Introducción. El bigeminismo es una de las arritmias cardíacas más frecuentes encontradas en la práctica clínica habitual. Se trata de un latido prematuro con respecto al normal, que se presenta de forma regular intercalada entre dos latidos sinusales. Esta alteración en pacientes con un corazón estructuralmente normal y que no reciban medicación antiarrítmica, por lo general, no tiene significado patológico, ni implicaciones pronósticas y no precisa tratamiento1. Excepcionalmente, el bigeminismo ventricular se ha asociado a hipotiroidismo primario (MEDLINE, palabras clave: bigeminy, hypothyroidism)2,3.
Caso clínico. Mujer de 38 años de edad, sin antecedentes de interés, que presenta dolores musculares y astenia de un mes de evolución, asociado con una dificultad al tragar y la presencia de edema en la cara. La exploración física es normal, a excepción de frecuentes extrasístoles en la auscultación cardíaca. En el electrocardiograma se aprecia un bigeminismo ventricular con morfología de bloqueo de rama izquierda (fig. 1 a). En la analítica general se detectan una TSH > 100 U/ml (0,35-4,94) y una T4 libre < 0,4 ng/dl (0,7-1,48), se establece el diagnóstico de hipotiroidismo primario y se comienza el tratamiento con levotiroxina. A los 2 meses la paciente está asintomática, con una auscultación cardíaca normal y un electrocardiograma en ritmo sinusal sin alteraciones de la repolarización (fig. 1 b).
Figura 1. A
Figura 1. B
Discusión y conclusiones. Los cambios electrocardiográficos más comunes asociados al hipotiroidismo son la bradicardia sinusal, la prolongación del intervalo QT y el aplanamiento o la inversión de la onda T; menos frecuentemente, puede aparecer un bloqueo cardíaco, voltajes QRS bajos y extrasístoles ventriculares4. Las anormalidades en la conducción cardíaca se suelen resolver tras la terapia hormonal tiroidea, que es segura y no estimula la aparición de nuevas arritmias4,5.
En la génesis de las alteraciones electrocardiográficas encontradas en pacientes con hipotiroidismo influyen el enlentecimiento de todas las fases del potencial de acción, la disminución de la contractilidad, la inducción de alteraciones electrolíticas y la alteración reversible en la relajación miocárdica4,6.
Por tanto, creemos que el presente caso, unido a la alta prevalencia de hipotiroidismo en la población, invita a efectuar un estudio de hormonas tiroideas ante pacientes a los que se detecte un bigeminismo ventricular sin causa definida.