Puntos clave
Los recién nacidos que presentan fallo respiratorio hipoxémico o hipertensión pulmonar persistente del recién nacido (HPPRN) están en riesgo de desarrollar numerosas complicaciones, incluida la muerte. La incidencia de esta condición es de 1,9 (0,43-6,82) por cada 1.000 nacidos vivos y su mortalidad varÃa dependiendo de la causa subyacente y la disponibilidad de terapia especializada.
El tratamiento inicial de estos pacientes incluye la corrección de los factores que pueden favorecer la vasoconstricción, como la hipotermia, la hipoglicemia, la hipocalcemia, la anemia y la hipovolemia.
El patrón de oro actual para el tratamiento de la HPPRN es el óxido nÃtrico inhalado (ONi). Este gas, por su selectividad, rápida y potente acción, tiene todas las caracterÃsticas de un vasodilatador pulmonar ideal. Desafortunadamente, el ONi no siempre se encuentra disponible en paÃses en vÃas de desarrollo y hasta en un 30% de los pacientes se han reportado fallos terapéuticas que llevan a la necesidad de usar oxigenación por membrana extracorpórea (ECMO) donde esté disponible.
La terapia con ECMO es efectiva sólo en el 50% de los pacientes (rescate) y su uso se asocia a complicaciones graves, como hemorragias intracraneanas e isquemia cerebral.
El uso, por vÃa endovenoso o inhalado, de terapias vasodilatadoras pulmonares no selectivas ha mostrado ser mucho menos efectivo que el ONi y tener mayores efectos adversos a nivel sistémico.
Durante mucho tiempo, la investigación terapéutica se ha orientado a encontrar vasodilatadores selectivos pulmonares con poco o ningún efecto sobre la circulación sistémica. La terapia con sildenafilo, inhibidor selectivo de la fosfodiesterasa 5, ha demostrado ser una terapia oral efectiva y segura para la hipertensión pulmonar del adulto.
Desde hace poco tiempo, y aunque no está aprobado en recién nacidos, se ha reportado su uso "piadoso" para el tratamiento de la HPPRN en regiones donde el ONi no está disponible. Los resultados publicados a la fecha son esperanzadores.
Ensayos clÃnicos sobre el uso del sildenafilo en el recién nacidoEl primer inhibidor selectivo de la fosfodiesterasa tipo 5 (PDE-5), el sildenafilo, ha evolucionado en menos de 20 años de ser un medicamento con uso potencial antianginoso a ser un medicamento oral de gran demanda para la disfunción eréctil (Viagra®), y más recientemente, con un nombre comercial diferente (Revatio®), a ser una terapia por vÃa oral muy efectiva para el tratamiento de la hipertensión pulmonar en adultos1.
El sildenafilo (Viagra®) también se ha administrado a recién nacidos por vÃa oral durante los últimos 6 años como un terapia potencial para la HPPRN en aquellos sitios donde el ONi no está disponible como tratamiento estándar para esta condición2. Esto se ha hecho sin que este fármaco haya sido completa y sistemáticamente evaluado. Hasta a fecha, las diferentes publicaciones se han centrado en reportes anecdóticos de casos aislados, pequeñas series y un par de estudios controlados donde se compara su efecto contra placebo.
Encontrar un vasodilatador pulmonar selectivo y efectivo, con pocos o ningún efecto secundario para el tratamiento de la HPPRN, ha sido difÃcil en las 3 décadas pasadas. Los reportes del uso del sildenafilo sugieren que este fármaco puede ser benéfico para el tratamiento de la HPPN grave y que se está usando, cada vez con más frecuencia, en la práctica neonatal.
En este estudio se incluyó a recién nacidos a término y prematuros tardÃos (≥ 35,5 semanas de gestación) con fallo respiratorio hipoxémico severo rebelde a tratamiento, que requerÃan ventilación mecánica y tenÃan un Ãndice de oxigenación (IO) ≥ 40. Todos estos recién nacidos tenÃan una HPPRN confirmada por ecocardiograma (cortocircuito de derecha a izquierda y presión arterial pulmonar estimada ≥ 40mmHg)3.
