Hemos realizado un estudio descriptivo transversal del consumo de cinco antibióticos de uso sistémico en atención primaria y su tendencia durante el periodo 2003–2006 en la provincia de Segovia. La población asignada osciló entre 135.435 habitantes en 2003 y 141.589 en 2006.
Los datos fueron obtenidos del Sistema de Análisis y Evaluación de la Prescripción Farmacéutica de la Junta de Castilla y León. La medida del consumo fue la Dosis Habitante Día (DHD), de acuerdo con la WHO anatomic therapeutic chemical classification. Los 57 principios activos se clasificaron en seis grupos (penicilinas de amplio espectro, penicilinas con inhibidores de betalactamasa, cefalosporinas, macrólidos, quinolonas y otros antibióticos); se eligió como marcadores de los cinco primeros amoxicilina, amoxicilina-ácido clavulánico, cefuroxima, claritromicina y ciprofloxacino.
El consumo total presenta una tendencia al alza, con un total de 73,37 DHD y una variación interanual del 7,05%. Por grupos terapéuticos, el mayor consumo correspondió a las penicilinas con inhibidores de betalactamasa, con 23,49 DHD (el 32% del total), seguido de penicilinas de amplio espectro con 22,18 DHD (30,2%), otros antibióticos con 7,73 DHD (10,5%), macrólidos con 7,2 DHD (9,8%), quinolonas con 6,74 DHD (9,18%) y cefalosporinas con 5,76 DHD (7,85%). Amoxicilina-clavulánico fue el antibiótico más consumido (23,49 DHD, el 100% de su grupo), seguido por amoxicilina (22,14 DHD, 99,8%). Ambos antibióticos y el ciprofloxacino presentan tendencia al alza (figura 1).
El promedio de consumo total fue de 18,28 DHD, similar al observado en el estudio ESAC para España1, pero inferior al de otra provincia colindante y de similares características2. En conclusión, las penicilinas (con inhibidores de betalactamasa y de amplio espectro) son los antibióticos más consumidos en la provincia de Segovia, con una tendencia al alza. Sin embargo, se considera que el consumo total es moderado, y se aconseja mantener una estrecha vigilancia de la tendencia interanual.