses, ¿cuánto tiempo estuvo muy nervioso?
- -
Siempre
- -
Casi siempre
- -
Algunas veces
- -
Sólo alguna vez
- -
Nunca
- -
- 17.
Durante los últimos 6 meses, ¿se sintió tan bajo de moral que nada podía animarle?
- -
Siempre
- -
Casi siempre
- -
Algunas veces
- -
Sólo alguna vez
- -
Nunca
- -
- 18.
Durante los últimos 6 meses, ¿cuánto tiempo se sintió calmado y tranquilo?
- -
Nunca
- -
Sólo alguna vez
- -
Algunas veces
- -
Casi siempre
- -
Siempre
- -
- 19.
En los últimos 6 meses, ¿se ha sentido desanimado y triste?
- -
Siempre
- -
Casi siempre
- -
Algunas veces
- -
Sólo alguna vez
- -
Nunca
- -
- 20.
Durante los últimos 6 meses, ¿cuánto tiempo se sintió feliz?
- -
Nunca
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Sólo alguna vez
- -
Algunas veces
- -
Casi siempre
- -
Siempre
- -
- 21.
¿Está satisfecho con los resultados del tratamiento?
- -
Completamente insatisfecho
- -
Bastante insatisfecho
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Indiferente
- -
Bastante satisfecho
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Completamente satisfecho
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- 22.
¿Aceptaría el mismo tratamiento otra vez si estuviera en la misma situación?
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No, sin duda
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Probablemente no
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No estoy seguro/a
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Probablemente sí
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Sí, sin duda
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