covid
Buscar en
Problemas del Desarrollo. Revista Latinoamericana de Economía
Toda la web
Inicio Problemas del Desarrollo. Revista Latinoamericana de Economía Buen vivir y descolonialidad: crítica al desarrollo y la racionalidad instrumen...
Información de la revista
Vol. 46. Núm. 181.
Páginas 217-220 (abril - junio 2015)
Compartir
Compartir
Descargar PDF
Más opciones de artículo
Vol. 46. Núm. 181.
Páginas 217-220 (abril - junio 2015)
Reseñas
Open Access
Buen vivir y descolonialidad: crítica al desarrollo y la racionalidad instrumentales, Boris Marañón (coord.), Instituto de Investigaciones Económicas-unam, México, 2014.
Visitas
1398
Erika Martínez
Instituto de Investigaciones Económicas-unam
Este artículo ha recibido

Under a Creative Commons license
Información del artículo
Texto completo

Esta obra fue realizada con la colaboración de distinguidos académicos y en ella se exponen las reflexiones sobre la emergencia de un nuevo horizonte de sentido histórico con base en la reciprocidad y la solidaridad, a través de cada acción social personal y colectiva.

Además, nos habla de la propuesta surgida en América Latina “el Buen vivir”, que constituye el reencuentro entre sociedad y naturaleza, ambas separadas de hecho a partir de la imposición de la colonialidad del poder …, “una postura racial de las relaciones sociales y la separación entre razón y naturaleza, entre sujeto y objeto” (Marañón, 2014: 42).

Al mismo tiempo, “el Buen vivir” es una crítica a la propuesta capitalista, el desarrollo, esto se ha convertido en la meta para los países de la periferia; sin embargo, en “el Buen vivir”, se plantea abandonar la pretensión del desarrollo como un proceso lineal; así como, el no mercantilizar las relaciones sociales, sino realimentar la calidad de vida o bienestar, para explotar la felicidad y “el Buen vivir”.

Es decir, que los aportes fundamentales de “el Buen vivir” son la recuperación de la unidad, así como la complementariedad entre sociedad y naturaleza, con el fin de establecer un vínculo relacional y no de exterioridad; siendo una alternativa que surge en los pueblos de América Latina, los cuales se convierten en una vía para la subsistencia humana, en donde aprovechan los conocimientos y las prácticas ancestrales de respeto a la naturaleza.

También, trata de una reformulación del concepto de economía, pues ya no parte de la escasez y, se redefinen las nociones del trabajo y de riqueza; se plantea una economía propia, que ante todo es una forma de defensa, control y administración de los territorios; las cuales debe ser actividades económicas y productivas con el fin de favorecer la soberanía alimentaria, la sostenibilidad de los territorios y de la vida.

A través de los autores se pueden apreciar los diferentes planteamientos teóricos acerca de las formas solidarias de existencia, sus tensiones y sus potenciales.

Esta obra no sólo se queda en la parte teórica, sino va más allá, porque, enfatiza el surgimiento de organizaciones económicas con base en el trabajo colectivo y los movimientos sociales, destacando las relaciones solidarias entre personas y naturaleza.

Entre los casos descritos está el de la región de la Sierra Norte de Oaxaca, formada por municipios de origen indígena y tradición mestiza, siendo su objetivo la relación social entre la naturaleza y sus pobladores; en donde el acceso, el uso y el usufructo de la tierra y los bosques se han redefinido, cambiando el concepto de trabajo como un bien social y no como una mercancía.

Por otra parte, la Comunidad Campesina en Camino –ubicada en el estado de Oaxaca–, se constituyó a partir de 1995, en una sociedad de solidaridad social, la cual implemento la defensa y el cuidado de la tierra, así como, la conservación y aprovechamiento sustentable de sus bienes naturales.

Otro estudio, es el de la cooperativa Unidad, Desarrollo y Compromiso (Undeco), cuyo enfoque es el cooperativismo integral, esto es, la sinergia entre las actividades de ahorro, consumo y producción. En sí, la organización persigue, por un lado, la construcción de una nueva sociedad y, por otro, en la vida cotidiana, resolver los problemas de los asociados; por lo cual, el dinero es sólo un medio, de manera que se avanza hacia una racionalidad solidaria.

Ahora bien, el caso de Grupo Cooperativo Jade y la Unión de Cooperativas Ñöñho de San Idelfonso Tultepec, Querétaro, se generaron bajo el marco de las economías solidarias, partiendo de las potencialidades de las personas y no de sus carencias. A partir de estas aspiraciones surge la necesidad de un proyecto educativo que refuerce y acompañe la producción; en este sentido, crean la licenciatura en Emprendimientos en Economías Solidarias, siendo pionera en México y se imparte en el Instituto Intercultural Ñöñho, A.C., el cual, se ubica en la comunidad indígena de San Idelfonso Tultepec, municipio de Querétaro. El objetivo es abrir el acceso a la población indígena y generar soluciones a los problemas más importantes de la comunidad, además de funcionar como incubadoras, ya que al finalizar la carrera, las y los estudiantes presentarán un proyecto productivo, con el fin de que se queden a trabajar en sus regiones y realicen un desarrollo sustentable, para que exista un beneficio mutuo entre los egresados y sus comunidades. El fin del Instituto y la Unión es buscar la recuperación del mercado de los pueblos ancestrales, donde el comercio, el precio, los alimentos, las relaciones y la comunidad, tenían una armonía con la naturaleza y los valores de equidad e intercambio.

En la Ciudad de México, se analizó la cooperativa de vivienda Unión de Palo Alto –esta es otra forma–, en donde la racionalidad instrumental del capitalista no tan sólo se manifiesta en la organización social del trabajo, sino también, en la organización social del espacio. Este es un caso de gestión social del hábitat, que involucra complejos procesos de auto-organización de pobladores urbanos que luchan por la tierra, la vivienda y los servicios básicos.

Por otra parte, la Cooperativa Tradoc, en el Salto, Jalisco, aborda el tema, sobre la recuperación de empresas por sus trabajadores, en donde se vive la lucha contra el desempleo, lo cual va a generar una solidaridad alternativa y emergente, acompañada de prácticas de reciprocidad y cooperación, los cuales formaron elementos que hoy constituyen nuevas relaciones laborales, redefiniendo el derecho al trabajo, frente al derecho de propiedad.

Por lo cual, “el Buen vivir”, tiene sus planteamientos en una nueva forma de vida, con bases en la racionalidad solidaria y liberadora.

Descargar PDF
Opciones de artículo