Es un estudio piloto, aleatorizado, doble ciego, controlado, con prueba de concepto, en una única unidad de cuidados intensivos neonatales de Barranquilla (Colombia). En este centro no se disponÃa de ONi, ventilación de alta frecuencia ni ECMO.
El objetivo fue evaluar la efectividad en la mejorÃa de la oxigenación del uso del sildenafilo por vÃa oral en recién nacidos a término y prematuros tardÃos con HPPRN.
La intervención fue enmascarada para el personal encargado de la atención clÃnica de los pacientes; el grupo intervenido recibió sildenafilo y el grupo control placebo por vÃa oral. En el grupo tratado se administró sildenafilo macerado y diluido en gel de galactosa por el farmacéutico. En el grupo placebo, sólo se administró el gel de galactosa. La concentración final de la preparación con el sildenafilo fue de 2mg/ml de solución. La aleatorización se realizó por números previamente asignados y el farmacéutico preparó las dos soluciones en el mismo tipo de recipientes, rotulados para su posterior identificación.
Según el protocolo de intervención, la primera dosis administrada de placebo o medicamento fue de 0,5ml/kg de peso (equivalente para el grupo tratado a 1mg/kg de sildenafilo) en los siguientes 30min de la aleatorización, continuándola cada 6h. Si no habÃa mejorÃa del IO y la presión arterial se mantenÃa estable, la dosis se aumentó a 1ml/kg de peso (equivalente para el grupo tratado a 2mg/kg de sildenafilo). El tratamiento se suspendió cuando el IO disminuyó de 20 o cuando se completaron 8 dosis del medicamento sin mejorÃa clÃnica.
Un total de 22 pacientes cumplieron criterios de inclusión, 2 pacientes murieron antes de ser aleatorizados y 7 pacientes no aceptaron o no se pudo tomar el consentimiento informado. Un total de 13 pacientes fueron incluidos (7 en el grupo de tratamiento y 6 en el grupo placebo). El estudio se terminó de forma anticipada por el comité de ética institucional ante la muerte de 6 de los 13 pacientes incluidos.
Para el grupo tratado, la relación por sexo fue de 4 varones por 3 mujeres, con un promedio de edad gestacional ± desviación estándar (DE) de 38,4 ± 2,6 semanas; el peso promedio ± DE al nacimiento de 2.803 ± 617g, el IO promedio ± DE al ingreso fue de 56 ± 16,8. Para el grupo control, la relación por sexo fue de 3 varones por 3 mujeres, con un promedio de edad gestacional ± DE de 37,2 ± 1,9 semanas. El peso promedio ± DE al nacimiento fue de 2.710 ± 554g, el IO promedio al ingreso de 46 ± 9,5. No hubo diferencias estadÃsticamente significativas para estos parámetros entre los dos grupos del estudio.
Todos los pacientes se encontraban en ventilación mecánica convencional con fracción inspirada de oxÃgeno del 100% y no hubo diferencias estadÃsticamente significativas entre los parámetros ventilatorios usados ni en los valores del equilibrio ácido básico reportado.
La saturación arterial de oxÃgeno (SaO2) mejoró con respecto a lÃnea de base a las 12h de iniciado el tratamiento (p < 0,03). A las 24 y 36h la diferencia en la mejorÃa de la SaO2 fue estadÃsticamente significativa (p < 0,03) entre el grupo tratado y el grupo placebo.
Si bien el IO en su valor absoluto, comparado con la lÃnea de base, mostró una disminución desde la administración de la primera dosis del fármaco en el grupo tratado con sildenafilo, la diferencia en la reducción con el grupo placebo sólo fue estadÃsticamente significativa después de las 24h de iniciado el estudio (4 dosis) y permaneció asà hasta el final de la intervención. Sin embargo, la muerte de varios pacientes en el grupo control pudo haber introducido un sesgo en esta comparación.
