Calcular el número de prescripciones de antibióticos por vía oral mediante receta privada (RP) y prescripción irregular (PI) en farmacia comunitaria (FC).
Material y métodosEstudio observacional, descriptivo, transversal, multicéntrico realizado en todo el territorio nacional durante una semana en cada estación del año (2016-2017). Se analizaron prescripciones de antibióticos de uso sistémico J01 (clasificación Anatómica Terapéutica Química [ATC]) por vía oral con RP o PI considerándose como variables las características de la prescripción y el resultado de la consulta.
ResultadosParticiparon en el estudio 365 farmacéuticos de 247 farmacias, que recibieron 3.569 demandas de antibióticos mediante RP (71% cumplían la normativa) y 833 con PI.
Las RP fueron prescritas por odontólogos (43,7%), médicos de atención primaria (MAP) (26,20%) y pediatras (10,3%), para tratar infecciones odontógenas (39,8%), respiratorias de vías superiores (25,6%), vías inferiores (10,3%) y urinarias (7,7%). Los antibióticos más prescritos fueron amoxicilina (27,9%) y amoxicilina-clavulánico (25,2%).
Las PI consistieron en partes de urgencia (32,8%), prescripciones orales/telefónicas (20,4%) y peticiones por cantidad insuficiente (10%). Los prescriptores fueron MAP (25,2%), odontólogos (24,7%) y pediatras (12%) para tratar infecciones respiratorias superiores (32,5%), odontógenas (25,8%), urinarias (14,2%) y respiratorias inferiores (10,8%). Los antibióticos más prescritos fueron amoxicilina-clavulánico (27,4%) y amoxicilina (21,6%).
Pese a que todos los pacientes con PI fueron derivados al médico, únicamente el 45,4% aceptaron la derivación.
ConclusionesEste estudio ha permitido la obtención de datos de RP y PI, suponiendo un avance en el conocimiento del uso de antibióticos en nuestro país para una posterior planificación de los servicios de salud.
To quantify the proportion of oral antibiotics through private prescription (PP) and irregular prescription (IP) in the Community Pharmacy (CP).
Material and methodsCross-sectional multicentre study carried out in Spanish community pharmacies over a 4week period, one in each season of the year. An analysis was made of private and irregular prescriptions of oral J01 antibacterials for systemic use (Anatomical Therapeutic Chemical [ATC] classification). The study variables used were prescription and consultation characteristics.
ResultsA total of 3569 PP (71% followed legislation) and 833 IP were recorded by 365 pharmacists working in 247 CP.
PP were prescribed by dentists (43.7%), general practitioners (GP) (26.20%), and paediatricians (10.3%), to treat teeth infections (39.8%), upper respiratory infections (25.6%), lower respiratory infections (10.3%), and urinary infections (7.7%). The most prescribed antibiotics were amoxicillin (27.9%) and amoxicillin-clavulanic (25.2%).
IP came from Emergency Departments (32.8%), oral/phone prescriptions (20.4%), and patient demand due to insufficient quantity of antibiotic to complete treatment (10%). Prescriptions came from GP (25.2%), dentists (24.7%), and paediatricians (12%) to treat upper respiratory infections (32.5%), teeth infections (25.8%), urinary infections (14.2%), and lower respiratory infections (10.8%). The most prescribed antibiotics were amoxicillin-clavulanic (27.4%) and amoxicillin (21.6%).
Since every patient with IP was referred to the GP, 45.4% of them accepted the recommendations of the pharmacists.
ConclusionsThis study obtained PP and IP characteristics, unknown and needed data in Spain for future health policy plans.
Los antibióticos, desde su descubrimiento e introducción en la práctica clínica, han supuesto una estrategia indispensable para el tratamiento de las infecciones bacterianas1. Sin embargo, la aparición de resistencias a antibióticos (RAB), especialmente de cepas multirresistentes, supone un reto para la humanidad debido al aumento de la morbimortalidad global asociada2-5.
Entre los múltiples factores que pueden provocar la aparición de RAB destacan el uso indiscriminado de los antibióticos y la falta de adecuación de los mismos6,7. De hecho, está demostrado que existe una relación proporcional entre el uso de antibacterianos y el aumento de microorganismos resistentes a estos8. En nuestro país, aproximadamente el 90% de todos los antibióticos se prescriben en Atención Primaria (AP)9, donde se estima que existe un elevado número de prescripciones inadecuadas (40-50%)4,10.
