La infección por el coronavirus del síndrome respiratorio agudo severo tipo2 (SARS-CoV-2), causante de la enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19), ha impactado al mundo de múltiples formas en el sistema de salud, y específicamente en la atención primaria, en muchas regiones, incluyendo América Latina1,2. Esta vasta región incluye más de 20 millones de kilómetros cuadrados de superficie, que corresponden aproximadamente al 13,5% de la superficie emergida del planeta, abarcando 20 países. Dentro de América Latina, la subregión Centroamericana incluye siete países independientes: Guatemala, Belice, Honduras, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica y Panamá. Por tal razón, queremos discutir acá implicaciones más específicas de la COVID-19 en Centro América, para el COVID-19 en la atención primaria.
COVID-19 es la infección respiratoria aguda con más impacto y daño internacional en las últimas décadas3. La mejor estrategia de manejo, según los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), es evitar la exposición al virus4. Por décadas hemos practicado las medidas de prevención en el nivel primario de atención para contener enfermedades, evitando la dispersión y el impacto de algunas de estas. Pero ¿por qué COVID-19 ha generado tanto impacto en algunas poblaciones? Para el caso de Honduras y otros países de Centro América, los primeros casos registrados fueron en las ciudades más grandes, y por ende las más pobladas, las cuales se han visto afectadas en cuanto a los casos reportados. Para principios de julio de 2020 se encontró una positividad de 41,1%, la segunda más alta en la región (tabla 1). Probablemente se ha fallado en la atención a nivel primario, porque la población no logra ser cubierta por los equipos de salud. A diferencia de las regiones donde se cuenta con una estructura más organizada y con mayor control poblacional, ya sea por menor densidad poblacional o por mayor número de equipo de salud comunitaria, el brote de COVID-19 ha demostrado la importancia de la prevención y el control de infecciones5.
Número de pruebas de laboratorio y pruebas positivas en los países de la región Centroamericana (2 de julio de 2020)
País | Pruebas | Positivos | Positividad (%) | Muertes | Letalidad (%) |
---|---|---|---|---|---|
Belice | 2.281 | 28 | 1,20 | 2 | 7,1 |
Guatemala | 31.427 | 19.011 | 60,50 | 817 | 4,3 |
Nicaragua | N/D | 2.519 | N/D | 83 | 3,3 |
Honduras | 49.308 | 20.262 | 41,10 | 542 | 2,7 |
El Salvador | 167.584 | 7.000 | 4,2 | 191 | 2,7 |
Panamá | 133.449 | 34.463 | 25,8 | 645 | 1,9 |
Costa Rica | 38.500 | 3.753 | 9,7 | 17 | 0,5 |
Total Región | 422.549 | 87.036 | 20,6 | 2.297 | 2,6 |
Fuente: Reported Cases and Deaths, Territory, or Conveyace. Disponible en: https://www.worldometers.info/coronavirus/?utm_campaign=homeAdvegas1. ND: no determinada.
El nivel primario de atención juega un papel muy importante en la prevención e identificación de casos, siempre y cuando se apliquen las medidas correspondientes y el seguimiento oportuno. Disponer de sofisticados sistemas de vigilancia epidemiológica es indispensable para la detección y la monitorización de los brotes. Se requieren buenos servicios de atención primaria como base de cualquier respuesta ante una emergencia1.
Según numerosas organizaciones internacionales, la estrategia de mayor eficacia continúa siendo la cuarentena1. Si logramos la prevención no tendremos que llegar al manejo de la enfermedad en los centros hospitalarios, y de esta forma no colapsar los sistemas de salud, ya debilitados en nuestros países.
De la mano a esta estrategia va la respuesta rápida de los equipos de salud para brindar a la población la asistencia necesaria, tomando en cuenta que la herramienta más poderosa de prevención es la información, y que esta llegue de la manera correcta y responsable para que toda la población conozca el riesgo y las medidas de seguridad; por ello, como personal de salud, estamos obligados a ser los voceros de esta información para que se difunda responsablemente6. Una población educada y consciente será una población colaboradora ante las medidas de prevención.
Pero ¿cómo lograr que la población acepte la cuarentena para lograr aplanar la curva en donde es nuestra única salida, ya con una economía débil? Diversas son las causas que han podido incidir en que parte de la población no adopte las conductas preventivas, entre estas una baja percepción de riesgo dada por un optimismo ilusorio1. Sin duda alguna este es un gran reto, considerando estrategias para intervenir a cada población.
FinanciaciónNinguna.
Conflicto de interesesNinguno.