Hemos leído con interés el reciente manuscrito de Troya Castilla et al., titulado: «Complicaciones y pronóstico de pacientes ancianos diagnosticados de meningioma intracraneal»1, y nos gustaría hacer un breve comentario al mismo basado en nuestra propia experiencia en este tipo de tumores en la población anciana2.
Los autores demuestran tener una experiencia muy amplia en el diagnóstico y tratamiento de meningiomas intracraneales, con más de 100 casos/año, posiblemente la más amplia de nuestro país, por lo que su opinión y resultados tienen un gran valor. Es por ello que nos llama la atención que los autores no hayan analizado en sus pacientes los grados de resección tumoral de Simpson, una graduación específica para los meningiomas intracraneales que se utiliza en neurocirugía desde hace más de 50 años3. La escala de Simpson analiza la amplitud de resección tumoral, desde la exéresis completa del tumor y su base de implantación (grado I), hasta la realización exclusivamente de una craneotomía descompresiva (grado V), esta última raramente realizada en la neurocirugía actual.
Aunque los grados de Simpson han recibido algunas críticas recientes en cuanto a su valor pronóstico4, consideramos al igual que la mayoría de autores, que esta graduación de resecciones son un importante factor pronóstico de recidiva y, por lo tanto, de supervivencia, existiendo una clara significación estadística entre grado de resección e intervalo libre de recidiva4–6.
También es importante conocer los grados de Simpson ya que hoy en día, numerosos autores aconsejan que en meningiomas de áreas críticas, no intentar resecciones completas (grado I) por mayor riesgo de complicaciones y secuelas, y realizar resecciones menos amplias (grado II), ya que después se puede completar el tratamiento con radiocirugía obteniéndose un buen control del tumor7,8.