Según el último informe del Organismo de Vigilancia Europeo de Consumo de Antibióticos, España tiene cifras de consumo global superiores a la media europea11. Ese informe solo incorpora datos de recetas prescritas en el Sistema Nacional de Salud (SNS) y mutualidades, sin contabilizar prescripciones realizadas mediante receta privada (RP), otras prescripciones (partes de urgencia, altas…) o automedicación.
Según datos estimados del estudio JIACRA publicado en 20186, en el año 2016, cuando se diseñó e inició este estudio, el consumo estimado de antibióticos de uso sistémico del grupo J01 (clasificación Anatómica Terapéutica Química [ATC]) se cifró en 33,12DHD (dosis diaria definida por 1.000 habitantes y día), siendo el 67,3% correspondiente a receta oficial del SNS (22,29DHD) y 32,7% a RP. Posteriormente se han publicado datos de consumo global de 2018, siendo la cifra de 24,33DHD (31,3% debido a RP)12.
Independientemente de estos datos de consumo, existen en las farmacias comunitarias (FC) solicitudes de prescripciones irregulares (PI), que son aquellas en las que, existiendo diagnóstico de infección, no se utiliza una receta médica oficial, sino que se prescribe a través de informes de urgencia, partes de alta médica, prescripciones en diferido (aquellos casos en los que el prescriptor aconseja al paciente la toma de un antibiótico concreto en caso de que se repitan los síntomas diagnosticados), prescripciones verbales/telefónicas, o los casos con insuficiente cantidad para completar el tratamiento, o pérdida o rotura del envase.
Por todo ello se puso en marcha la realización de este estudio, cuyo objetivo principal es:
- •
Calcular el número de prescripciones de antibióticos J01 por vía oral mediante RP (normalizada o no, según el RD1718/2010)13 y de PI.
El estudio tuvo como objetivos secundarios:
- •
Analizar el perfil del prescriptor.
- •
Evaluar el perfil de los antibióticos y los problemas de salud para los que se indican.
- •
Evaluar la intervención del farmacéutico.
Estudio descriptivo, observacional de corte transversal y multicéntrico (clasificado como EPA-OD por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios [AEMPS]) realizado en FC de todo el territorio nacional durante 4semanas, una de cada estación del año: 21-27/11/2016, 23-29/01/2017, 3-9/04/2017 y 19-25/06/2017. Esta diferenciación trimestral se realizó asemejando el análisis que realiza la AEMPS del consumo de antibióticos debido a la estacionalidad de las patologías para las que son prescritos.
El estudio fue aprobado por el Comité Ético del Hospital de Fuenlabrada.
Población del estudioPacientes que acudieron a las FC demandando antibióticos pertenecientes al grupo terapéutico J01 (antibacterianos para uso sistémico según la clasificación ATC).
Las FC incluidas fueron todas las farmacias de las 17 comunidades autónomas (el estudio no incluyó Ceuta y Melilla) con farmacéuticos socios de la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (SEFAC) que decidieron participar en el estudio de manera voluntaria14.
Criterios de inclusiónSujetos que solicitasen en la FC un antibiótico del grupo terapéutico J01 para administración oral.
Criterios de exclusión- •
Sujetos con dificultades de comunicación, psicológicas o lingüísticas que no estuviesen capacitados para responder a las preguntas del cuestionario.
- •
Sujetos que solicitasen un antibiótico del grupo J01 para administración por vía diferente a la vía oral.
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Solicitantes de antibióticos con receta financiada por el SNS, mutualidades, mutuas de accidentes de trabajo o receta veterinaria.
- •
Sujetos que no diesen su consentimiento para participar en el estudio.
En base a las ventas de antibióticos por vía oral del grupo J01 de los 3 últimos años, se estimó un número aproximado de 1.200.000 demandas de antibióticos fuera del SNS en 4semanas. Fijando un nivel de confianza del 95%, una precisión del 3% y una p de 0,5, que maximiza el tamaño muestral al no conocer los porcentajes aproximados, se obtuvo un tamaño muestral de 1.066 solicitudes de antibióticos.
Las variables incluidas en el estudio fueron (fig. 1):
- •
Según características de los demandantes/pacientes: quién realiza la demanda, sexo, edad y situación especial (embarazo/lactancia) del paciente, nivel educativo del demandante, tipo de paciente (esporádico/habitual), existencia o no de receta médica.
