En las últimas 3 décadas, los Sistemas de Salud a nivel mundial han venido dependiendo cada vez más de la infraestructura hospitalaria que tiene cada país para garantizar el acceso efectivo universal de la salud de sus ciudadanos. Este fenómeno, es producto de diversos factores sociales, demográficos, económicos, tecnológicos y sobre todo de la globalización que ha vivido la sociedad contemporánea; también tiene su origen en la evolución de la medicina, la formación médica y los cambios epidemiológicos que ha sufrido la humanidad.
Se ha comentado reiteradamente, que la medicina contemporánea está enfocada más a la curación de las enfermedades que a la prevención oportuna y ante el gran cúmulo de conocimientos que los estudiantes tienen que adquirir en su formación en la medicina moderna, es necesario especializarse, dejando claro que la mejor práctica médica es la especialidad.
De esta forma, en los últimos años se ha arraigado entre la sociedad y los ciudadanos, cada vez más informados y demandantes de sus derechos, que la mejor atención que uno puede recibir es de un médico especialista. Sin embargo, este fenómeno no sólo ha fragmentado la atención hospitalaria de los padecimientos, sino que también lo ha saturado, provocando poco a poco, que menos personas quieran acceder al primer nivel de atención. También es importante señalar que la fragmentación de la atención hospitalaria ha venido acompañada del desarrollo de equipo de alta tecnología médica y de medicamentos sumamente especializados, lo que ha incrementado los costos en una forma desproporcionada.
El cambio epidemiológico del país, en donde se combinan en menor proporción las enfermedades transmisibles y el aumento de las crónico-degenerativas, que sumados a las modificaciones demográficas -descenso de las tasas de natalidad y aumento en la esperanza de vida-, los cambios geográficos en la distribución de la población, las modificaciones en las formas alimenticias, hábitos de vida, condiciones laborales, presentan nuevos retos y desafíos a los Sistemas de Salud y por ende a los procesos de atención y tratamiento hospitalario.
La Dra. Mercedes Juan, Secretaria de Salud Federal, ha señalado 3 prioridades para el Sistema de Salud en los próximos años: acceso efectivo y resolutivo, calidad en la atención y elevar la prevención de las enfermedades.
El Hospital General de México "Dr. Eduardo Liceaga", siempre ha coadyuvado con el Sistema de Salud del país y su historia lo corrobora. Pero cabe a ser un alto y preguntarnos, cuál es el futuro del Hospital y a qué retos nos enfrentaremos.
El primer lugar, el proceso de "verticalización y modernización" de su infraestructura hospitalaria es un hecho irreversible, lo que requerirá reorganizar su estructura orgánica, los esquemas de atención ambulatoria y de corta estancia hospitalaria, además de dotarla de todo el mobiliario y equipo médico de alta tecnología que es necesaria en la medicina moderna del Siglo XXI.
Desde hace varios años los Servicios Médicos de Especialidad tienen debidamente normados los 10 principales diagnósticos de atención, a través de Guías Diagnósticas Estandarizadas, que deberán ser revisadas y de requerirlo actualizarlas, con el propósito fundamental de lograr que cada vez más ciudadanos de la zona centro del país, que es donde más acuden a nuestra Institución, reciban un servicio médico, con calidad y eficacia resolutiva, lo que deberá traducirse es una menor estancia hospitalaria, seguridad del paciente y su reincorporación a su vida laboral y familiar, en las mejores condiciones de vida.
Pero también será necesaria la integración del equipo de salud, en lo que hemos denominado las Clínicas Multidisciplinarias de Tercer Nivel de Atención. No sólo se trata de dar un diagnóstico certero, en la que para ciertos padecimientos, deberán participar varias especialidades, sino de crear nuevos protocolos de atención en los pacientes, que permita formular programas replicables, generar investigaciones y darle una nueva dimensión a la educación de los médicos que requiere el país.
En el futuro próximo, por no decir que ya está presente y urgente, se tendrá que elaborar un modelo integral de la atención primaria, que tenga como eje la prevención y el seguimiento de los principales padecimientos crónico degenerativos, de tal forma que se privilegie y reevalúe el papel del médico general y el equipo interdisciplinario necesario en este nivel de atención. El Hospital tiene experiencia al respecto y podrá presentar propuestas innovadoras, que seguramente considerarán nuevamente la visita domiciliaria como se realizaba en el pasado a pacientes de la tercera edad con enfermedades de larga duración y que por su situación no podrán asistir a las unidades hospitalarias, ampliando el programa de la Universidad de los pacientes apoyados por todo el equipo de salud, donde se instruye y orienta a los usuarios a mejorar su propia enfermedad con un autocuidado para evitar su progresión y complicaciones o en su defecto la presencia de especialistas vía remota a las comunidades más alejadas, apoyándose en las tecnologías de la información (TIC´s), para dar orientaciones a los médicos comunitarios en el diagnóstico y tratamiento de los pacientes que por su edad tengan limitada movilidad para su traslado.
Son muchos los cambios que deberá emprender el Hospital en el futuro en los procedimientos de la atención médica hospitalaria. El reto es cambiar, crecer e innovar; el desafío es trascender más allá de nuestras fronteras, a nivel nacional y en el ámbito internacional.
La sinergia institucional de las especialidades afines, es la forma de evitar duplicidad de funciones con un solo proyecto de atención, educación e investigación, coordinadas por las clínicas de alta especialidad, con sus respectivos cursos y residencias formando expertos en casos complejos, donde la seguridad de las acciones evitará complicaciones no deseadas, en resumen fortalecer al primer nivel de atención, alta calidad de las áreas troncales, Cirugía General, Medicina Interna, Gineco-Obstetricia y Pediatría, la formación de cuadros institucionales del tercer nivel de la alta especialidad y la creación y formación de recursos propios de diagnóstico y tratamiento a través de escuelas, laboratorios clínicos, de investigación, capacitación con modelos virtuales, aplicados a la dinámica del Hospital, mejorando los procesos para obtener óptimos resultados. Con índices medibles de calidad, apoyado con los mejores recursos humanos como columna vertebral del Hospital General de México "Dr. Eduardo Liceaga", ya que sin duda será el proyecto del sexenio, convertido en un Centro Médico de la Secretaría de Salud.