En el número 42, volumen 10, de su Revista, Bolívar Puigoriol et al1 publican 3 casos de osteonecrosis de los maxilares asociados al uso de bisfosfonatos (BF) intravenosos para tratamiento oncológico, concretamente zoledronato. Pero los BF también son ampliamente utilizados para el tratamiento de la osteoporosis, principalmente por vía oral. En 2009 ya publicamos algún caso de osteonecrosis de los maxilares relacionado con el consumo oral de BF para tratamiento de la osteoporosis2. Ahora presentamos una miniserie de 3 casos de osteonecrosis de los maxilares asociada a la administración oral de BF, con el fin de hacer notar que la osteonecrosis no es exclusiva de los BF intravenosos.
Caso 1. Mujer de 61 años. Diagnosticada en 2007 de osteoporosis, desde junio de ese año empezó a tomar risedronato semanal, en febrero de 2009 cambió a ácido ibandrónico mensual. En noviembre de 2009 es visitada en la Sección de Salud Bucodental porque desde hace 2 meses nota molestias en la zona del segundo molar mandibular derecho, que le habían extraído 5 meses antes, siendo portadora de una prótesis removible. Aun descansando de la prótesis no mejoraba. Se observaban diversas zonas de hueso expuesto. En la ortopantomografía se apreciaba la esclerosis marcada de los bordes del alvéolo de la extracción realizada casi medio año antes. A los 3 meses, sin usar la prótesis, y con higiene local con clorhexidina, persistían las zonas de hueso expuesto, pero parecía que estaban disminuyendo.
Caso 2. Mujer de 66 años. En 2003, a raíz de la menopausia, comenzó a tomar ácido alendrónico semanal. En septiembre de 2009 acude a consulta en la Sección de Salud Bucodental por una úlcera dolorosa en una zona edéntula del maxilar izquierdo, lugar de apoyo de una prótesis removible. Se indicó un cuidado local con clorhexidina y no utilizar la prótesis removible. Se realizó un estudio con TC (fig. 1). Un año después persiste el hueso expuesto en la boca, pero está asintomática.
Caso 3. Mujer de 75 años. Diagnosticada de osteoporosis en 2001, y desde entonces tomaba ácido alendrónico semanal. En el año 2008 le colocaron unos implantes osteointegrados en la mandíbula, siendo visitada en marzo del año 2009 en la Sección de Salud Bucodental por presentar hueso expuesto entre 2 implantes. Está siendo controlada con clorhexidina local. En septiembre de 2010 persiste el hueso expuesto, sin cambios.
Los BF se utilizan en oncología para tratamiento de la enfermedad ósea avanzada, principalmente por vía intravenosa, y para el tratamiento de la osteoporosis, sobre todo por vía oral. La osteonecrosis de los maxilares por BF se asocia principalmente a los BF intravenosos, pero ya Ruggiero et al3 en sus clásicos 63 casos, presentaron 7 que sólo habían tomado BF orales. El problema, como resumen Otto et al4 es que los BF orales los toman millones de pacientes durante mucho tiempo. Estos autores opinan que la aparición de la osteonecrosis de los maxilares por el uso de BF orales no es una coincidencia, sino que hay una relación causa-efecto.
La osteonecrosis asociada a BF orales, como los casos presentados aquí, suelen tener una evolución menos grave que la asociada a los BF intravenosos.
Coincidiendo con el trabajo de Bolívar Puigoriol et al1, creemos que es fundamental la prevención, no sólo en los pacientes que van a ser tratados por vía intravenosa, sino también en los que van a ser tratados de forma oral; y también puede ser importante informar al paciente, para que éste coopere en la toma de decisión del tratamiento.