La enfermedad renal crónica es considerada catastrófica y un problema de salud pública. El conocimiento de la prevalencia de esta enfermedad permite contribuir a la detección precoz y a prevenir o retrasar su evolución.
ObjetivoDeterminar la prevalencia y factores asociados a enfermedad renal crónica en pacientes que acuden a la consulta externa del Hospital José Carrasco Arteaga, desde octubre de 2011 a junio de 2012.
Materiales y métodosSe realizó un estudio transversal. La muestra se seleccionó por asignación secuencial. El tamaño se calculó sobre la base del intervalo de confianza del 95%, el 3% de error de inferencia y el 8% de prevalencia del factor de riesgo de más baja frecuencia. Los datos se obtuvieron por entrevista directa y se analizaron con el software SPSS.
ResultadosSe estudió a 500 pacientes, con una edad promedio de 57±9 años; un 62.2% fueron mujeres. La prevalencia de enfermedad renal crónica fue del 10.6% (IC 95% 7.9-13.3); en hombres del 10.6% (IC 95% 6.2-15) y en mujeres del 10.6% (IC 95% 7.2-14.0). La asociación de enfermedad renal crónica con hipertensión arterial proporcionó una RP: 2.21, IC 95% 1.25-3.90 y p=0.006; con diabetes mellitus tipo 2 RP: 2.7, IC 95% 1.50-4.85 y p=0.001; con las enfermedades autoinmunes RP: 2.59, IC 95% 1-6.74 y p=0.044; con sobrepeso, obesidad RP: 0.58, IC 95% 0.32-1.04 y p=0.063; e historia familiar de enfermedad renal crónica RP: 1.78, IC 95% 0.82-3.89 y p=0.141.
ConclusiónLa prevalencia de enfermedad renal crónica fue del 10.6% (IC 95% 7.9-13.3) asociándose significativamente con hipertensión arterial y diabetes mellitus tipo 2.
Chronic kidney disease is considered catastrophic and public health problem. Knowledge of the prevalence of this disease can contribute to the early detection and prevent or delay its progression.
ObjectiveTo determine the prevalence and factors associated with chronic kidney disease in patients who attend the outpatient clinic at José Carrasco Arteaga Hospital, from October 2011 to June 2012.
Materials and methodsWe performed a cross-sectional study. The sample was selected by sequential allocation. The size was calculated on the basis of the 95% confidence level, 3% error of inference and 8% prevalence of the risk factor of lower frequency. Data were obtained by a direct interview and they were analyzed using SPSS software.
ResultsA total of 500 patients were included in this review, mean age 57±9 years, 62.2% were women. The prevalence of the chronic kidney disease was 10.6% (CI 95% 7.9-13.3), 10.6% (CI 95% 6.2-15) in men and 10.6% (CI 95% 7.2-14.0) in women. The association between chronic kidney disease with hypertension provided RP: 2.21, CI 95% 1.25-3.90 and p=0.006; with type 2 diabetes mellitus RP: 2.7, CI 95% 1.50-4.85 and p=0.001; with RP autoimmune diseases: 2.59, CI 95% 1.00-6.74 and p=0.044; overweight, obesity RP: 0.58, CI 95% 0.32-1.04 and p=0.063; and a family history of chronic kidney disease RP: 1.78, CI 95% 0.82-3.89 p=0.141.
ConclusionThe prevalence of chronic kidney disease was 10.6% (CI 95% 7.9-13.3) and it was significantly associated with hypertension and type 2 diabetes mellitus.
La enfermedad renal crónica (ERC) es considerada catastrófica y un problema de salud pública por los altos costos y el riesgo de muerte o incapacidad que demanda el tratamiento de un paciente en quien ha sido detectada1. En EE. UU. se gastan entre 50 mil y 70 mil dólares por año/paciente2. El conocimiento de la prevalencia de esta enfermedad contribuye a la detección precoz y a prevenir o retrasar su evolución. La prevalencia de esta patología está creciendo debido al incremento de población con diabetes mellitus tipo 2 (DM2) e hipertensión arterial (HTA)3. En el estudio Third National Health and Nutrition Examination Survey (NAHNES III) realizado en EE. UU. (1988 y 1994) con 15.626 adultos demostró una prevalencia de ERC del 4.6%; una actualización de este trabajo (1998-2004) con 13.233 casos reportó una prevalencia del 6%4. En España Otero et al. reportaron una prevalencia de ERC del 6.8% (intervalo de confianza del 95% [IC 95%] 5.4-8.2) en el 2007. En México, Méndez et al. estudiaron a 31.712 pacientes que se encontraban en programa de diálisis provenientes de 127 hospitales; determinaron que las causas de ERC fueron DM2 en el 48.5%, HTA sistémica en el 19%, glomerulopatías crónicas en el 12.7% y otras, entre las que estaba la nefropatía lúpica, en el 19.8%5,6. En Chile, la prevalencia de ERC fue del 5.9%, presentándose con más frecuencia en mayores de 65 años, sexo femenino y con nivel básico de educación7.
