Introducción
La lactancia materna sigue siendo reconocida como el alimento idóneo del recién nacido1,2. Institucionalmente, la OMS/UNICEF y numerosas sociedades pediátricas aconsejan la alimentación del niño con lactancia materna durante el primer semestre de vida2,3. Después de una época de abandono casi completo de la lactancia materna, que se inició a principios de siglo en todos los países desarrollados, desde hace aproximadamente 3 décadas se observa una notable recuperación, especialmente en Europa1. En España las tasas de lactancia materna continúan siendo bajas, con un 22,8% a los 90 días y con una duración media de lactancia natural inferior a 40 días1,4.
En el presente estudio se describen los patrones epidemiológicos y socioculturales de la lactancia materna en la zona básica de salud (ZBS) de Piedrabuena (Ciudad Real), comparándolos con los de otras poblaciones nacionales. Consideramos que su detección y conocimiento resulta imprescindible para poder desarrollar localmente actuaciones de educación y promoción de la lactancia materna entre las madres de nuestro medio. El objetivo del estudio es conocer las características de la lactancia materna en la ZBS de Piedrabuena, en concreto: a) la tasa de inicio; b) la prevalencia de lactancia materna por meses; c) la duración media de lactancia; d) estudiar las causas de abandono, y e) analizar posibles factores sociofamiliares en relación con los hábitos de lactancia observados.
Material y métodos
La ZBS de Piedrabuena incluye una población total de 8.169 habitantes, de los que 1.883 corresponden a población pediátrica (menores de 14 años de edad). Se considera medio rural, comprendiendo 4 municipios de actividad esencialmente agrícola y ganadera.
Estudio longitudinal, descriptivo. Se incluyen el total de 170 niños nacidos entre los meses de enero de 1993 y marzo de 1995, 165 captados por el pediatra del equipo de atención primaria (EAP) de Piedrabuena y 5 atendidos en la única consulta privada de la zona. Quedan excluidos los recién nacidos de bajo peso y los patológicos.
El seguimiento se realiza mediante historia clínica estandarizada. En la visita inicial (15 días tras nacimiento) se le pregunta a la madre el tipo de lactancia seguida y, en su caso, la causa de abandono. La información sobre edad de la madre, hábito tabáquico, número de hijos, nivel cultural y profesión se obtuvo a partir de los antecedentes personales, completando mediante pregunta directa posibles ausencias o dudas en los datos. Se realizan nuevos controles sobre lactancia en los meses 1, 2, 3, 5, 7 y 9 de vida. El abandono de la lactancia materna implicaba la finalización del período de estudio.
En función del tipo inicial de lactancia se consideran 3 grupos: A: niños que reciben lactancia artificial desde su nacimiento; B: niños que comienzan con lactancia materna exclusiva, y C: niños que reciben lactancia mixta desde su nacimiento.
Como características sociofamiliares de las madres incluidas en el estudio hemos considerado edad media (en años), promedio de hijos, trabajo fuera del hogar, fumadoras y poseer estudios superiores.
El análisis estadístico se ha fundamentado en la utilización de test de comparación de medias para muestras independientes, correlación y utilización de prueba de ji-cuadrado, según el carácter cualitativo o cuantitativo de las variables. Previamente se realizó prueba de normalidad (Smirnov-Kolmogorov) para verificar el tipo de distribución. Los cálculos se han realizado mediante programa informático R-Sigma (Horus Hardware)®.
Resultados
En nuestra zona de salud comienzan con lactancia natural el 87,6% de los niños, el 81,7% (n = 139) lo hacen con lactancia materna exclusiva (grupo B) y el 6% (n = 10) mediante lactancia mixta (grupo C). El 12,3% (n = 21) (grupo A) reciben lactancia artificial desde su nacimiento.
El 46,4% de las 170 madres amamantó a sus hijos durante 3 meses. Considerando únicamente el grupo de lactancia materna exclusiva (B), este porcentaje se reduce al 34%. Sólo el 6,4% de las madres amamantaron a sus hijos durante 6 meses.
