La Revista Española de Reumatología (RER) ha constituido desde sus inicios (1 de enero de 1974) el máximo exponente y el mejor instrumento de divulgación científica de nuestra sociedad. Su creación supuso un salto cualitativo en la historia de la Sociedad Española de Reumatología (SER), pues para su elaboración y mantenimiento era precisa la existencia de un importante grado de cohesión y madurez científica de la propia sociedad. Durante muchos años, la RER ha sido el mejor barómetro del grado de vitalidad de nuestra especialidad, ya que ha constituido casi de forma exclusiva nuestra única ventana de exposición de la curiosidad e innovación en el campo de la reumatología. En la actualidad, y a pesar de que gran parte de esta producción científica se publica en el extranjero (revistas anglosajonas), la RER sigue siendo el mejor instrumento en castellano de divulgación de la actividad de la SER a una amplia comunidad científica de habla hispana. A lo largo de estos años, sin embargo, el camino de la RER no ha sido en ningún caso fácil. En sus inicios, la revista se hallaba amenazada por la falta de producción científica de una sociedad joven, no demasiado numerosa y con poca experiencia y formación para la investigación. La mayoría de estas dificultades técnicas se han subsanado con el tiempo pero, paradójicamente, la RER no sólo no ha crecido y se ha consolidado, sino que en los últimos años me atrevería a afirmar que ha experimentado una cierta regresión, al menos en lo que hace referencia a la cantidad de producción científica original que en ella se expone. El motivo de esta regresión hay que buscarlo en una nueva epidemia: «la impactitis», ocasionada por un virus muy contagioso y deletéreo, que en los últimos años se ha extendido a todo el ámbito científico, convirtiéndose en una auténtica pandemia, sobre la cual aún no existe antídoto. A pesar de todas estas dificultades podemos, y debemos, sentirnos orgullosos de nuestra revista, porque desde sus inicios ha mantenido unos niveles de calidad muy remarcables. En este sentido, se trata de una revista totalmente normalizada (en la que se aplica toda la normativa editorial vigente para una revista científica) y que, además, de forma estricta y desde hace años, utiliza el sistema de «revisión por pares» para la aceptación de trabajos originales, único método válido para mantener el rigor científico de una publicación. Esta situación ha sido posible gracias a la extraordinaria labor de nuestros compañeros, que han constituido desde enero de 1974 los diferentes consejos editoriales que a lo largo de estos años han llevado la revista: P. Fernández del Vallado, J. Roté Querol, J. Muñoz Gómez, M.A. Brancós Cunill, J. Gijón Baños, E. Lience Durán, J. Sans Valeta, D. Roig Escofet, A. Castillo Ojugas, D. Salvatierra Ríos, E. Asensi Roldós, P. Barceló García, C. Alegre de Miguel, E. Noguera Hernando, J. Mulero Mendoza, J. Obach Benach, A. Rodríguez de la Serna, A. Laffón Roca, A. Nadal, E. Batlle Gualda, J. Gómez Reino, A. Olivé Marqués, M. Figueroa Pedrosa y G. Herrero-Beaumont Cuenca. A todos ellos, este comité editorial en nombre de todos los socios de la SER desea darles las gracias.
Desde octubre de 2000, el Dr. E. Martín Mola como Presidente, Armando Laffón como editor, y yo mismo como secretario de redacción nos hemos hecho cargo de la dirección técnica de la RER y nos hemos propuesto, manteniendo la calidad de la revista, los siguientes objetivos: ampliar y diversificar la oferta científica de la revista, digitalizarla completamente e intentar entrar en el Science Citation Index (indizar la revista).
1. Ampliar y diversificar la oferta científica de la revista: este objetivo es una respuesta a la creciente demanda tanto de la industria farmacéutica como de los propios socios de la SER que desean disponer de nuevos productos con el sello de calidad que tiene la RER. En este sentido, se ha creado un nuevo tipo de monográfico: «monográfico de la industria», que desarrolla y comenta exhaustivamente los fármacos de mayor actualidad reumatológica. Se trata de una revista que a pesar de estar financiada por la industria farmacéutica sus contenidos serán consensuados y revisados por el comité editorial de la RER. Esta revista (máximo de 2 números al año) aparecerá con el título «Revista Española de Reumatología. Monografías» y se publicará de forma independiente de los números habituales. Desde el año pasado, las reuniones científicas organizadas y esponsorizadas por la SER son la base de uno de los números monográficos que se publican en abierto en la revista. Este comité editorial considera que la calidad científica de este tipo de reuniones no puede desaprovecharse y debe hacerse accesible a todos los socios de la SER. Además, está en estudio la creación de nuevas secciones en la revista como la de «correspondencia» y las derivadas de sesiones magistrales o mesas redondas desarrolladas en el Congreso Nacional de la SER. Finalmente, se halla también en estudio la creación de un monográfico sobre «controversias en reumatología», que sería la traducción de los hot topics de las revistas anglosajonas.
2. Digitalizar la revista: se trata de digitalizar no sólo todo el material publicado en la revista sino también todo su proceso de elaboración. Para ello contamos con la ayuda de la editorial Doyma, que actualmente está experimentando una profunda renovación, así como una modernización de todo el proceso editorial. Con ello se conseguirá mejorar la accesibilidad al material publicado en la revista y se facilitará la comunicación entre autor, editor y revisores, al poder conocer de forma instantánea y pormenorizada los pasos que está siguiendo el artículo de un autor una vez remitido a la revista. Finalmente, la completa digitalización permitirá, utilizando las nuevas autopistas de la información (Internet), difundir nuestra revista sin las trabas físicas que supone el correo convencional.
3. Indizar la revista: se trata del objetivo más importante que se ha planteado este comité editorial y una meta ampliamente perseguida por la SER. Para conseguir este difícil objetivo, debemos mejorar la calidad científica de la revista y, muy especialmente, intentar aumentar el número de trabajos originales sometidos a revisión en la revista. Esto nos permitiría aumentar el número de originales publicados y facilitaría los plazos de publicación de cada número, condiciones muy importantes para conseguir el objetivo de indizar la RER. Para ello, este comité editorial se ha propuesto una serie de medidas que ya se han empezado a realizar y que seguirán desarrollándose a lo largo del próximo año. Entre estas medidas cabe destacar una ampliación y adecuación del comité de selección de trabajos de la RER a la realidad científica de nuestra sociedad, la entrada en este comité de figuras internacionales relevantes y la participación de éstas de forma más o menos regular en la elaboración de artículos de opinión (editoriales/revisiones) para la revista, una intensa campaña para la obtención de material científico procedente de comunicaciones a congresos (especialmente internacionales), de tesis doctorales leídas por los socios de la SER y de trabajos financiados con fondos de la SER, y finalmente, con la ayuda de Doyma, aumentar la presencia de nuestra revista en la comunidad de habla hispana.
Esta gran labor que nos hemos propuesto en ningún caso será posible sin la ayuda de todos los socios de la SER; por ello, este comité editorial pide y espera, si cabe aún más que en etapas anteriores, la participación de todos los miembros de la sociedad en la construcción de nuestra revista.
Estas reflexiones sobre la revista fueron inicialmente escritas como presentación de la RER para el anuario de la SER. Sin embargo, y dado que al menos en parte contienen proyectos de futuro que pueden afectar profundamente a la revista, hemos creído conveniente publicarlo también en la RER para difundir esta información a todos sus lectores, que son en definitiva el motivo principal de la existencia de nuestra revista.