- •
Según características de la prescripción: prescriptor, tipo de antibiótico prescrito e indicación del mismo. Cuando se trató de RP se estudió si esta seguía la normativa vigente (RD1718/201013); en el caso de PI se contempló, además, el tipo de prescripción.
- •
Según características de la consulta: existencia de intervención por parte del farmacéutico, oferta de información personalizada del medicamento (IPM) al paciente, derivación al médico, aceptación de derivación por parte del paciente, detección de incidencias (tanto problemas relacionados con la medicación como resultados negativos de la misma).
Ante la demanda en la FC de un antibiótico del grupo terapéutico J01 por vía oral el farmacéutico iniciaba el protocolo de dispensación basado en el Foro de Atención Farmacéutica en FC15 y, tras obtener el consentimiento del paciente, se realizaban las preguntas recogidas en un cuaderno electrónico de recogida de datos (eCRD, www.investigacionsefac.org/antibioticos/) (fig. 1).
Al finalizar la dispensación, el farmacéutico podía entregar una hoja de recomendaciones con educación sanitaria sobre el uso correcto de los antibióticos14.
Análisis estadísticoTodas las variables recogidas eran categóricas, por lo que se realizó un análisis de frecuencias. Para evaluar si existían diferencias estadísticamente significativas entre las diferentes variables del estudio en función de las características de los pacientes se realizaron regresiones logísticas (variables con respuesta binaria) o regresiones logísticas ordinales (variables de respuesta múltiple). En las variables de respuesta binaria no se tuvieron en cuenta las demandas que no registraron la respuesta.
Los análisis estadísticos se realizaron para un nivel de confianza del 95%. Se utilizó el software estadístico STATA MP13.1.
ResultadosEn el estudio se incluyeron 365 farmacéuticos pertenecientes a 247 farmacias cuyas características se detallan en el artículo de 2018 de Molinero et al.14. Durante el periodo de estudio se dispensaron un total de 21.254 envases de antibióticos por vía oral, incluidas las recetas del SNS, RP, mutualidades y recetas veterinarias.
Un total de 3.569 pacientes con RP y 833 con demanda por PI fueron incluidos en el estudio. Como se observa en la tabla 1, el paciente acudió a la FC en mayor número de casos (74,1%) cuando presentaba RP en comparación con la demanda por PI (62,8%), en la que hubo mayor número de cuidadores. En las RP existió mayor número de personas con estudios universitarios y menor porcentaje sin estudios o estudios primarios comparado con la demanda por PI, así como mayor número de mujeres lactantes, con diferencias estadísticamente significativas.
Caracterización de los pacientes participantes
Receta privada, n (%) | Prescripción irregular, n (%) | p | |
---|---|---|---|
Quién demanda | |||
Paciente | 2.646 (74,1) | 518 (62,2) | |
Cuidador | 920 (25,8) | 313 (37,6) | 0,001 |
No identificadoa | 3 (0,1) | 2 (0,2) | |
Sexo del paciente | |||
Hombre | 1.580 (44,3) | 362 (43,5) | |
Mujer | 1.974 (55,3) | 467 (56,0) | |
No identificadoa | 15 (0,4) | 4 (0,5) | 0,893 |
Edad del paciente | |||
<1 año | 1 (0,0) | 0 (0,0) | |
1-4 años | 136 (3,8) | 10 (5,5) | |
5-14 años | 177 (5,0) | 49 (5,9) | |
15-24 años | 139 (3,9) | 39 (4,7) | |
25-44 años | 763 (21,4) | 142 (17,1) | |
45-65 años | 847 (23,7) | 155 (18,6) | |
66-75 años | 246 (6,9) | 39 (4,7) | |
>75 años | 179 (5,0) | 56 (6,7) | |
No identificadoa | 1.081 (30,3) | 307 (36,8) | 0,000 |
Situación especialb | |||
Embarazo | 17 (0,8) | 6 (1,3) | 0,394 |
Lactancia | 23 (1,2) | 1 (0,2) | 0,061 |
Nivel educativo | |||
Sin estudio | 236 (6,6) | 75 (9,0) | 0,030 |
Estudios primarios | 873 (24,5) | 220 (26,4) | |
Estudios secundarios | 1.419 (39,8) | 328 (39,4) | |
Estudios universitarios | 1.012 (28,3) | 206 (24,7) | |
No identificadoa | 29 (0,8) | 4 (0,5) | |
Tipo de paciente | |||
Esporádico | 1.591 (44,6) | 359 (43,1) | 0,740 |
Habitual | 1.970 (55,2) | 472 (56,7) | |
No identificadoa | 8 (0,2) | 2 (0,2) |
Las 3.569 RP incluidas suponen el 16,8% del total de antibióticos dispensados por vía oral en las FC. De ellas, 2.541 (71%) cumplían la normativa (RD1718/2010)13 y 1.028 (29%) no. El 97,6% (n=3.483) de las demandas de antibióticos mediante RP fue dispensado, tanto si se cumplía la normativa como si no (RP sin formato requerido y/o anterior al RD1718/2010).
