Quiero, en primer lugar, agradecer a mis compañeros Tornero et al la oportuna reflexión que hacen sobre nuestro trabajo, nos parece muy interesante y enriquecedor ante el debate sobre la premedicación anestésica infantil. No obstante, nos gustaría realizar algunas matizaciones a la carta referenciada.
Tradicionalmente el uso del citrato de fentanilo oral transmucoso (CFOT) ha quedado restringido para el tratamiento del dolor episódico en pacientes oncológicos, incluso el propio laboratorio presenta esta única indicación, aunque la propia bondad del fármaco está superando el restrictivo uso inicial del mismo. En el año 1993 la Food and Drug Administration (FDA) aprobó su uso para el tratamiento del dolor irruptivo, como premedicación anestésica para cirugía y como sedación-analgesia ante procedimientos dolorosos en adultos y en niños de más de 10kg de peso, habiéndose publicado abundantes trabajos que avalan su idoneidad como premedicación previa a cualquier procedimiento doloroso, incluyendo la cirugía pediátrica y su apoyo en el tratamiento del dolor postoperatorio1–8, siendo después aprobada en 1998 para el tratamiento el dolor episódico en los pacientes oncológicos. Posteriormente fue aprobado para tal uso en Gran Bretaña y en 2001 en otros 16 países europeos, incluida España.
Siguiendo a diversos autores, en nuestro artículo definimos la medicación preanestésica como la administración de fármacos en el período preoperatorio destinados a reducir la ansiedad, obtener una adecuada sedación manteniendo la estabilidad cardiorrespiratoria, disminuir la hiperactividad simpática y los requerimientos anestésicos, prevenir el exceso de secreciones, minimizar el riesgo de vómitos y facilitar la inducción anestésica9,10, por lo que se deduce que entre los objetivos de la premedicación no sólo se encuentra la ansiolisis, sino también reducir los requerimientos anestésicos, entre ellos los opioides, y así se desprende en algunas recientes publicaciones11, donde, al administrar CFOT en premedicación, se precisó menor dosis de fentanilo intraoperatorio y postoperatorio, por lo que los requerimientos totales de opioides serán iguales o menores que si utilizáramos otro tipo de premedicación. Diversos estudios avalan la disminución de analgésicos postoperatorios que demandan los pacientes pediátricos premedicados con CFOT4,6,8,11.