Durante el presente año el comité editorial de la revista se ha ido haciendo cargo de las responsabilidades encomendadas por la junta directiva previa y ratificadas por la actual. Aunque el cambio de nombres se produjo rápidamente, ya en el número de enero de este año, es en estos últimos números en los que va plasmándose el trabajo que hemos realizado, ya que la mayor parte del material publicado hasta ahora era fruto del trabajo editorial de comités anteriores. Como puede apreciarse, los trabajos conservan una misma línea, ya que siguen el mismo proceso de evaluación entre iguales o «por pares» (peer review) imprescindible en una revista de calidad. Lo que sí hemos tratado de hacer es acortar el proceso, cosa que, salvo excepciones, se va consiguiendo, como nos proponíamos y expresamos en un editorial previo [RECOT 2010;54(3)].
A partir del primer número de 2011 en cada trabajo figurará el nivel de evidencia del mismo. Este es un objetivo ya enunciado por el anterior director [RECOT 2010;54(1):1–2]. Cada autor lo adjudicará al remitir el manuscrito, siendo posteriormente revisado por el comité editorial. Sin duda aportará un punto más en ese proceso de incremento progresivo de la calidad iniciado.
Con el fin de hacer más atractiva la revista, se abordarán temas habitualmente no tratados, que serán incluidos en una sección especial. Esos temas cubrirán aspectos formativos de la especialidad, como la docencia pre y posgraduada, la formación en áreas específicas y la situación de nuestra especialidad en el contexto europeo en el que nos desenvolvemos. La formación en investigación que ha tratado el Prof. Marco [RECOT 2010;54(3):193–9] puede considerarse un preámbulo e inspiración de esa sección en la que aparecerán firmas de prestigio reconocido.
Por otros cauces hemos indicado el deseo de que nuestra revista sea cada vez más leída por los socios y suscriptores. Existe un premio al mejor trabajo publicado que, a propuesta del actual presidente, Dr. Rodríguez Altónaga, se pretende ampliar; igualmente se premiará al artículo más leído en la versión electrónica, en función del número de visitas registradas. Las convocatorias aparecerán en los cauces habituales, es decir, en la propia revista, en el boletín y en la página web.
En cuanto se consiga la acreditación actualmente en trámite, se incluirá en cada número de la revista una serie de preguntas de autoevaluación, que pretendemos sean en formato escrito y en electrónico. A cada conjunto de preguntas remitido se adjudicarán los créditos correspondientes, supervisados por SEAFORMEC (Federación de Sociedades Científicas para la Formación Médica Continuada), lo que le conferirá validez. Dichos créditos puntuarán en la eventual recertificación de los títulos de especialista. Igualmente pretendemos solicitar que la publicación de trabajos en la revista reciba un reconocimiento suplementario en forma de créditos. Esta en estudio la incentivación de las respuestas a las preguntas de autoevaluación en forma de premios como la financiación de viajes a congresos.
Varios aspectos de los mencionados tienen un objetivo primordial, como hemos venido repitiendo: la inclusión de la revista en el repertorio de la National Library of Medicine, Medline. Tras ello, solicitud de factor impacto en el Institute of Scientific Information (ISI). A la hora de hacer esas solicitudes hay que hacer una prospección o valoración aproximativa del factor impacto. Sería muy conveniente que los socios de la SECOT incluyeran en sus trabajos publicados en cualquier medio, citas de la revista; el índice está disponible, por palabras clave, accediendo a la revista a través de las páginas de la SECOT o de Elsevier. El Prof. Forriol está tratando de conseguir financiación para la edición del índice de los últimos diez años de la revista en formato CD, para su distribución gratuita entre los socios, y facilitar así este nuevo ruego.
Quisiera concluir este editorial con el agradecimiento a los autores que contribuyen con sus trabajos a que la revista siga su proceso de mejora continua y al resto de los socios y lectores para que remitan sus originales para que, de forma colectiva, consigamos el objetivo planteado como prioritario por la sociedad: tener un órgano de expresión de calidad incluido en los repertorios científicos internacionales de referencia.