Los prescriptores que realizaron más RP fueron (tabla 2): odontólogos, seguidos de médicos de AP y pediatras; la tendencia se mantuvo tanto en las RP que cumplían la normativa como en las que no.
Caracterización de la prescripción
Receta privada, n (%) | Prescripción irregular, n (%) | |
---|---|---|
Prescriptor | 1.560 (43,8) | 206 (24,7) |
Odontólogo | 935 (26,3) | 210 (25,2) |
Médico de AP, pediatra | 367 (10,4) | 100 (12,0) |
Dermatólogo | 86 (2,5) | 32 (3,8) |
Ginecólogo | 87 (2,6) | 22 (2,6) |
Urólogo | 92 (2,7) | 29 (3,5) |
Digestivo | 33 (0,9) | 4 (0,5) |
Neumólogo | 72 (2,0) | 28 (3,4) |
Otorrinolaringólogo | 76 (2,1) | 22 (2,7) |
Alergólogo | 7 (0,2) | 1 (0,1) |
Otro | 230 (6,5) | 171 (20,5) |
No identificadoa | 0 (0,0) | 8 (1,0) |
Tipo de antibiótico | ||
Betalactámico | 1.928 (54,0) | 420 (50,4) |
Cefalosporina 1.ª | 8 (0,2) | 1 (0,1) |
Cefalosporina 2.ª | 136 (3,8) | 30 (3,6) |
Cefalosporina 3.ª | 87 (2,5) | 18 (2,2) |
Fluoroquinolona | 324 (9,1) | 77 (9,2) |
Lincosamida | 62 (1,7) | 13 (1,6) |
Macrólido | 617 (17,3) | 142 (17,1) |
Sulfonamida | 19 (0,5) | 7 (0,8) |
Tetraciclina | 72 (2,1) | 15 (1,8) |
Asociación | 117 (3,3) | 25 (3,0) |
Otro | 162 (4,5) | 77 (9,2) |
No identificadoa | 37 (1,0) | 8 (1,0) |
Indicación del antibiótico | ||
Tracto respiratorio superiorb | 913 (25,6) | 271 (32,5) |
Odontógenas | 1.419 (39,8) | 215 (25,8) |
Tracto respiratorio inferiorc | 367 (10,3) | 90 (10,8) |
Piel y partes blandas | 178 (5,0) | 65 (7,8) |
Tracto urinario | 276 (7,7) | 118 (14,2) |
Genitales | 67 (1,9) | 12 (1,4) |
Gastroenteritis/Diarrea del viajero | 40 (1,1) | 17 (2,1) |
Otro | 262 (7,3) | 45 (5,4) |
No identificadoa | 47 (1,3) | − |
Total | 3.569 (100) | 833 (100) |
Los antibióticos más prescritos (tabla 2) fueron betalactámicos del tipo amoxicilina, amoxicilina-clavulánico, seguidos de azitromicina, ciprofloxacino y fosfomicina. Dichos antibióticos se utilizaron mayoritariamente para tratamiento (84,7%) en lugar de profilaxis (15,1%). Las indicaciones fueron infecciones odontógenas, respiratorias de vías superiores, de vías inferiores y urinarias.
Prescripción irregularSe recibieron 833 demandas con PI. Destaca el hecho de que el mayor porcentaje comprendía partes de urgencia, seguido de prescripciones orales/telefónicas realizadas por el odontólogo y peticiones por insuficiente cantidad de antibiótico para completar el tratamiento (fig. 2).
Motivos de demanda con prescripción irregular.