La figura 1 refleja la prevalencia de lactancia materna exclusiva, por meses de edad, en la población.
De los 139 niños que comenzaron con lactancia materna exclusiva, el 19,4% (n=27) pasaron precozmente a lactancia mixta; en este subgrupo la media de días de lactancia materna exclusiva fue de 50 ± 24,4 días y la media de lactancia mixta fue de 42,4 ± 18,1 días, resultando una duración media total (lactancia exclusiva más mixta) de 46 ± 21,7 días.
Los 112 niños restantes mantuvieron la lactancia materna exclusiva hasta su paso a lactancia artificial o bien continuaron con lactancia materna exclusiva hasta el quinto mes, en que iniciaron de forma pautada alimentación complementaria. Once niños mantuvieron de forma simultánea lactancia materna y alimentación complementaria después del quinto mes, llegando un niño a los 9 meses de lactancia materna.
La duración media de lactancia materna exclusiva fue de 77,2 ± 50,3 días (n = 139).
Para el grupo de niños que reciben lactancia mixta desde su nacimiento la duración media de la lactancia materna fue de 79,5 ± 33,2 días (n = 10).
La duración media de lactancia materna, considerando sólo los niños que amamantan (grupos B y C) fue de 81 ± 56,1 días (rango 7-270) (n = 149).
La figura 2 refleja la prevalencia de lactancia materna, exclusiva y mixta, por meses de edad, en la población estudiada.
La duración media de la lactancia materna, considerando los 3 grupos (A, B y C) fue 71 ± 58,9 días (rango 0-270) (n = 170).
Las causas de no inicio de lactancia materna (grupo A, n = 21) fueron: hirsutismo materno (un caso), flebitis de miembro inferior (un caso), utilización de fenilhidantoína (2 casos), pezón invertido (2 casos), mastitis (2 casos), rechazo del pecho por el niño (2 casos) e hipogalactia (11 casos).
Las causas de paso a lactancia mixta antes del quinto mes argumentadas por las madres del grupo B fueron: «que el niño lloraba porque se quedaba con hambre» (14 casos); «que el niño no hacía el peso adecuado» (6 casos); ambas (5 casos), y «otras» (2 casos).
En la tabla 1 se desglosan las medias de edad de las madres (en años), el número de hijos y los porcentajes de hábito tabáquico, trabajo fuera del hogar y posesión de estudios superiores, para los 3 grupos de inicio de lactancia.
La edad media de las madres de los niños que iniciaron lactancia mixta desde el nacimiento resulta superior a la de las madres de los niños que tomaron lactancia artificial desde su nacimiento (32,5 ± 5,8 vs 28,8 ± 5,4) (diferencia casi significativa: p < 0,1).
Existe una mayor proporción de hábito tabáquico entre las madres de hijos que siguen lactancia artificial, respecto al grupo que sigue lactancia mixta desde el nacimiento (28,8% vs 0%) (p < 0,05).
La proporción de madres fumadoras entre aquellos niños que siguen lactancia materna durante más de 2 meses frente a los que no alcanzan este período resulta inferior (5,8% vs 20,9%) (p < 0,001).
Número de hijos, trabajo fuera del hogar y nivel cultural de las madres no evidenciaron relación estadísticamente significativa con el tipo de lactancia inicial ni con la duración de la lactancia materna.
Discusión
Los estudios sobre patrones de lactancia en España se fundamentan en encuestas a madres5-10, encuestas a madres y pediatras4 o en la utilización de la historia clínica11-13, metodología empleada también en nuestro trabajo. Creemos que la utilización de la historia pediátrica ofrece información complementaria respecto a las encuestas.
El 87,6% de tasa de inicio de lactancia materna observada en nuestra zona de salud ha resultado mayor que la descrita en estudios similares nacionales4-6,9,11,12, con valores que oscilan entre el 58% descrito por Herraz et al en población rural gallega y el 82% de Temboury et al en Móstoles (Madrid). Valores muy similares (87-92%) han sido hallados en Santander, Murcia rural, y Huesca rural y urbana7,8,14.
