INTRODUCCION
La osteoporosis es un enfermedad caracterizada por baja masa ósea y deterioro de la microarquitectura, llevando al paciente a tener riesgo de fractura1. Cuando existe osteoporosis puede haber una fractura en cualquier parte del esqueleto. El valor de la masa ósea o densidad mineral ósea (DMO) es actualmente el mejor predictor del riesgo de fractura cuantificable2-5 y puede ser utilizado para el diagnóstico de la osteoporosis6. Los sitios más frecuentes de fractura son la columna, el fémur y el antebrazo.
En Colombia no existen datos estadÃsticos de evaluación de la masa ósea en cuanto a la edad del pico de masa ósea alcanzado, pérdida porcentual anual, asà como la prevalencia de la osteoporosis a partir de los 50 años.
Las técnicas convencionales para la medición de la masa ósea de forma no invasiva incluyen la absorciometrÃa de un solo fotón (SPA), la absorciometrÃa de doble fotón (DPA), la tomografÃa cuantitativa computarizada (TCQ), el ultrasonido, y la absorciometrÃa de fuente radiológica de doble haz (DXA)2-4, siendo esta última técnica la recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el diagnóstico de la osteoporosis. Se considera osteoporosis aquellos valores de masa ósea determinados mediante densitometrÃa, que se sitúen por debajo de las Â2,5 desviaciones estándar (DE) del valor medio de la masa ósea en el adulto sano (pico de masa ósea)5. Con este nuevo criterio, alrededor del 30 % de las mujeres americanas padecen osteoporosis, lo que viene a coincidir de forma aproximada con el número de fracturas observadas a lo largo de toda la vida en las mujeres americanas adultas.
La medida de la masa ósea a nivel periférico, especialmente en el antebrazo, es bien conocida desde hace muchos años6. Algunos estudios han demostrado el riesgo de fractura y la masa ósea a nivel del radio distal7, lo mismo que la precisión de esta región.
El estudio periférico provee información tanto cortical como trabecular cuando se realiza en la región distal y ultra distal del antebrazo2, y a nivel de calcáneo. Además de su versatilidad para realizar estudios con movilización del aparato, permite una cobertura mayor. Varios estudios han sugerido que la medición en el antebrazo tiene un buen valor predictivo en el riesgo de fractura8-10, de igual forma Cristiansen ha validado la región distal11 del antebrazo en el diagnóstico y seguimiento en mujeres postmenopáusicas, asà como la pérdida de la masa ósea relacionada con la edad.
El propósito de este estudio, ha sido valorar la pérdida de la masa ósea relacionada con la edad en personas sanas en una población de Colombia con un método DXA periférico (DTX 200 ) a nivel del antebrazo, observar el porcentaje de pérdida de masa ósea total a los 80 años, valorar la pérdida porcentual anual, el pico de masa ósea alcanzado y el porcentaje de osteoporosis a partir de los 50 años.
DISEÑO Y OBJETIVO DEL ESTUDIO
El objetivo principal consiste en conocer la evolución de la masa ósea de nuestra población, observar la evolución en el pico de masa ósea y ver la pérdida porcentual anual y total a los 80 años, asà como la prevalencia de osteoporosis a partir de los 50 años. Estos resultados son de gran importancia ya que en Colombia carecÃamos de datos estadÃsticos en relación a la osteoporosis.
Se trata de un estudio descriptivo de forma aleatoria, en donde se utilizó para el examen de densitometrÃa ósea un aparato con la técnica DXA (fuente radiológica), de antebrazo marca Osteometer DTX-200 con un programa 1.45 y 1.63 que mide la región distal y ultradistal del antebrazo, con una alta precisión y un error de menos del 1%. El tratarse de un aparato portátil permitió el desplazamiento a los diferentes sitios y de esta forma obtener una mayor cobertura.
Para conseguir la población a estudiar se diseñó un programa denominado «Vivamos sin fractura», realizándose charlas educativas en diferentes sitios de los municipios de la costa atlántica de Colombia, para luego practicar a los asistentes el examen densitométrico (fig. 1). Cada municipio se estratificó por zonas, y en cada zona se determinaron un número de exámenes a realizar. Los sitios escogidos eran escuelas y zonas de mayor tránsito de la gente. Contamos con el apoyo de las gobernaciones de algunos departamentos para el acceso y en la parte económica.
Fig. 1. Regiones de Colombia donde se realizaron las densitometrÃas óseas. DMO: densidad mineral ósea.