1. Informe de urgencias.
2. Informe de alta hospitalaria.
3. Prescripción oral/telefónica odontólogo.
4. Insuficiente cantidad para completar tratamiento.
5. Pérdida o rotura del envase.
6. Tratamiento en diferido para situaciones especiales (asma, EPOC, ITU).
7. Profilaxis previa a intervención.
8. Otras.
9. No sabe/No contesta.
Los prescriptores más frecuentes (tabla 2) fueron médicos de AP seguidos de odontólogos y pediatras. En consonancia, dichos antibióticos se demandaron para tratar infecciones en el siguiente orden: respiratorias de vías superiores, odontógenas, urinarias y respiratorias de vías inferiores.
Los antibióticos más demandados (tabla 2) fueron betalactámicos del tipo amoxicilina-clavulánico, amoxicilina, y otros como azitromicina, fosfomicina y ciprofloxacino.
Intervención del farmacéuticoEl farmacéutico intervino en prácticamente todos los pacientes (92,4% en RP y 96% en demanda por PI).
En el caso de RP, el farmacéutico ofreció IPM en el 69,3% (n=2452) de las demandas sobre el correcto uso del medicamento, pautas, etc., y no dispensó el 2,4% (n=86), principalmente por detección de contraindicaciones, posibles interacciones o alergias.
El 73,8% (n=615) de los pacientes con demanda por PI recibieron IPM y el 96,0% (n=800) fueron derivados al médico de forma verbal al paciente; de ellos, únicamente el 45,4% (n=363) aceptaron la derivación para obtener la receta normalizada correspondiente. El principal motivo de rechazo de la derivación fue debido a que el paciente no entendía por qué no podía obtener el medicamento a pesar de tener un documento del médico (como es el informe de urgencias) o haber entregado una receta previa en caso de demanda por cantidad insuficiente. Este hecho se produjo en mayor proporción con pacientes esporádicos (52,7%, n=230) frente a los habituales de la farmacia (43,6%, n=190), existiendo diferencias estadísticamente significativas.
Se ofreció información escrita acerca de la RAB en el 49,3% (n=1759) de todas las demandas realizadas mediante una hoja de recomendaciones SEFAC sobre el uso correcto de los antibióticos.
En el 26,7% de las dispensaciones el paciente desconocía que el antibiótico sobrante debía ser depositado en el punto SIGRE (Sistema Integrado de Gestión y Recogida de Envases), aportando el farmacéutico información para subsanar este desconocimiento.
DiscusiónEste estudio evalúa por primera vez en España el número y las características de la demanda de antibióticos mediante PI, así como de las RP.
Según nuestro estudio, uno de cada 6 envases dispensados de antibióticos por vía oral (16,8%) provenía de RP. Se trata de datos inferiores a las estimaciones de la AEMPS6, que calcula un 32,6%.
Prácticamente una de cada tres RP no cumplía con la legislación (RD 2010)13, a pesar de ser un documento normalizado y obligatorio desde el 21/01/201316. Estas recetas se dispensaron finalmente, ya que el paciente no entendía que tuviese que volver de nuevo al prescriptor por una cuestión de forma.
La demanda por PI supuso casi el 4% del total de peticiones de antibióticos. Cabe destacar el elevado porcentaje de partes de urgencia (cercano al 30%) y prescripciones orales/telefónicas de odontólogos. Este porcentaje es similar al obtenido en el estudio de Llull et al.17, realizado en Baleares y en el que se obtuvo un porcentaje de informes de urgencias del 25,6%. En nuestro estudio, menos de la mitad de los pacientes aceptaron volver al prescriptor para que les extendiera una receta oficial, reforzando de nuevo la necesidad de educación al paciente por parte de todos los profesionales sanitarios18.
Los betalactámicos, los macrólidos y las quinolonas son los más utilizados en España19, representando el 85,1% del consumo total de antibióticos en AP. En nuestro estudio se apreció esta misma tendencia, siendo los betalactámicos, seguidos de los macrólidos, los antibióticos más prescritos bajo RP y PI, dato que coincide con las recetas del SNS12. La amoxicilina, como principio activo único y conjuntamente con clavulánico, fueron los antibióticos más prescritos en RP, lo cual se explica debido a que son los antibióticos de elección en infecciones odontógenas y respiratorias (primera y segunda indicaciones en RP). Esta tendencia se ha comprobado además en otros estudios, tanto en España como en Europa19.
