Sres. Directores: Según el estudio de factores de riesgo cardiovascular en la población española practicado en 1989, la prevalencia de obesidad en mujeres y varones entre 35 y 64 años es de un 30 y un 20% respectivamente. Por otra parte, la prevalencia de diabetes e hipertensión es tres veces superior en las personas obesas que en las de peso normal1.
Para trabajar en obesidad es fundamental la educación para la salud, basada en la dificultad de cambiar estilos de vida muy arraigados y generalizados socialmente, y la consideración de algunos principios generales para la programación de actividades educativas2. El objetivo general del estudio fue "mejorar la salud de las personas obesas de nuestra zona básica, comprendidas entre 15 y 45 años, incidiendo en especial en las acciones de prevención y educación para la salud".
Y como objetivos específicos: a) De proceso: 1. Que los pacientes contegan en la historia: hoja de crónicos cumplimentada, registro alimentario y acuerdo peso-plazo. b) Educativos: 2. Que se desarrollen conocimientos sobre dieta adecuada, obesidad y ejercicio físico de calidad. 3. Que se desarrollen actitudes positivas hacia el autocuidado. 4. Que se desarrollen habilidades en relación con el autocuidado. c) Resultados de variables biológicas: 5. Que los pacientes reduzcan el peso. 6. Que los pacientes dejen de ser obesos.
Material y métodos
La zona básica de Txantrea es un barrio situado al norte de Pamplona con una población de 22.000 habitantes y con un equipo de Atención Primaria (EAP) compuesto por 12 médicos/as generales, 3 pediatras, 15 enfermeras, 1 trabajadora social , 7 administrativas y 2 celadores. Se trata de una población de nivel medio bajo y con una pirámide poblacional de corte europeo. En el Centro de Salud, según datos de mayo 94, existía un total de 2.310 obesos captados, siendo 573 de ellos personas <45 años (25%).
En 1994 se elaboró un programa de obesidad dirigido sobre todo a pacientes entre 15 y 45 años de edad, y que se encontrasen realmente motivados para adelgazar. Este programa fue elaborado por una Comisión de Obesidad en el Centro de Salud y fue consensuado en el EAP. Se pautaron las consultas médicas y de enfermería siguiendo una metodología basada en el pacto con el/la paciente de los objetivos que se tenían que conseguir.
Para cada uno de los objetivos planteados en el Programa se fijaron unos estándares que tenían que conseguirse en el año 1994. Se elaboró también un indicador de evaluación para cada objetivo y unas actividades evaluativas que había que realizar al terminar el proceso, algunas de ellas, con el/la paciente (tabla 1) Así mismo, se elaboraron unos criterios de exclusión del Programa: cuando el paciente, al terminar el plazo no hubiese disminuido ni el 25% de la disminución de peso acordada, cuando hubiese habido fallo a dos citas consecutivas, y cuando ya se hubiese llegado al peso acordado.
Resultados
Se introdujeron un total de 41 pacientes en el Programa, que supuso un total de un 7% del total obesos/as menores de 45 años (estándar propuesto 10%).
El primer objetivo de "hoja de crónicos cumplimentada, acuerdo peso-plazo y registro alimentario", se consiguió en el 76% de los pacientes en los dos primeros casos y el 46% para el registro alimentario (estándar propuesto 75%). El segundo objetivo de "desarrollo de conocimientos sobre dieta, ejercicio saludable y obesidad", se constató en un 39% (sobre un estándar propuesto del 75%).
El tercer y cuarto objetivos de "desarrollo de actitudes y habilidades positivas sobre el autocuidado", se obtuvieron en un 30%,que se corresponde con el estándar propuesto. El quinto objetivo de "reducción de peso", se produjo en el 54% de las personas incluidas, (sobre el 50% propuesto). Por último, el sexto objetivo de "dejar de ser obeso/a" se consiguió en el 22% de los casos (estándar propuesto 30%).
Un total de 8 personas fueron incluidas en el Programa a pesar de tener alguna enfermedad mental. Un total de 22 pacientes fueron excluidos del Programa por haber fallado a más de dos visitas consecutivas.
Discusión
Si bien parece constatado que la EPS grupal es más eficiente que la individual9,10 pueden darse determinados factores que obstaculicen la posible realización de grupos, motivo por el cual parece fundamental el evaluar también la calidad de EPS individual, cuando es ésta la que se realiza.
El hecho de que en más de la tercera parte de los pacientes incluidos se hayan desarrollado conocimientos, actitudes y habilidades positivas sobre el autocuidado, con lo que ello supone de factor positivo en la promoción de la salud y la prevención de la enfermedad, parece en sí mismo un elemento de interés y ya se ha constatado en otros estudios realizados3-5. Los resultados obtenidos en relación con la reducción de peso y con el hecho de haber dejado de ser obesos son también similares a otros estudios.
Considerando que el trabajo en educación para la salud es fundamental en Atención Primaria, deberemos seguir experimentando con programas de este tipo, que nos permitan avanzar en una metodología de calidad. No hemos encontrado trabajos publicados que tengan que ver con la aplicación práctica en Atención Primaria de Programas de Obesidad basados en EPS individual, por lo que no hemos podido comparar nuestros resultados. Nos parece igualmente importante avanzar en estudios que permitan lograr avances en el diseño de estrategias educativas de calidad, como apuntábamos al inicio de este trabajo, y que tiene que ver con la importancia del trabajo preventivo en Atención Primaria. Los trabajos que hemos encontrado se relacionan con el diseño de estrategias preventivas en un marco conceptual6, que estimamos deberían seguirse de otros estudios sobre intervenciones prácticas evaluadas.