Fig. 2. --Cortes coronales de un paciente con un cáncer no-microcítico de pulmón derecho correspondiente al foco hipermetabólico (cabeza de flecha) y adenopatías hiliares e infracarinales (flechas finas). El estudio también mostró un pequeño depósito patológico en la región supraclavicular derecha, congruente con una afectación ganglionar metastásica (flecha gruesa). La detección de un foco supraclavicular congruente con afectación ganglionar a dicho nivel contraindica cualquier intento quirúrgico de la enfermedad.
Fig. 3. --Paciente con cáncer no-microcítico de pulmón en la región posterior del lóbulo inferior en el pulmón derecho detectado por TC (C), presentando además una gran adenopatía infracarinal (A) y una suprarrenal izquierda aumentada de tamaño (D). El estudio PET-FDG confirmó el carácter maligno de la lesión, mostrando un foco hipermetabólico en el pulmón derecho (G), junto con otro depósito infracarinal (E). En cambio, no se encontró alteración en la distribución de la captación en la fosa suprarrenal izquierda (H) y sí un foco adicional en la región paratraqueal derecha alta (F), sugestivo de afectación ganglionar adicional. Nótese la importancia de valorar el estudio de emisión junto con el mapa de atenuación (series de cortes coronales superiores de la figura) para localizar topográficamente la localización de los focos hipercaptantes.
Fig. 4. --Paciente que fue remitido para estadificación de un cáncer no-microcítico de pulmón, encontrándose en el estudio PET-FDG un foco hipermetabólico en el pulmón derecho congruente con la lesión conocida y un depósito patológico en la fosa suprarrenal izquierda sugestivo de afectación a distancia y que fue confirmado mediante punción-biopsia.
Fig. 5. --Mujer de 50 años que presentaba múltiples adenopatías retroperitoneales en un TC realizado por lumbalgia. El estudio PET con FDG mostraba varios focos hipermetabólicos a lo largo de ambas regiones paralumbares, más abundantes en el lado izquierdo, junto con otro foco solitario en la región medial del área supraclavicular izquierda. La PET permitió localizar un foco accesible para la biopsia que resultó corresponder a un proceso linfoproliferativo.
Fig. 6. --Cortes coronales seriados de estudios PET-FDG en dos pacientes diferentes, mostrando focos patológicos solamente a nivel infra-abdominal (A) y a ambos lados del diafragma (B).
Fig. 7. --(A): Cortes coronales seriados de un estudio PET-FDG mostrando una captación irregularmente distribuida por estructuras óseas sugestivo de proceso infiltrativo secundario a un proceso linfoproliferativo. (B): Cortes coronales y sagital medio mostrando una intensa captación homogéneamente distribuida por estructuras óseas de esqueleto axial, sugestivo de hiperplasia de medula ósea.
Fig. 8. --Cortes coronales seriados de estudios PET-FDG realizados a una paciente con Linfoma No-Hodgkin de alto grado en los que se pone en evidencia una disminución del número de focos hipermetabólicos, tanto infra como supradiafragmáticos, a lo largo de diferentes fases del tratamiento, llegando prácticamente a desaparecer las captaciones patológicas.
Fig. 9. --Cortes axiales de TC con contraste mostrando una lesión hipodensa sobre el parénquima hepático en la fase arterial (A), que presenta un relleno homogéneo en las fases tardías (B), y que planteaba como primera posibilidad diagnóstica la existencia de un hemangioma. La imagen de PET-FDG (C) corresponde a un corte axial al mismo nivel en el hígado mostrando un foco hipermetabólico congruente con afectación metastásica.
Fig. 10. --A y B: Paciente que presentaba clínica sospechosa de recidiva de CCR, consistente en molestias sacras con crisis suboclusivas y rectorragias esporádicas. El CEA era normal y la imagen de TC (A) mostraba una masa presacra que desplazaba la luz intestinal (flecha). En la imagen de PET-FDG (B) se observa un foco hipermetabólico sobre el lado derecho de la luz intestinal (flecha) que también se intuye desplazada y que era congruente con una recidiva. Dicha posibilidad se confirmó con toma de biopsia dirigida a dicha área. C y D: Paciente con sospecha de recidiva de CCR por una elevación progresiva del CEA (última determinación: 40 ng/mL). La imagen de TC (C) muestra una masa en el espacio presacro, por detrás de la luz intestinal, que presentaba carácter hipermetabólico en la exploración con FDG (D).
Fig. 11. --Cortes coronales seriados de una exploración PET-FDG de un paciente con una recidiva de CCR diseminada, donde se muestran múltiples focos hipermetabólicos irregularmente distribuidos por tejidos blandos de la región anterior del abdomen (flechas), que son congruentes con implantes peritoneales.
Fig. 12. --Paciente de 53 años y con el antecedente de CCR tratado. Durante la evolución presentó una sintomatología sospechosa de recidiva. El valor del CEA era normal (3,3 ng/mL). La TC presentaba una imagen de masa presacra que fue biopsiada y resultó corresponder con una recidiva. La exploración PET-FDG puso de manifiesto un área hipermetabólica en el espacio retrovesical congruente con el hallazgo de la biopsia. Pero además, se descubrieron dos pequeños depósitos en el lóbulo hepático izquierdo y en la lengüeta del lóbulo derecho (flechas), sugestivos de afectación metastásica.