Paciente masculino de 52 años con antecedentes de carcinoma de colon de un año de evolución. Fue tratado quirúrgicamente y finalizó último ciclo de quimioterapia 6 meses antes. Es derivado al Centro de Micología de la UBA para un examen micológico de lesiones extendidas, eritematoescamosas, con bordes difusos y poco pruriginosas, en tronco y glúteos (fig. 1). Se obtienen escamas por raspado de los bordes de la lesión. En el estudio microscópico con solución de blanco de calcoflúor con KOH 10% se observan, utilizando un microscopio de fluorescencia a 390-420nm, abundantes filamentos fúngicos ramificados y tabicados compatibles con dermatofitos o con otros hongos filamentosos no dermatofitos (fig. 2). El cultivo en agar miel Sabouraud y agar Lactrimel fue negativo.
Las micosis superficiales son muy frecuentes y de distribución universal1. Toda alteración del funcionamiento de la inmunidad mediada por células modifica la respuesta inflamatoria y la clínica de las micosis2,3. En pacientes inmuncomprometidos las lesiones son inespecíficas; en general son extensas, poco delimitadas y muy poco inflamatorias, a diferencia de las lesiones que se observan en los huéspedes inmunocompetentes. El agente causal no fue identificado por la falta de desarrollo en los medio de cultivos; en la literatura se documenta una frecuencia de aislamiento de hongos dermatofitos de un 50 %, aproximadamente3. En estos pacientes es importante la sospecha clínica de micosis superficial, de modo que se indique la realización de estudios micológicos que incluyan microscopía y cultivo. Esta metodología permitiría llegar al diagnóstico de certeza y, en consecuencia, adoptar una conducta terapéutica apropiada.