Queridos compañeros:
Con esta revista ya llevamos 7 publicadas, contando con el número extraordinario del IV Congreso de Homeopatía celebrado en Barcelona, y del que hemos salido todos enriquecidos, ¡enhorabuena al comité científico! Esperamos más y más nivel, desde aquel primero de 1929 en Madrid.
En este ejemplar vais a encontrar una gran heterogeneidad de artículos. Unos pueden gustar más que otros, y en un número puede haber también más de una sociedad que de otra, pero esto es lo que hace extraordinaria la revista, que podamos convivir, colaborando en armonía, diferentes tendencias, diferentes maneras de curar, siempre a través del medicamento homeopático.
Esperamos contribuir a hacer un pequeño cambio en nuestra manera de pensar, porque comprendiendo las diferentes tendencias que hay en los métodos de curar favorecemos que nuevas formas de reflexionar nos hagan observar con objetividad maneras de trabajar que antes no entendíamos.
De este modo queda plasmado para un futuro la importancia de lo que ahora hacemos.
¿Recordáis cómo nos quedamos boquiabiertos cuando vemos la imagen de las tertulias o congresos o reuniones, de nuestros colegas de hace más de un siglo?
¿Qué dirán las generaciones futuras de nosotros?
¿No os gustaría que fuera la época de la unión, reconciliación y respeto?
Y a la vez se recordara como el siglo en el que la terapéutica homeopática alcanzó su punto de unión, de comprensión entre los que la practicamos, dejando las puertas abiertas para formar parte de ese mundo que tiende y apuesta clara-ente por la vuelta a un ecosistema razonable. Mientras que otra parte se debate en el más puro globalismo...
Salgamos de los estándares establecidos. Volvamos a la tierra, echemos raíces, al más puro y claro estilo de vuelta a la naturaleza.
Hagamos de la terapéutica homeopática la más acorde con la manera de vivir y pensar de los que ya van identificando determinados comportamientos actuales, en un mundo estandarizado, como algo tóxico para nuestra salud, física y psíquica.