Históricamente, la osteopatía se fundamentó y se desarrolló desde una base empírica, a partir de la cual fue creciendo, a medida que nuestros antecesores observaban la realidad y las consecuencias de sus intervenciones.
La curiosidad y la inquietud de Andrew Taylor Still por encontrar el origen y la resolución de los problemas de salud iniciaron la secuencia de acontecimientos que culminaron con la metodología científica aplicada en la osteopatía.
Actualmente, en todas las disciplinas sanitarias, el conjunto de procedimientos que los terapeutas deben aplicar para resolver sus cuestiones e inquietudes acerca de los problemas de salud se encuentran estandarizados con la sistemática del método científico. Esta forma de proceder nos permite generar afirmaciones que contribuyen al desarrollo de la ciencia osteopática, sin menoscabo de la fundamentación empírica, que sigue siendo esencial para nuestra apropiada terapéutica.
Sin embargo, las evidencias aportadas individualmente por cada uno de los investigadores en osteopatía conforman un conjunto de hechos demostrados y efectos reproducibles sobre los que se construye la nueva osteopatía basada en la evidencia (OBE).
Creemos que la visión integral de la disciplina osteopática debería mantenerse firme en sus convicciones empíricas, puesto que ello ha hecho posible la generación de nuevos conocimientos aplicados, relativos tanto al diagnóstico como al tratamiento de los problemas de salud, así como a todos aquellos factores profilácticos. Aunque, al mismo tiempo, la constante búsqueda de la verdad deberá hacernos metódicos, con la finalidad de eliminar los factores de confusión, los errores sistemáticos, las influencias del azar y las consecuencias lógicas de las probabilidades.
Por todo ello, quisiéramos agradecer a todos los investigadores en osteopatía su labor, puesto que están contribuyendo a la génesis de evidencias que se considerarán en un futuro cercano como los ladrillos sobre los cuales construir la OBE.
Este número recoge algunos de estos estudios en forma de manuscritos, que provienen de la investigación directa de muchos profesionales de la salud y del ámbito osteopático, algunos de los cuales se formaron en la Escuela de Osteopatía de Madrid. Agradecemos a todos ellos su esfuerzo y compartimos su gozo por el trabajo bien realizado.
Esperamos que lo disfruten.
Cleofás Rodríguez Blanco, DO-MRO, PhD, FT,
Ginés Almazán Campos, DO-MRO, FT
y François Ricard, DO-MRO
Editores de OSTEOPATÍA CIENTÍFICA