El presente número de Trastornos Adictivos incluye un artículo 1 elaborado por el grupo de trabajo constituido por miembros del Programa de Alcohol de la Unidad de Salud Mental del Hospital Sierrallana (Cantabria) y médicos de Atención Primaria de la Gerencia de Atención Primaria Torrelavega-Reinosa (Cantabria), sobre el "Protocolo para el abordaje y derivación de los pacientes con problemas relacionados con el alcohol en el área de salud del hospital Sierrallana" 1. Es sin lugar a dudas una excelente iniciativa.
El alcohol, aunque aceptado por la sociedad, es una sustancia potencialmente adictiva que produce importantes problemas de salud pública, lo que hace de su consumo uno de los más importantes riesgos sanitarios en todo el mundo 2. La Unión Europea es una de las regiones del mundo con mayores niveles de consumo de alcohol en la población.
El consumo de alcohol se relaciona con un amplio rango de problemas de salud, tanto físicos como mentales, así como con problemas sociales. El consumo de alcohol se ha asociado con al menos 60 problemas de salud o enfermedades diferentes, incluyendo trastornos mentales y del comportamiento, neoplasias, lesiones intencionales y no intencionales, enfermedades gastrointestinales, metabólicas y endocrinas, enfermedades cardiovasculares, etcétera 3-5.
Una de cada 25 muertes que se producen en todo el mundo, así como el 5 % de la totalidad de los años vividos con discapacidad, son atribuibles al consumo de alcohol 6. En España, el número de muertes relacionadas con el consumo de alcohol en 2004 fue de 8.391, lo que supone un 2,3 % del total de muertes ocurridas ese año y una tasa de 19,4 fallecidos por cada cien mil habitantes 7.
El consumo excesivo de alcohol se asocia también a importantes pérdidas económicas de la sociedad; entre ellas los costes sanitarios, de bienestar social y de justicia penal, así como los costos derivados de la pérdida de productividad, etcétera 2,5.
El consumo de alcohol es frecuente en nuestra sociedad 5 y es la droga más consumida, tal como señala la última encuesta domiciliaria sobre consumo de drogas realizada en 2007/2008 en España 8.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) en la 58.ª Asamblea Mundial de la Salud de 2005 9, después de reconocer los problemas de salud pública ocasionados por el uso nocivo del alcohol pide a los estados miembros que "elaboren, apliquen y evalúen estrategias y programas eficaces para reducir las consecuencias sanitarias y sociales negativas del uso nocivo del alcohol" así como que "promuevan y apoyen las actividades mundiales y regionales destinadas a identificar y tratar los trastornos relacionados con el uso del alcohol en el marco de la asistencia sanitaria, así como a aumentar la capacidad de los profesionales sanitarios para hacer frente a los problemas asociados a los hábitos nocivos de consumo de alcohol que presenten sus pacientes" 9.
En el mismo sentido se han manifestado las autoridades españolas en la Estrategia Nacional sobre Drogas 2009-2016, cuya acción 35 es: "potenciar el papel, tanto de los servicios de Atención Primaria como de los de atención especializada y de Urgencias, en la detección precoz, el consejo sanitario y la realización de intervenciones breves en pacientes que abusen del alcohol... 10".
Un abordaje preventivo sólo podrá alcanzarse si todos los pacientes adultos son evaluados con respecto a un posible consumo de riesgo, incluyendo los episodios de consumo intensivo de alcohol (binge drinking)5. De hecho tal como se señala en el documento aprobado en la 1.ª Conferencia de prevención y promoción de la salud en la práctica clínica; prevención de los problemas derivados del alcohol, "la identificación precoz de los consumidores de riesgo es la piedra angular de las intervenciones preventivas en alcohol desde el ámbito sanitario" 5.
En este sentido, la elaboración de protocolos para el abordaje, tratamiento y derivación de los problemas relacionados con el alcohol, debe ser uno de los objetivos de los profesionales sanitarios que están día a día en contacto con la población. La Atención Primaria debe ser el primer escalón desde el que se identifiquen y aborden el consumo de riesgo, el abuso y la dependencia del alcohol, y debe ser también el marco desde el que se pueda realizar una intervención breve para disminuir el consumo en los bebedores de riesgo. Sin embargo, en el documento de consenso antes citado 5, ya se ha reconocido que "existe gran dificultad en la implementación del cribado y las intervenciones breves a pesar de su efectividad". Otro problema existente es el establecimiento de criterios y su aplicación en la práctica clínica diaria, de cuándo esos pacientes deben ser derivados a centros o servicios específicos.
Se ha estimado que la implementación a gran escala de programas de detección e intervención breve en Atención Primaria, que lleguen hasta el 25 % de la población de riesgo, reduciría en un 9 % las muertes e incapacidades debidas al alcohol en la Unión Europea 11. En España hay dos experiencias controladas que apoyan la eficacia y efectividad de estas intervenciones en Atención Primaria 12,13.
Sin embargo, es evidente que no todos los pacientes con problemas relacionados con el consumo de alcohol pueden y deben ser atendidos íntegramente en Atención Primaria. Muchos de ellos requieren un tratamiento psicoconductual con técnicas psicoterapéuticas individuales o en grupo que escapan, quizás, a la competencia del médico de Atención Primaria. En estos casos será necesaria una derivación a la atención especializada donde es necesaria la implementación de programas específicos con atención integral y multidisciplinar dirigidos a los pacientes con este tipo de problemas. No obstante, la derivación a atención especializada no significa desentenderse del paciente, de hecho su seguimiento en Atención Primaria puede potenciar intensamente el tratamiento proporcionado desde la atención especializada.
En este sentido, hay que destacar el protocolo consensuado para el abordaje y derivación de los problemas relacionados con el alcohol desde Atención Primaria al Programa de Alcohol (Salud Mental). Como señalan los autores 1 "se han establecido unos criterios de derivación claros. Y entendiendo que el abordaje debe ser multidisciplinar, se ha establecido una vía de comunicación directa entre Atención Primaria y especializada, permitiendo un tratamiento combinado entre ambas". Y "se ha creado un modelo de volante de interconsulta que pretende ser un instrumento concreto y eficaz para la comunicación entre Atención Primaria y el Programa de Alcohol".
Correo electrónico: trinigt@med.uva.es (T. Gómez Talego)