Esta enfermedad no produce síntomas en los estadios iniciales por lo que su detección temprana es difícil8,9.
En el 2002 la guía de la Kidney Disease Outcomes Quality Initiative of the National Kidney Foundation definió la ERC como daño renal demostrado por una tasa de filtración glomerular (TFG) por debajo de 60ml/min/1.73m2 estimado por la creatinina sérica utilizando ecuaciones como la Modification of Diet in Renal Disease (MDRD) Study. Este método indirecto es la vía más fácil y accesible para estimar la TFG en adultos10.
La técnica de diagnóstico de oro para calcular la TFG es el aclaramiento de la inulina, una técnica laboriosa y prácticamente imposible de llevar a cabo en la práctica clínica habitual, por lo que permanece como herramienta de investigación. La utilización de isótopos radiactivos es un método más práctico que el de la inulina para calcular la filtración glomerular, pero permanece también como un método de investigación y de difícil aplicación para obtener valores paraclínicos diarios; por estos motivos, en la práctica clínica habitual el diagnóstico de enfermedad renal se basa en la realización de métodos complementarios rutinarios de laboratorio10.
La TFG puede ser estimada utilizando la MDRD: TFG=186×creatinina sérica−1.154×edad−0.203×1.21 (si es de etnia negra)×0.742 (si es mujer). Se observó que la fórmula MDRD aportó una estimación más exacta de la función renal que la fórmula de Cockcroft-Gault10.
En las últimas décadas se ha visto que padecer ERC es un factor de riesgo de morbimortalidad por enfermedad cardiovascular11.
Los resultados del estudio permitirán iniciar estrategias de prevención en la progresión del daño renal, por eso el objetivo de este estudio fue determinar la prevalencia de ERC y factores asociados en los pacientes que acuden a la consulta externa del Hospital José Carrasco Arteaga de la ciudad de Cuenca, Ecuador.
MétodosDiseño. Estudio transversal.
Sede. Consulta externa de Medicina Interna del Hospital José Carrasco Arteaga de la ciudad de Cuenca, Ecuador.
Periodo. Del 1 de octubre de 2011 al 30 de junio de 2012.
Sujetos. Pacientes hombres y mujeres que acudieron a la consulta externa en los periodos citados.
Variables. Edad, sexo, índice de masa corporal, nivel de instrucción, ocupación, residencia habitual, diagnóstico previo de DM2, diagnóstico previo de HTA sistémica, historia familiar de ERC, diagnóstico previo de enfermedad autoinmune y enfermedad renal crónica.
Procedimiento. Asignación secuencial. El tamaño se calculó considerando el IC 95%, el 3% de error de inferencia y el 8% de prevalencia del factor de riesgo de más baja prevalencia que correspondió al de la DM2. Se trabajó con 500 pacientes. Se excluyeron pacientes con diagnóstico de cáncer en los últimos 6 meses sin importar la localización, Alzheimer, Parkinson, amputación de extremidades, luxación de cadera, fracturas, ERC estadio 5 en diálisis de cualquier tipo, cirrosis y pacientes embarazadas. Luego de firmar el consentimiento informado y rellenar el formulario, se obtenía el índice de masa corporal y muestras de sangre periférica para medir la creatinina sérica previo ayuno de 8h. La ERC fue definida por una TFG (186×creatinina sérica−1.154×edad−0.203×1.21 [si es de etnia negra]×0.742 [si es mujer]) cuyo valor era menor a 60ml/min/1.73m2.
Análisis estadístico. Las variables categóricas (grupo etario, sexo, residencia habitual, ocupación, nivel de instrucción) se presentaron en tablas de distribución simple en donde consta variable número y porcentaje. Para las variables asociadas se aplicó la tabla de 2×2, se obtuvo la prevalencia de ERC en los expuestos al factor de riesgo y la prevalencia de ERC en los no expuestos al factor de riesgo; se utilizó la razón de prevalencia (RP) con IC 95% en donde la RP igual a 1 no se asocia con la enfermedad;>1 la exposición se asocia con la enfermedad siempre que el límite inferior del IC 95% sea>1 y el valor de p<0.05;<1 existe protección en los expuestos a la enfermedad siempre que el límite superior del IC 95% sea<1 y el valor de p<0.05.
