En la práctica forense, a menudo se alude al buen pronóstico tras lesión cerebral infantil argumentando sobre la propiedad plástica del cerebro inmaduro. Desde los iniciales estudios de Kennard en los años treinta hasta la actualidad la plasticidad infantil se ha venido discutiendo y matizando. Los estudios sobre la recuperación de las afasias adquiridas en niños van a favor de la capacidad de compensación intra o interhemisférica. No obstante, los efectos de las lesiones tempranas sobre funciones cognitivas más complejas como la inteligencia parecen ser menos compensables. La etiología lesional y, más aún, las características del daño cerebral visualizables mediante neuroimagen puede descifrar las contradicciones en la literatura previa y pueden, además, contribuir al pronóstico en la praxis clínica.
In forensic practice, after child cerebral lesion, it is frequently alluded to a good prognosis claiming on the plasticity of the immature brain. Since the first studies of Kennard in the 1930s until nowadays, child plasticity has been discussed and specified. The studies about acquired aphasia recovery in children support the capacity of intra or interhemispheric compensation. Nevertheless, the effects of early lesions on more complex cognitive functions as the intelligence seems to be worse compensated. Lesional etiology, and even more, characteristics of cerebral damage visualised by means of neuroimaging may reveal the contradictions in the previous literature and may, moreover, contribute to the prognosis in clinical practice.