MATERIAL Y MÉTODOS
Se realizaron 4.720 estudios de densitometria ósea en mujeres de 20 a 80 años de forma indiscriminada, intentándose escoger por lo menos 5 mujeres por edad. La DMO del antebrazo fue medida con un aparato método DXA, marca Osteometer DTX-200, a nivel distal y ultradistal del radio con el programa 1.45 y 1.63. Se validó la precisión intraobservador in vitro del aparato con el phanton suministrado por el fabricante, y la precisión in vivo con dos mujeres sanas en 10 dÃas diferentes obteniéndose un coeficiente de variación (CV) del 0,8%. A cada persona se le realizaba el cuestionario de factores de riesgo de osteoporosis suministrado por la Asociación de Metabolismo Óseo y Mineral (ACOM ) para descartar al paciente que tuviese una patologÃa secundaria. Los municipios donde se realizó la campaña se escogieron al azar en los diferentes departamentos de la costa (Atlántico, BolÃvar, Magdalena, y Sucre ) y se les realizaba análisis de sangre ( hemograma, calcio, fósforo, pruebas de función renal proteÃnas totales, pruebas tiroideas ) que deberÃan ser normales para ser incluidas en el estudio.
Se contó con el apoyo económico de las diferentes gobernaciones. Se excluyeron pacientes con enfermedades crónicas, o que estuvieran tomando medicamentos que alteran el metabolismo fosfo-cálcico. No se incluyeron en el estudio pacientes con Ãndice de masa corporal (IMC) mayor de 27.
Todos los resultados de los pacientes fueron incluidos en los programas Epi info, y Excel para ser estadÃsticamente analizados posteriormente. Con el programa de Epi info se clasificaban los pacientes sanos, considerándose sanos cuando no tenÃan ningún factor de riesgo y los análisis de sangre eran normales. El total de mujeres escogidas como sanas fue de 741 pacientes, intentando analizar por lo menos 5 pacientes por año. En el programa Excel se realizaron las diferentes gráficas.
RESULTADOS
Se estudiaron 741 pacientes con una edad media de 51,6 ± 11,8 años. Talla media: 1,59 ± 6,4 cm. Peso medio: 60,1 ± 7,1 kg. Presentaron la menopausia a la edad media de 46 ± 4 años.
La tabla 1 muestra la correlación entre la masa ósea y la edad, observándose una correlación negativa que aparece a partir de los 50 años.
La tabla 2 relaciona las medias y desviaciones estándar por décadas observándose a nivel de radio distal el pico de masa ósea a los 30-39 años (0,476) y a nivel de radio ultradistal el pico de masa ósea se alcanzó entre los 20 y 30 años (0,375).
Estos datos se confirman en la figura 2 donde el comportamiento de la curva se mantuvo en meseta hasta los 50 años y posteriormente aparece un descenso lineal hasta los 80 años.
Fig. 2. Distribución de los valores de la densidad mineral ósea por décadas. DMOD: densidad mineral ósea distal; DMOU: densidad mineral ósea ultradistal.
Para establecer el t-score de nuestra población se obtuvo la media del adulto joven entre la población de 20 a 50 años (n = 361). Para el radio distal el t-score fue de 0,473 ± 0,050 y para el radio ultradistal de 0,371 ± 0,049.
En la tabla 3 se relaciona el porcentaje de osteoporosis por décadas y total a los 80 años, a partir de los 50. El promedio de osteoporosis a los 80 años fue del 32,6%.
El promedio de disminución porcentual anual fue de 0,7 a 1,4%. Se nota que, a partir de los 80 años, la disminución equivale a 0,15% a 0,4% destacando el lento remodelado óseo que ocurre en pacientes ancianos, lo que sugiere que no se requieren estudios muy frecuentes para evaluar la disminución de la masa ósea a estas edades (tabla 4 y fig. 3).
Fig. 3. Disminución de la densidad mineral ósea distal (DMOD) y ultradistal (DMOU) por años.
El descenso de la masa ósea se comenzó a observar a partir de los 50 años alcanzando un máximo a los 80 del 33% (tabla 5 y fig. 4).
Fig. 4. Disminución de la densidad mineral ósea (DMOD) y ultradistal (DMOU) en relación a la edad, a partir de los 50 años.
En la tabla 6 se compara la correlación de la masa ósea con la edad a partir de los 50 años con el trabajo de Mautalén12. Este descenso por décadas tiene una correlación de r= Â0,56 para Mautalén y r = Â0,53 en nuestro estudio. Además la disminución de la masa ósea total a los 80 años, es comparable en nuestra población con la observada en Argentina. La diferencia observada en la disminución a los 70 años entre la columna y el antebrazo se podrÃa justificar por la artrosis que se presenta a esta edad.