Paquete estadístico. Software estadístico SPSS 20 y la hoja de cálculo Microsoft Excel 2010.
ResultadosEn la tabla 1 se observa que de un total de 500 pacientes, 189 (37.8%) fueron hombres y 311 (62.2%) mujeres. El promedio de edad fue de 57±9 años. Del total de la muestra, 50 (10%) tuvieron menos de 45 años, 334 (66.8%) entre 45-65 y 116 (23.2%)≥65 años. En la muestra existieron 376 (75.2%) pacientes procedentes del área urbana y 124 (24.8%) del área rural. Las personas que realizaban trabajo intelectual fueron 64 (12.8%), trabajo físico 246 (49.2%) y 190 (38%) ninguna actividad. Los pacientes con≤6 años de estudio fueron 152 (30.4%), de 7-12 años 277 (55.4%) y 71 (14.2)≥13 años de estudio.
Descripción de las características generales del grupo de estudio. Hospital José Carrasco Arteaga, 2012
Variable | N.o | % |
Sexo | ||
Hombre | 189 | 37.8 |
Mujer | 311 | 62.2 |
Grupo etario | ||
<45 años | 50 | 10 |
45-65 años | 334 | 66.8 |
≥65 años | 116 | 23.2 |
Residencia habitual | ||
Urbana | 376 | 75.2 |
Rural | 124 | 24.8 |
Ocupación según el tipo de trabajo | ||
Intelectual | 64 | 12.8 |
Físico | 246 | 49.2 |
Ninguna actividad | 190 | 38 |
Nivel de instrucción | ||
≤6 años | 152 | 30.4 |
7-12 años | 277 | 55.4 |
≥13 años | 71 | 14.2 |
Total | 500 | 100 |
Fuente: Base de datos.
En la tabla 2 se observa que la prevalencia total de ERC fue del 10.6% (IC 95% 7.9-13.3). La muestra estudiada estuvo conformada por 189 hombres de los cuales 20 (10.6%) (IC 95% 6.2-15) presentaron ERC, y del total de las mujeres 33 (10.6%) (IC 95% 7.2-14) tuvieron la enfermedad. De 50 pacientes<45 años, en 7 (14%) (IC 95% 4.4-26.6) se demostró ERC; en el grupo etario de 45-64 años, de 334 pacientes, 31 (9.3%) (IC 95% 6.2-12.4) fueron positivos; en el grupo de≥65 años, de las 116 personas estudiadas, se detectaron 15 (12.9%) (IC 95% 6.8-19) casos de ERC. De 376 personas del área urbana, se detectó ERC en 43 (11.4%) (IC 95% 8.0-14.8) y de 124 que procedían del área rural, en 10 (8.1%) (IC 95% 3.1-13.1) se diagnosticó ERC.
Prevalencia de enfermedad renal crónica y estratificada por sexo, grupo etario y residencia habitual. Hospital José Carrasco Arteaga, 2012
Variable | Enfermedad renal crónica | |||
Sí | No | |||
N.o | % | N.o | % | |
Sexo | ||||
Hombre | 20 | 10.6 | 169 | 89.4 |
Mujer | 33 | 10.6 | 278 | 89.4 |
Grupo etario | ||||
<45 años | 7 | 14 | 43 | 86 |
45-64 años | 31 | 9.3 | 303 | 90.7 |
≥65 | 15 | 12.9 | 101 | 87.1 |
Residencia habitual | ||||
Urbana | 43 | 11.4 | 333 | 88.6 |
Rural | 10 | 8.1 | 114 | 91.9 |
Total | 53 | 10.6 | 447 | 89.4 |
Fuente: Base de datos.
