En relación con el artículo titulado «Utilidad de la resonancia magnética en la evaluación del mal alineamiento patelar», publicado por el Figueroa et al. en la Revista Española de Cirugía Ortopédica y Traumatología en enero de 20141, consideramos que si bien la resonancia magnética es un método ideal para el diagnóstico de este tipo de enfermedad, en los países latinoamericanos, aún no se encuentra al alcance de la gran mayoría de la población por su elevado costo. Dentro de nuestra experiencia en el Hospital Edgardo Rebagliati Martins de Lima, Perú, donde somos parte de la unidad de rodilla que atiende a la mayor cantidad de pacientes con esta enfermedad a nivel nacional, todavía consideramos que el examen físico basado en un conocimiento adecuado de la biomecánica de la rodilla y los estudios radiográficos en incidencias de frente, perfil y axial de rótula junto con una tomografía espiral multicorte al igual que en otros lugares2, nos permite tomar las decisiones terapéuticas más adecuadas, lo cual se ve reflejado en el resultado favorable de muchos de nuestros pacientes.
Siendo los costes una variable fundamental en la elección de métodos de diagnóstico y tratamiento, debemos comparar los costes relativos de cada uno de ellos en un medio como el nuestro. Una resonancia magnética en Lima tiene un valor 17 veces mayor a una radiografía y casi 3 veces por encima del coste de una tomografía, por tanto, si podemos diferir su uso a casos muy puntuales, podemos aprovechar mejor los recursos.
Si bien es cierto, sin la resonancia magnética no podemos precisar la presencia de lesiones osteocondrales que suelen acompañar a estos mismos pacientes y necesitar tratamiento quirúrgico, sí podemos hacer el diagnóstico de mal alineamiento patelofemoral y brindarle en un inicio, como recomiendan Rhee et al.2 y Tscoll et al.3, un tratamiento no quirúrgico, el cual sigue siendo la indicación para los casos agudos y recurrentes, de tal manera que el coste global del tratamiento de esta enfermedad tenderá a disminuir, haciendo más eficiente el uso de los recursos, sobre todo si estos son de por sí escasos en los diferentes sistemas de salud, en especial los públicos.