P-004. - INCIDENCIA Y FACTORES DE RIESGO DE CETOACIDOSIS DIABÉTICA (CAD) EN NUESTRO MEDIO EN 2010-2014
Hospital Universitario de Canarias. Consorcio Sanitario de Tenerife. La Laguna.
Introducción: La CAD es una complicación aguda de la diabetes mellitus tipo 1 y tipo 2, que ocurre en pacientes con elevado estrés metabólico. La prevalencia de la diabetes mellitus en nuestro medio es de un 10,6% para la población entre 18 y 75 años de edad, y la incidencia de CAD en España es de 2-14/100.000 habitantes/año. Nuestro centro tiene una población de referencia de 343.025 habitantes.
Objetivos: Conocer la incidencia de CAD en nuestro medio, las características de la población afecta y los posibles factores de riesgo que influyen en la aparición de la misma.
Material y métodos: Estudio observacional descriptivo realizado entre enero de 2010 y diciembre de 2014. Criterios de inclusión: pacientes de 18 a 75 años ingresados en nuestro hospital por cetoacidosis diabética. Las variables estudiadas (mes, edad, desencadenante, gravedad, hemoglobina glicosilada, índice de masa corporal, requerimientos de insulina total, basal, rápida total y antes de desayuno, almuerzo y cena y factor de sensibilidad) se han recogido directamente de la historia clínica. Se ha realizado el análisis estadístico con el programa informático IBM SPSS versión 22.0.
Resultados: La incidencia de CAD fue de 5,5-10,5 episodios/1000 diabéticos/año, con una edad media de los pacientes de 35,19 ± 13,78 años, siendo más frecuente en enero y febrero, en varones (56,8%) y en la diabetes mellitus tipo 1 (79,9%). Los factores desencadenantes fueron: omisión dosis insulina 36,7%, debut de diabetes mellitus 16,5%, infección de vías respiratorias 15,1%, gastroenteritis aguda 12,2%, infección del tracto urinario 7,2%, tóxicos 7,2% y otros 5%. La gravedad de la cetoacidosis en función del pH fue leve (pH 7,25-7,30) 33,1%, moderada (pH 7,00-7,25) 50,4% y grave (pH < 7,00) 16,5%, sin diferencias significativas por sexo, IMC ni por HbA1c, aunque sí por edad. También se estudiaron las necesidades de insulina al alta: total 0,87 ± 0,21 UI/kg, basal 0,49 ± 0,13 UI/kg, rápida 0,38 ± 0,13 UI/kg (0,15 ± 0,05 en desayuno, 0,12 ± 11,94 en almuerzo, 0,11 ± 0,05 en cena), sin diferencias significativas por sexo, gravedad e IMC. Otras variables estudiadas fueron: pH medio: 7,16 ± 0,13; bicarbonato medio: 11,76 ± 5,63 mg/dl; glucemia media: 497 ± 219 mg/dl; HbA1c media: 11,29 ± 2,30 g/dl; IMC medio: 23,26 ± 4,80 kg/m2; factor de sensibilidad medio: 34,65 ± 11,12.
Conclusiones: La incidencia de CAD en nuestro medio es inferior a la de otros estudios publicados, aunque los factores desencadenantes son similares (principalmente omisión de la administración de insulina, debut de diabetes e infecciones respiratorias). Destaca que los pacientes presentan un mal control metabólico crónico con niveles elevados de HbA1c, por lo que una mejora del control metabólico y educación diabetológica podrían ser las mejores herramientas para disminuir la incidencia de CAD en nuestro medio.