En la tabla 3 se puede observar que, de la muestra estudiada, en 31 (15.1%) de los 205 pacientes que tenían diagnóstico de HTA se detectó ERC, y de los 295 que no padecían HTA, 22 (7.5%) fueron positivos; la diferencia de porcentajes fue significativa (RP: 2.21, IC 95% 1.25-3.90 y valor p=0.006). Se observaron 122 pacientes con DM2, de los cuales 23 (18.9%) tuvieron ERC, y de los 378 que no padecían DM2, en 30 (7.9%) se demostró ERC; la diferencia de porcentajes fue significativa (RP: 2.70, IC 95% 1.50-4.85 y valor p=0.001). De las 27 personas con enfermedades autoinmunes, 6 (22.2%) de ellas presentaron ERC, y entre las restantes 473 sin este factor de riesgo, en 47 (9.9%) se diagnosticó ERC; la diferencia de porcentajes no fue significativa (RP: 2.59, IC 95% 1.00-6.74 y valor p=0.044). La media del índice de masa corporal fue de 27.59. El grupo de los expuestos a sobrepeso y obesidad lo conformaron 348 pacientes, en 31 (8.9%) se diagnosticó ERC y de los 152 sin sobrepeso y obesidad, 22 (14.5%) fueron positivos para ERC; la diferencia de porcentajes no fue significativa (RP: 0.58, IC 95% 0.32-1.04 y valor p=0.063). La ERC en pacientes con historia familiar de ERC se encontró en 9 (16.4%) pacientes de 55 analizados, y de 445 pacientes sin historia familiar de ERC, en 44 (9.9%) se detectó la enfermedad; la diferencia de porcentajes no fue significativa (RP: 1.78, IC 95% 0.82-3.89 y valor p=0.141).
Factores asociados a enfermedad renal crónica. Hospital José Carrasco Arteaga, 2012
Variable | Enfermedad renal crónica | RP | IC 95% | Valor p | |||
Sí | No | ||||||
N.o | % | N.o | % | ||||
Hipertensión arterial | 2.21 | 1.25-3.90 | 0.006 | ||||
Sí | 31 | 15.1 | 174 | 84.9 | |||
No | 22 | 7.5 | 273 | 92.5 | |||
Diabetes mellitus tipo 2 | 2.70 | 1.50-4.85 | 0.001 | ||||
Sí | 23 | 18.9 | 99 | 81.1 | |||
No | 30 | 7.9 | 348 | 92.1 | |||
Enfermedades autoinmunes | 2.59 | 1-6.74 | 0.044 | ||||
Sí | 6 | 22.2 | 21 | 77.8 | |||
No | 47 | 9.9 | 426 | 90.1 | |||
Sobrepeso y obesidad | 0.58 | 0.32-1.04 | 0.063 | ||||
Sí | 31 | 8.9 | 317 | 91.1 | |||
No | 22 | 14.5 | 130 | 85.5 | |||
Historia familiar ERC | 1.78 | 0.82-.89 | 0.141 | ||||
Sí | 9 | 16.4 | 46 | 83.6 | |||
No | 44 | 9.9 | 401 | 90.1 | |||
Total | 53 | 10.6 | 447 | 89.4 |
Fuente: Base de datos.
Los resultados de este estudio aportan información epidemiológica sobre la ERC en población adulta atendida en los consultorios de medicina interna del Hospital José Carrasco Arteaga.
En este estudio tanto los hombres como las mujeres tuvieron una prevalencia de ERC del 10.6% (IC 95% 6.2-15, IC 95% 7.2-14.0, respectivamente). En este trabajo se demostró que la ERC se diagnosticó de igual manera en hombres que en mujeres; posiblemente porque los factores de riesgo de aparición de ERC están presentes de manera similar en los pacientes de ambos sexos en esta muestra de estudio. Con relación al grupo etario, no se demostraron diferencias significativas entre los distintos grupos de edad y la prevalencia de ERC. Este resultado podría deberse a que los cambios en la filtración glomerular a causa del envejecimiento se mantienen en 140ml/min/1.73 m2 hasta los 30 años, y a partir de ese momento, la filtración glomerular desciende de forma lineal en unos 8ml/min/1.73m2por década12–14. Nuestro mayor grupo etario fue de 45-65 años.
