Sobre el síndrome del túnel carpiano

Sres. Directores: En el artículo publicado en su revista, Menárguez et al¹ hacen un interesante estudio del impacto en la actividad laboral del síndrome del túnel carpiano (STC) en pacientes vistos en un centro de salud de Murcia. Sin embargo, en dicho estudio, se señala como causa de STC la cervicoartrosis. Dado que dicho síndrome se define como una neuropatía por atrapamiento del nervio mediano a su paso por el canal carpiano, difícilmente puede justificarse que la artrosis de la columna cervical sea responsable del atrapamiento de dicho nervio. Los síntomas del STC son debidos bien a la reducción de la capacidad del canal carpiano por inflamación de los tejidos circundantes, bien al aumento de volumen del contenido del canal como por ejemplo una tenosinovitis de los tendones flexores². De entre las posibles etiologías de un STC en el apartado de la enfermedad por deposición de cristales en reumatología, me gustaría añadir que no sólo la gota úrica, sino también las enfermedades por deposición de cristales de pirofosfato y de hidroxiapatita pueden ser responsables de un STC. Ambos cristales han sido encontrados en material biópsico de las vainas tendinosas de pacientes operados de un STC³. Por último, y también dentro del apartado de la etiología de la entidad, Menárguez et al, en su exhaustiva lista, citan el hipertiroidismo. Así como es bien sabido que algunas endocrinopatías (diabetes, acromegalia, mixedema y mucopolisacaridosis) pueden ser responsables de un STC, el hipertiroidismo no aparace citado en los tratados revisados.