El sedentarismo es un factor de riesgo independiente de enfermedad cardiovascular, y una de las principales causas de mortalidad1. Como consecuencia, las sociedades científicas recomiendan el consejo sobre actividad física desde atención primaria2. El objetivo de este trabajo fue analizar el efecto de un programa de ejercicio físico aplicado a pacientes sedentarios con factores de riesgo cardiovascular a nivel metabólico y su impacto sobre la calidad de vida.
Se diseñó un estudio prospectivo de intervención, tipo pre-post, sin grupo control. Se incluyeron individuos de 35-75 años, sedentarios, con ≥1 factores de riesgo cardiovascular, que acudieron consecutivamente a consulta (centros de salud de Barañáin, Navarra). El nivel de actividad física se evaluó mediante la encuesta IPAQ (cuestionario internacional de actividad física). Los factores de exclusión fueron: enfermedad cardiovascular y enfermedad aguda o crónica con riesgo para la práctica de ejercicio.
La intervención consistió en un plan de entrenamiento individualizado según los resultados de una cicloergoespirometría. Se elaboraron sesiones de ejercicio supervisado con cicloergómetro de 45min, 3 días/semana durante 12 semanas. El plan se estructuró en 2 etapas: inicial con ejercicio aeróbico continuo de intensidad moderada y final con ejercicio mixto, continuo moderado e interválico de alta intensidad.
Las principales variables estudiadas fueron: composición corporal cuantificada mediante bioimpedancia multifrecuencia, parámetros metabólicos determinados en analítica de sangre y calidad de vida evaluada con la encuesta EQ-5D-5L (EuroQol Group).
Se incluyeron 36 pacientes con una edad media de 54,7 años (DE: 9,0), el 60,5% mujeres. El 89,5% con sobrepeso/obesidad, el 86,8% con dislipemia, el 42,1% con hipertensión arterial, el 10,5% con diabetes mellitus tipo 2 y el 28,9% fumadores. Completaron el programa de ejercicio (≥70% de las sesiones) 29 sujetos (80,6%). Ninguno presentó efectos adversos del entrenamiento. Estos resultados mejoran los observados en estudios previos con tasas de abandono del 30-50% en los primeros 3-6 meses, y elevada incidencia de problemas ortopédicos3.
En los 29 pacientes que completaron el programa se observaron cambios favorables en el perfil metabólico (tabla 1). Se objetivó una disminución de peso a expensas de una reducción de masa grasa y área de grasa visceral, sin cambios en masa magra. En ensayos clínicos que incluyeron individuos obesos sometidos a una intervención aislada con ejercicio4, se lograron pérdidas de peso y masa grasa similares, pero con un descenso no deseable de masa magra (2-5%). En la analítica de sangre se objetivó una disminución significativa de glucemia basal, glicohemoglobina y marcadores emergentes de riesgo cardiovascular: índice de resistencia a la insulina y proteína-C reactiva5. No se observaron cambios en el perfil lipídico.
