Objetivo. Revisar la estructura factorial del General Health Questionary (GHQ-60) en un grupo de pacientes de atención primaria de nuestro medio asistencial. Encontrar si existe una composición de ítems alternativa que se adapte mejor a los pacientes de nuestros centros de salud.
Diseño. Estudio multivariante en el que se analiza la interdependencia de los ítems del GHQ-60.
Emplazamiento. Nueve cupos de medicina general de tres centros de salud de Vizcaya.
Participantes. La muestra de pacientes (n = 202) procedía de una investigación previa en la que se exploró la posible existencia de trastornos psiquiátricos en un grupo de pacientes con gran consumo de recursos sanitarios según un diseño de casos y controles1. En dicho estudio los casos estuvieron constituidos por un grupo de pacientes hiperfrecuentadores (n = 102) y los controles por otro con una baja frecuentación de servicios de atención primaria (n = 100).
Mediciones principales. Se efectuó un análisis de componentes principales con posterior rotación ortogonal de éstos. Se analizaron los ítems de cada componente resultante a fin de resumir la dimensión sintomática que expresaban2.
Resultados. Se encontraron trece componentes con valor propio mayor de uno. En conjunto explicaron un 70,3% de la varianza de respuestas al GHQ-60. El primer componente, o componente general, explicó el 36,6% de esta varianza (tabla 1). Tras la rotación de componentes se encontraron 6 dimensiones sintomáticas relevantes. La principal reflejaba tensión psíquica y explicaba un 10,5% de la varianza siendo el resto: pérdida de energía (9,7%); problemas de sueño (7,1%); depresión (dos factores que explicaban el 6 y el 5,4%); disfunción social (5 factores que explicaban entre el 2,9 y el 6,6% de la varianza) y cefalea (3,5%).
Discusión y conclusiones. El hecho de proceder de dos submuestras diferenciadas podría conferir a nuestros datos algunas propiedades interesantes al haber una heterogeneidad de partida que favorece el desarrollo del análisis de componentes principales. Esta técnica es la más contrastada y fiable en el campo estudiado3. Dada su utilización en trabajos previos, es también la que mejor permite una adecuada evaluación y comparación de nuestros resultados4. Con algunas variaciones éstos mostraron una estructura factorial similar a la hallada en estudios que nos preceden. El primer componente presenta una composición de ítems un poco diferente de la observada en las referencias consultadas4,5. De todas formas esta variación no parece determinante y, como en otros trabajos, constituye un factor general que refleja tanto la severidad sintomática encontrada como la estructura del cuestionario y su sistema gradual de respuesta, una vez rotados los factores resumen, también con algunas variaciones, en las dimensiones habituales del GHQ-60. Ello pone de manifiesto que el cuestionario tiene validez estructural y se adapta bien a nuestro medio asistencial6.