Analizar la diferente incidencia de complicaciones graves en los trasplantes urgentes y no urgentes.
Material y métodosEntre enero de 2001 y febrero de 2010 se estudiaron 301 pacientes sometidos a trasplante cardíaco, excluyendo trasplantes combinados cardiopulmonares y retrasplantes. Se consideraron dos grupos (trasplantes urgentes y trasplantes no urgentes), y se comparó la supervivencia entre ambos, así como la aparición de infección, fallo primario del injerto, fallo renal y hepático, complicaciones respiratorias, taponamiento cardíaco, arritmias, reintervención y estancia en cuidados intensivos.
Resultados74 pacientes (24,58%) se trasplantaron de forma urgente, y 227 (75,42%) fueron no urgentes, con un tiempo medio de permanencia en lista de espera de 66,29días (0-966días). Entre las características basales del grupo de trasplantes urgentes, destaca una mayor incidencia de cardiopatía de base isquémica, siendo en este grupo más prolongado el tiempo de bypass cardiopulmonar. La mortalidad global en la unidad de cuidados intensivos (UCI) fue del 2,6%, sin diferencias significativas entre ambos grupos. Los trasplantes urgentes se asociaron significativamente a mayor incidencia de fallo agudo del injerto (FAI), necesidad de balón de contrapulsación intraaórtico y ventilación mecánica más prolongada, así como a mayor número de infecciones bacterianas y estancia en UCI significativamente mayor.
ConclusionesEn nuestra serie, el trasplante urgente no presentó una mayor mortalidad perioperatoria. Sin embargo, observamos mayor número de complicaciones graves, asociadas a mortalidad a más largo plazo, como FAI, infección bacteriana y ventilación mecánica prolongada.