Resulta muy difícil poder comparar la duración media de la lactancia materna en nuestro estudio con la referida por otros autores7,10,13; consideramos como problema fundamental la no definición de los grupos de niños que se incluyen o excluyen en su cálculo. Para facilitar posibles comparaciones sobre este parámetro, hemos especificado los rangos de duración de lactancia en nuestra población excluyendo e incluyendo al grupo de niños que no inician lactancia materna. Entendemos como única referencia comparable la de Temboury et al, que resulta aproximadamente 11 días menor que la nuestra para población total11.
En nuestra zona se observa un moderado porcentaje de abandono de la lactancia materna en los primeros 15 días de vida. A los 3 meses de edad la proporción de niños amamantados (LM exclusiva más mixta) fue del 46%, resultando superior a la descrita por Morán4, Ros et al en Lliria12, Temboury et al en Móstoles9,11, con rangos que oscilan en un 23-43%, y resultando inferior a los valores de Cervantes et al en Santomera7. En nuestro trabajo la prevalencia en el quinto mes ha sido del 21,7% para los niños con lactancia materna exclusiva y mixta, y del 20,5% para los que reciben lactancia materna exclusiva. Nuestro porcentaje resulta superior al hallado por Temboury11 y muy especialmente al descrito por Ros12 con sólo un 9% de lactancia (materna exclusiva y lactancia mixta) al quinto mes de vida. Prevalencias similares a la nuestra han sido descritas en otros estudios7-9,13.
En lo referente a la introducción de la alimentación complementaria en el quinto mes, un 8% de las madres alternaron el pecho y la papilla, dato similar al descrito por Morán4.
Al igual que sucede en otros estudios4,6-9,11, nuestro motivo más importante de abandono precoz de la LM ha sido la hipogalactia. Coincidimos con Martín-Calama6 en que también ha sido la causa principal de no inicio de LM. La ignorancia y la mala técnica explicarían un alto porcentaje de ellas11, así como las rutinas inadecuadas seguidas en muchas maternidades9.
Por otra parte, entendemos que el paso precoz de lactancia exclusiva a lactancia mixta guarda relación con el consiguiente abandono de la lactancia materna4; este hecho condicionaría la menor duración media en este subgrupo.
El grupo de madres que da lactancia mixta a sus hijos son mujeres de mayor edad y menor hábito tabáquico que las madres que dan lactancia artificial desde el nacimiento. La diferencia resulta estadísticamente significativa para la variable edad y casi significativa para el tabaco; el que no se alcancen valores de significación estadística puede atribuirse al reducido tamaño de los grupos.
En coincidencia con otros estudios, la menor duración de la lactancia materna en nuestro grupo se relaciona con el hábito tabáquico de la madre2,5,8,10.
Desde un punto de vista eminentemente práctico, y coincidiendo con la mayor parte de los autores, entendemos que la educación para la salud resulta el instrumento básico de actuación para la mejora de las tasas y de la calidad de la LM, siendo el EAP el vehículo fundamental de actuación7,13.
Finalmente consideramos necesario mantener abiertas líneas de investigación orientadas a conocer la situación real de la lactancia materna en nuestra zona, y especialmente a evaluar la incidencia de posibles actividades de promoción emprendidas.
En resumen, pueden obtenerse las siguientes conclusiones: a) la tasa de inicio de la LM y su duración media en nuestra zona resulta superior a la descrita en trabajos similares, aunque se mantiene por debajo de las recomendaciones de la OMS y de las sociedades pediátricas, y b) se observa cierta tendencia al abandono de la LM a partir del tercer mes. La hipogalactia resulta ser la causa principal de no inicio de la LM y también de su abandono. Se evidencia la influencia negativa del hábito tabáquico sobre el tiempo de lactancia.
Agradecimientos
A todos los compañeros del EAP de Piedrabuena por su colaboración y apoyo. A la Gerencia de AP de Ciudad Real por facilitar la realización del estudio y fomentar la investigación.