Las infecciones odontógenas suponen la tercera causa de consumo de antibióticos en España20 y generan un 10% de las prescripciones de antibióticos con receta del SNS en AP. En nuestro estudio, estas infecciones dieron lugar a la prescripción del 6,7% del total de envases de antibióticos dispensados mediante RP, lo que, sumado a lo que aportan los de AP (2,4%), da un porcentaje del 9,1%, por lo que estos datos están dentro de lo esperable. De hecho, las infecciones odontógenas supusieron la mayor causa de prescripción en RP (43,8%) y la segunda en demanda por PI (24,7%).
Las limitaciones del presente trabajo incluyen la posible existencia de un sesgo de información diferencial, puesto que la información sobre las indicaciones de las prescripciones se obtiene de los pacientes, con excepción de los partes de urgencias e informes de alta, ya que son los únicos documentos que recogen el diagnóstico realizado por el profesional sanitario. Este sesgo podría ser eliminado, permitiendo al farmacéutico el acceso a la historia clínica del paciente; ello aumentaría a su vez la calidad asistencial, incrementando la seguridad del paciente. Puede haber existido también un sesgo de selección, puesto que no existió aleatorización de los pacientes incluidos en el estudio.
Además, puesto que los farmacéuticos participantes fueron profesionales voluntarios, es probable que hayan participado los farmacéuticos más motivados. Esto no resta validez a los resultados, ya que la muestra es representativa del colectivo21, y hay farmacéuticos que ejercen en todas las comunidades autónomas, en diferentes perfiles de farmacia y con diferentes posiciones dentro de las FC14. Por ello, entendemos que los datos obtenidos son extrapolables a la situación real de las demandas de antibióticos en las FC de España. En cuanto a la recogida de datos, hubo farmacéuticos que se registraron en el eCRD pero no llegaron a participar (n=24), representando el 7% de los farmacéuticos inscritos; la información sociodemográfica relacionada con los farmacéuticos14 hace referencia a los registrados en el eCRD que trabajan en farmacias que participaron en el estudio.
Para futuras investigaciones sería conveniente realizar estudios sobre la prevalencia de antibióticos apropiados prescritos en nuestro país, puesto que en otros países se ha estimado hasta un 30% de prescripciones de antibióticos inapropiadas7.
Este estudio ha permitido la caracterización de las demandas por PI y RP, lo cual supone un avance en el conocimiento del uso de antibióticos en nuestro país para una posterior planificación de los servicios de salud. Esta planificación incluye acciones como el aumento de la cobertura de la receta electrónica en servicios de urgencias y hospitalarios, aumento del control en el uso de la RP normalizada, normalización de una prescripción en diferido en los casos de prescripciones orales/telefónicas de las consultas privadas, aumento del control de la automedicación22,23 o educación del paciente sobre el uso de los antibióticos donde deben involucrarse todos los profesionales sanitarios, incluidos los farmacéuticos comunitarios24-26. Todas estas acciones redundarán en mejorar el control de la prescripción y de la dispensación de los antibióticos en AP, contribuyendo de esta forma a la disminución de las RAB.
ConclusionesExiste un elevado porcentaje de antibióticos demandados en FC mediante RP o PI, aproximadamente un 20%. Un tercio de las RP no cumple la normativa y la mayor parte de las demandas de PI, que no pudieron ser dispensadas, está constituida por partes de urgencia, prescripciones orales/telefónicas realizadas por el odontólogo y peticiones del paciente por insuficiente cantidad de antibiótico.
Los prescriptores mayoritarios en RP fueron odontólogos que prescribieron antibióticos betalactámicos para infecciones odontógenas, mientras que en demandas por PI han sido médicos de AP que prescribieron antibióticos betalactámicos para infecciones de vías respiratorias superiores.
Aunque el farmacéutico debía derivar al médico todos los casos de demanda por PI como parte de su intervención, menos de la mitad de los pacientes aceptaron dicha indicación.
FinanciaciónEl presente trabajo ha sido financiado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), dentro del Plan Nacional Resistencia a Antibióticos (PRAN).
AutoríaLos autores contribuyeron por igual al diseño del estudio, desarrollo de la investigación, análisis de los resultados, redacción del manuscrito y revisión del contenido final.
Conflicto de interesesNinguno.
A todos los farmacéuticos participantes en el estudio.