En la tabla 7 se muestra el pico de masa ósea alcanzado en diferentes estudios de la literatura13-16.
Como se puede observar en la tabla 8 la prevalencia de osteoporosis antes de los 50 años es muy rara. En nuestra población la osteoporosis aumenta de forma importante a partir de esta edad al igual que el estudio de Melton17. El descenso de la masa ósea anual estuvo en el promedio de 0,7% a 1,4% en nuestro estudio14 y de 0,8% a 1,2% en el trabajo de Tsouderos18.
Se ha encontrado una mayor disminución dela masa ósea en la década de los 50-60 coincidiendo probablemente con la supresión estrogénica. A los 80 años el descenso de la masa ósea es lento, por lo que no se recomiendan estudios de densitometrÃa frecuentes ya que dichos cambios no serÃan representativos (tabla 9).
DISCUSIÓN
En el presente estudio se analizaron 741 exámenes de DMO a nivel de antebrazo (radio distal y ultradistal) en mujeres sanas de una región de Colombia, para determinar los cambios de la masa ósea con la edad. Los valores máximos alcanzados (0,474 g/cm cortical-0,375 g/cm trabecular se observaron entre los 20 y 40 años. Entre los 20 y 50 años la masa ósea, se mantuvo en forma de meseta y posteriormente se observó un descenso lineal a partir de esa edad, alcanzando una disminución total de aproximadamente el 33% a los 80 años.
La correlación de la masa ósea con la edad fue negativa, es decir a mayor edad menos masa ósea ( r ~ Â0,53), con un nivel de significancia de p ~ 0,001, siendo esto comparable con mediciones de columna y fémur en otras poblaciones americanas12,14,16,17,19,20 y europeas13,15,21,22.
La prevelancia de osteoporosis aumentó de forma importante a partir de los 50 años siendo mucho más alta a los 80, con un promedio del 32,6% del total de la población a partir de los 50 años.
La disminución del hueso trabecular (1,4%) fue mayor que en el hueso cortical en la década de 50-60, siendo mucho menor en las décadas sucesivas.
Concluimos diciendo que nuestra masa ósea tiene un comportamiento similar a la de poblaciones americanas y europeas. Con este estudio se establecen datos estadÃsticos en nuestro paÃs que nos permiten con más certeza establecer programas de prevención para obtener una ganancia de mayor masa ósea antes de los 30 años, que es cuando alcanzamos el pico máximo, y evitar una pérdida acelerada a partir de los 50 años, que es cuando comienza el descenso lineal acelerado de la masa ósea coincidiendo con la supresión estrogénica. Estos cambios son más marcados en esta década a diferencia de los cambios a los 80 años que son más lentos, concepto ya establecido en otros estudios.
Como observamos en nuestros resultados, la prevalencia de osteporosis aumenta de forma importante a partir de los 50 años, con un promedio del 32,6% del total de la población a partir de esta edad, observándose un porcentaje mayor de osteoporosis entre los 60 y los 70 años, donde encontramos cerca del 40% de la población con osteoporosis. De esta forma los programas de prevención deberÃan estar encaminados a la población perimenopáusica. El DXA periférico a nivel de antebrazo ( DTX-200) es una buena técnica para valorar la pérdida de la masa ósea relacionada con la edad, además de permitir ampliar la cobertura en estudios epidemiológicos, ya que es de fácil transporte. Por presentar un error de precisión bajo (1%) es de gran utilidad en el diagnóstico de la osteoporosis postmenopáusica y permitirÃa un seguimiento en el tratamiento, sobre todo en zonas donde la población no tiene acceso a un DXA central.
Seguramente necesitamos estudios de poblaciones más amplias, incluyendo diferentes zonas del paÃs, además de otras regiones anatómicas del cuerpo como la columna y el fémur para aumentar aún más la sensibilidad de la curva.
NOTICIAS
MEDITERRANEAN SOCIETY FOR OSTEOPOROSIS AND OTHER SKELETAL DISEASES
POSTGRADUATE COURSE ON METABOLIC BONE DISEASES
11-13 de abril 2002
PADOVA - ABBAZIA DI PRAGLIA (ITALIA)
Información:
Prof. Gaetano Crepaldi M.D.
ClÃnica Médica I
Departamento de Ciencias Médicas y Quirúrgicas
Universidad de Padova
Via Giustiniani, 2
35128 Padova, I