Cuando se compararon los IO para los dos grupos, desde la segunda hora de haber iniciado el estudio se observaron diferencias estadÃsticamente significativas entre ellos.
La presión arterial no mostró diferencias estadÃsticamente significativas entre los grupos del estudio ni al inicio, ni durante el desarrollo del protocolo. Estos datos fueron reportados en forma gráfica, por lo que los números absolutos no pueden analizarse.
En este estudio no se reportaron cambios en la presión pulmonar estimada por ecocardiograma ni se determinaron valores de gasto cardÃaco, Ãndice de resistencia vascular pulmonar o Ãndice de resistencia vascular sistémica.
Sin ser un objetivo de este estudio, se reportó una tendencia protectora de mortalidad en el grupo tratado con sildenafilo, donde sobrevivieron 6 de 7 pacientes, mientras que en el grupo control fallecieron 5 de 6 sujetos (riesgo relativo [RR] = 0,17; intervalo de confianza [IC] del 95%, 0,03-1,09; RD = −0,69; IC del 95%, -1,09, -0,30). Una vez más, se debe señalar que el número de pacientes fue reducido.
En 2 pacientes del grupo tratado en que cuales se suspendió el sildenafilo por IO < 20 no se evidenció fenómeno de rebote. En ninguno de los pacientes sobrevivientes se encontró hemorragia intraventricular de grado III o IV. Por tratarse de recién nacidos a término y prematuros tardÃos sin riesgo de retinopatÃa de la prematurez, esta condición no se examinó.
Este estudio sólo está publicado en forma de resumen, por lo que la información disponible de él es bastante limitada4.
Se incluyó a 24 recién nacidos a término con HPPRN e IO > 25. En el grupo número uno, 13 pacientes tratados con sildenafilo por vÃa oral, administrado por sonda orogástrica a dosis de 2mg/kg de peso, y en el grupo dos, 11 recién nacidos tratados con placebo (no se menciona cuál o la forma).
El estudio se realizó en un solo centro en México en que no contaban con ONi para el tratamiento de esta patologÃa. Su objetivo fue comparar la eficacia del tratamiento convencional con la terapia con sildenafilo por vÃa oral para el manejo de la HPPRN.
No se encontraron datos del método de aleatorización, garantÃa del ciego para el personal tratante, ni datos de la lÃnea de base para estado hemodinámico.
La duración total de la intervención fue de 72h y el fármaco del estudio se administró cada 6h.
El IO comenzó a disminuir desde la primera hora de la administración del fármaco; sin embargo, los datos se presentan en forma de gráficos, lo que no permite abstraer los datos absolutos para mejor comparación. La PaO2 aumentó en el grupo tratado con sildenafilo y la diferencia fue estadÃsticamente significativa a las 72h (p < 0,01) cuando se comparó con el grupo control. Se muestran solamente los valores de p para las diferencias de PaCO2 y PaO2 entre los grupos del estudio.
No se reportan datos de mortalidad durante ni después del estudio, ni de presencia de hemorragia intraventicular.
DiscusiónSe tratan de dos estudios clÃnicos con un número limitado de pacientes. El estudio de Herrera está publicado sólo en forma de resumen, por lo que aporta muy poca información para su análisis. Con las limitaciones anotadas, principalmente dadas por el pequeño número de pacientes incluidos, se puede sugerir que el tratamiento con sildenafilo oral para el tratamiento de la HPPRN es una terapia efectiva para disminuir el IO y mejorar la PaO2 sin alterar en forma significativa la presión arterial.
Si bien, Baquero et al5, en un resumen posterior, reportan el seguimiento a 18 meses de 4 de los 6 pacientes tratados sin alteraciones en el neurodesarrollo, medido con escala de Gessel, resonancia magnética nuclear, electroencefalograma y potenciales evocados, la seguridad del uso de este fármaco en el perÃodo neonatal para el tratamiento de la HPPRN aún no está garantizada, por lo que su uso sólo está autorizado en el desarrollo de estudios clÃnicos, previa obtención del consentimiento informado, y más aun cuando existe una terapia probada y segura como es el ONi.