La prevalencia de ERC en pacientes provenientes del área urbana fue del 11.4% y del área rural del 8.1% diferente a lo que demostraron Otero et al. (8.1-11.11%) respectivamente15. Esta diferencia puede deberse a que en el Hospital José Carrasco Arteaga la mayoría de los pacientes que se benefician de los servicios son procedentes del área urbana o probablemente a que los pacientes del área rural tengan mejor control de los factores de riesgo para desarrollar ERC lo cual es difícil de concebir. Se demostró una prevalencia de ERC del 10.6% (IC 95% 7.9-13.3), porcentaje similar al reportado por Rodrigo y Andrés (10.4%)16; esto nos permite asumir que la frecuencia de esta enfermedad no se incrementó en términos significativos. El resultado es parecido al reportado por Zhang y Rothenbacher, los cuales después de realizar una revisión sistemática de un total de 26 estudios reportaron una prevalencia media de ERC del 7.2%17. Se detectó una asociación significativa entre la HTA y la ERC (RP: 2.21, IC 95% 1.25-3.90 y valor p=0.006), similar a lo reportado por Torracchi y Espinoza13 (RP: 2.67, IC 95% 1.56-4.56 y valor p=0.0003). La asociación puede deberse a que los pacientes tienen un inadecuado control de los niveles de presión arterial. Los niveles elevados de presión arterial producen un deterioro de la función renal porque incrementan la excreción urinaria de proteínas. Algunos estudios han demostrado que un control adecuado o intensivo de la presión arterial (menos de 130/80mmHg) puede disminuir la progresión de la enfermedad renal18,19. Sin embargo, otras investigaciones indican que el cambio en la filtración glomerular puede ser mínimo en pacientes bien controlados y que los pacientes con hipertensión esencial pueden tempranamente y con buen control de la presión arterial desarrollar insuficiencia renal20,21. Estos pacientes estarían en mayor riesgo de desarrollar enfermedad cardiovascular y de presentar anemia y alteraciones del metabolismo electrolítico especialmente del calcio y fósforo22. En este estudio se demostró que existe asociación entre la DM2 y la ERC (RP: 2.70, IC 95% 1.50-4.85 y valor p=0.001) similar al encontrado en el estudio de Torracchi y Espinoza13 (RP: 2.36, IC 95% 1.35-4.11 y valor p=0.002). Esta asociación puede deberse a que los pacientes no tienen un buen control de las cifras de glucemia. La hiperglucemia causa directamente daño renal por provocar expansión mesangial23–25.
Para el 2030 se estima que en el mundo existirán 439 millones de personas entre 20 y 79 años con diabetes, según la International Diabetes Federation; y en el caso de HTA, la OMS estima que se incrementará la prevalencia para el 2025 de 972 millones a 1.56 billones de personas, impactando económicamente en los países en desarrollo debido a que estos cambios en la distribución de los factores de riesgo en la población podrían conducir a una epidemia de ERC25.
Con relación al sobrepeso y la obesidad, en este estudio no se encontró asociación significativa con ERC (RP: 0.58, IC 95% 0.32-1.04 y valor p: 0.063) diferente a lo encontrado por Torracchi y Espinoza13 (RP: 2.01, IC 95% 1.09-3.70 y valor p: 0.02). Esto autores trabajaron con pacientes hospitalizados en quienes las patologías agudas de base pudieron interferir con el resultado de la TFG y modificar los resultados26.
En esta investigación no se encontró asociación entre la historia familiar de ERC, las enfermedades autoinmunes (AR y LES) y la ERC. Se mencionó en párrafos anteriores que las enfermedades autoinmunes y la historia familiar de ERC tienen una prevalencia baja; es probable que la muestra de estudio deba ampliarse para demostrar que existe relación27.
El problema más importante que plantea la prevención del riesgo cardiovascular asociado a la ERC es el desconocimiento de la función renal ya que la mayoría de los médicos se basan en la determinación de la creatinina plasmática, un parámetro que en muchas ocasiones, especialmente en mujeres de edad avanzada, no refleja el grado de filtrado glomerular28.
Se recomienda la utilización sistemática y rutinaria de la formula MDRD para la valoración de la función renal. Se deben extremar las medidas preventivas en pacientes con ERC, ante procesos intercurrentes, exploraciones complementarias, administración de fármacos nefrotóxicos. Asimismo, informar y educar a las personas con factores de riesgo o con ERC. Es importante realizar un diagnóstico temprano y un cuidado nefrológico apropiado en estos pacientes con la finalidad de evitar la prescripción de fármacos que interfieren con la función renal, retrasar la progresión de la enfermedad renal y, especialmente, modificar los factores de riesgo cardiovasculares asociados.
ConclusionesLa edad promedio fue de 57±9 años, fueron las mujeres quienes conformaron la mayor parte de la muestra de estudio. El grupo etario que se presentó con más frecuencia estuvo entre 45-65 años. La mayoría de los pacientes procedían del área urbana. La muestra estuvo mayormente conformada por personas que realizaban trabajo físico. La mayor parte de los pacientes estudiados tenían de 7-12 años de estudios. La prevalencia de ERC fue del 10.6% y se comportó de manera similar en ambos sexos. La ERC fue más frecuente en los menores de 65 años y del área urbana. La HTA y la DM2 se asociaron con la ERC. El sobrepeso y la obesidad, las enfermedades autoinmunes y la historia familiar de ERC no se asociaron significativamente con la ERC.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.
FinanciaciónNo se recibió ningún patrocinio para llevar a cabo este artículo.