Composición corporal. Analítica de sangre. Calidad de vida
Variable | Pre:Media (DE)Mediana (RIQ) | Post:Media (DE)Mediana (RIQ) | Cambio medio(IC 95%) | p-valor |
---|---|---|---|---|
Peso (kg) | 82,9 (14,0) | 80,7 (13,4) | −2,2 (−3,0, −1,4) | <0,001a |
IMC (kg/m2) | 30,6 (4,7) | 29,8 (4,4) | −0,8 (−1,1, −0,5) | <0,001a |
ACT (l) | 37,2 (7,6) | 37,1 (7,4) | −0,2 (−0,6, 0,3) | 0,477a |
M-LG (kg) | 50,8 (10,4) | 50,5 (10,3) | −0,3 (−0,9, 0,3) | 0,297a |
M-Magra (kg) | 47,8 (9,8) | 47,6 (9,6) | −0,2 (−0,8, 0,3) | 0,408a |
M-ME (kg) | 28,1 (6,3) | 27,9 (6,2) | −0,2 (−0,5, 0,2) | 0,325a |
M-Grasa (kg) | 32,1 (10,3) | 30,1 (9,6) | −2,0 (−2,7, −1,2) | <0,001a |
Porcentaje de grasa (%) | 38,2 (9,3) | 36,7 (9,4) | −1,5 (−2,4, −0,6) | 0,002a |
AGV (cm2) | 157,6 (56,3) | 147,8 (54,3) | −9,9 (−13,2, −6,5) | <0,001a |
Colesterol (mg/dl) | 218,5 (47,0) | 210,8 (39,3) | −7,6 (−16,3, 1,0) | 0,080a |
LDL-Col (mg/l) | 140,3 (39,9) | 136,6 (32,3) | −3,6 (−10,6, 3,3) | 0,293a |
HDL-Col (mg/dl) | 53,7 (11,9) | 52,9 (11,7) | −0,8 (−3,0, 1,5) | 0,498a |
Triglicéridos (mg/dl) | 106,4 (38,6) | 108,9 (57,2) | 2,4 (−18,3, 23,2) | 0,812a |
Lipo A (mg/dl) | 16,6 (22,1) | 15,9 (26,1) | 0,968b | |
Glucosa (mg/dl) | 99,0 (26,0) | 91,0 (22,8) | 0,007b | |
HbA1c (%) | 5,7 (0,5) | 5,5 (0,5) | 0,022b | |
HOMA-IR | 2,45 (2,05) | 1,70 (0,88) | 0,002b | |
VSG (mm/h) | 6,0 (8,0) | 5,0 (10,0) | 0,727b | |
PCR (mg/l) | 2,95 (5,17) | 2,00 (2,25) | 0,004b | |
EQ índice | 0,843 (0,251) | 0,932 (0,090) | <0,001b | |
EQ VAS | 63,3 (14,8) | 70,1 (13,2) | 15,8 (10,2, 21,3) | <0,001a |
ACT: agua corporal total; AGV: área de grasa visceral; DE: desviación estándar; EQ índice: índice de calidad de vida (0 a 1); EQ VAS: escala visual analógica (0 a 100); HbA1c: glicohemoglobina; HDL-Col: lipoproteínas de alta densidad; HOMA-IR: índice de resistencia a la insulina; IMC: índice de masa corporal; LDL-Col: lipoproteínas de baja densidad; Lipo A: lipoproteína A; M-Grasa: masa grasa; M-LG: masa libre de grasa; M-Magra: masa magra; M-ME: masa musculoesquelética; PCR: proteína-C reactiva; RIQ: rango intercuartil; VSG: velocidad de sedimentación globular.
N=29.
El ejercicio físico es útil en el tratamiento del dolor crónico, de la ansiedad y de la depresión como han demostrado revisiones sistemáticas de ensayos clínicos6. En nuestra muestra destaca la importante reducción del porcentaje de pacientes con algún grado de dolor (62 al 34%; p=0,016), ansiedad/depresión (41 al 17%; p=0,092) y con alguna dificultad para realizar las actividades cotidianas (28 al 3%; p=0,016). La calidad de vida se incrementó tras la intervención, aumentando significativamente (p<0,001) el EQ índice y la EQ EVA (tabla 1).
Entre las limitaciones del estudio se encuentra el pequeño tamaño muestral y la ausencia de grupo control, por lo que los resultados obtenidos deben confirmarse en un ensayo clínico aleatorizado con grupo control.
En conclusión, este estudio muestra la eficacia y la seguridad de una estrategia de intervención basada en el ejercicio físico individualizado aplicado a pacientes sedentarios con factores de riesgo cardiovascular desde el ámbito de la atención primaria. Estos resultados apoyan la recomendación de abandonar los consejos genéricos sobre la actividad física, que conducen a una disminución de los beneficios esperados, para progresar en la prevención y la promoción de la salud a nivel de la comunidad.
FinanciaciónLa presente investigación no ha recibido ayudas específicas provenientes de agencias del sector público, sector comercial o entidades sin ánimo de lucro.
Al Dr. Jesús Zabaleta Jurío, por su colaboración en la elaboración de la base de datos y a Arkaitz Galbete Jiménez de la Unidad de Metodología de Navarrabiomed, por su apoyo en el análisis estadístico.