Mujer de 41años, sin antecedentes mórbidos y asintomática. El control ginecológico describe tacto vaginal anexo izquierdo aumentado de volumen. La eco TV evidencia masa ovárica izquierda compleja, predominio sólido de 15×13cm y líquido libre. La TC evidencia masa quística, tabicada irregular, con aspecto neoproliferativo anexial (fig. 1). Colonoscopia: neoplasia sigmoidea estenosante. Biopsia: adenocarcinoma infiltrante tubular moderadamente diferenciado. Hallazgos cirugía: abundante líquido ascítico, lesión tumoral sólido-quística de 30cm de diámetro dependiente del anexo izquierdo, implantes neoplásicos en Douglas y tumor de colon sigmoide. Cirugía: salpingooforectomía izquierda en block con tumor, resección implantes en Douglas y Hartmann (fig. 2). La biopsia rápida no concluye si la lesión ovárica es secundaria. Se decide histerectomía total, salpingooforectomía y omentectomía. Evoluciona sin complicaciones. Biopsia diferida: adenocarcinoma primario de colon tubular infiltrante hasta serosa; 8gg con metástasis de 17gg, lesión metastásica ovárica e implantes peritoneales. Útero y resto de anexos sin neoplasia.
Del 6 al 30% de los tumores malignos de ovario son metástasis1,2. Los cánceres de estómago y colon son los primarios gastrointestinales que más los afectan3. Su presentación clínica es muy dispar, desde asintomáticos hasta grandes lesiones tumorales, incluso mayores que el primario4-6. Del 5 al 20% de los casos, la metástasis en el ovario precede al diagnóstico del tumor primario5,6.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.