El Síndrome Metabólico (SM) es un conjunto de trastornos metabólicos, que se presentan en forma simultánea en un mismo individuo, teniendo como base la resistencia a la insulina. Su trascendencia principal radica en que permite identificar individuos con mayor riesgo, en los cuales existe aumento de prevalencia de Diabetes y de enfermedades cardiovasculares, causantes de alta morbimortalidad. De acuerdo a los criterios diagnósticos, se consideran seis componentes: Obesidad abdominal; Dislipidemia aterogénica con aumento de Triglicéridos, presencia de C-LDL pequeño y denso y disminución de C-HDL; Hipertensión Arterial; resistencia a la Insulina con Intolerancia a la Glucosa o Diabetes; estado proinflamatorio, con elevación de citoquinas proinflamatorias y proteína C reativa, y estado protrombótico, con aumento del fibrinógeno y del PAI-1.
Existen varios criterios para el diagnóstico del SM, el que propuso la OMS en 1999; el acordado por el panel de expertos del ATP III del NCEP en el 2001. Un tercer criterio lo aporta el Consenso 2004 de la Federación Internacional de Diabetes (IDF). Su tratamiento incluye el manejo integral de todos sus componentes.