Nuestra forma de trabajar en los hospitales está cambiando. Las Áreas de Gestión Clínica plantean como centro de la actividad hospitalaria al paciente, dejando en segundo lugar al profesional pero exigiéndosele efectividad, seguridad, eficiencia y calidad en su labor diaria1.
La evaluación que hacen del sistema sanitario los pacientes es habitualmente positiva. Sin embargo, la valoración de los profesionales sanitarios es frecuentemente negativa. Expuestos a determinados riesgos psicosociales como el estrés, la fatiga y las alteraciones de la conducta, médicos y enfermeros, pueden ver afectada su propia salud2. Hay obligación legal de medir y evaluar dichos riesgos y aportar las medidas necesarias para su control. Su incumplimiento constituye por tanto una infracción3.
El objetivo del estudio fue medir los riesgos psicosociales a los que están expuestos los profesionales de un Área de Gestión Clínica.
El estudio se llevó a cabo en el Área de Gestión Clínica del Corazón de un hospital terciario. Incluimos en el estudio tres grupos de profesionales con entornos de trabajo muy exigentes, constituidos por personal médico y de enfermería de Electrofisiología, Hemodinámica y Cirugía Cardíaca. Este personal se encuentra sometido de forma habitual a una alta carga de trabajo y a una gran responsabilidad.
Para realizar la evaluación de la exposición a riesgos psicosociales utilizamos el cuestionario para la evaluación de riesgos psicosociales adaptado del Cuestionario Psicosocial de Copenhague (CoPsoQ) en su versión corta para empresas4,5. Se estudiaron 6 dimensiones:
- 1.
Exigencias psicosociales.
- 2.
Trabajo activo y posibilidades de desarrollo.
- 3.
Inseguridad.
- 4.
Apoyo social y calidad de liderazgo.
- 5.
Doble presencia.
- 6.
Estima.
Se recogieron cincuenta cuestionarios procedentes de trabajadores de las tres unidades. La encuesta CoPsoQ consta de un método propio de autoevaluación (fig. 1A) y recogida de datos4,5.
A) Autoevaluación del cuestionario CoPsoQ. Nivel rojo significa alto riesgo para la salud y está presente en 4 de las 6 dimensiones estudiadas. B) Resultados globales de la población encuestada. En el eje de abscisas nivel de riesgo y en ordenadas el número de encuestados en riesgo. En porcentajes, la población en nivel de riesgo muy alto o desfavorable. El color de la figura solo puede apreciarse en la versión electrónica del artículo.
Encontramos el nivel de exposición más desfavorable, indicativo de alto riesgo para la salud (nivel rojo), en cuatro de las seis dimensiones estudiadas (fig. 1B):
- •
Exigencias psicológicas (84% de la población estudiada.
- •
Apoyo social y calidad de liderazgo (56%).
- •
Doble presencia (78%).
- •
Estima (68%).
El 50% de los encuestados contestó que había sufrido violencia psicológica en su entorno de trabajo (fig. 1B).
Dentro de los profesionales con alto riesgo para la salud comprobamos problemas comunes a los tres grupos:
- •
Mala gestión de los tiempos de trabajo: 72% de respuestas.
- •
Falta de comunicación e información y de apoyo entre estamentos: 93%.
- •
No sensación de equipo: 75%.
- •
Escasa autonomía laboral: 60%.
- •
Falta de conciliación entre vida laboral y familiar: 97%.
- •
Falta de reconocimiento a la labor realizada: 97%.
Una vez identificados los principales riesgos del Área de Gestión, procede la planificación de las estrategias de mejora:
- •
Facilitar las relaciones sociales, mejorar calidad de liderazgo y organización, fomentar la cooperación, el apoyo social, mediante reuniones para abordar los problemas.
- •
Implicar la dirección del centro en la cultura de seguridad, en la calidad.
- •
Debemos mejorar en autonomía de trabajo y autonomía temporal.
- •
Instaurar sistemas de resolución de conflictos y tener tolerancia cero con las conductas inapropiadas.
- •
Monitorizar la gestión del riesgo.
El síndrome del «burnout» y la violencia psicológica están relacionados con la mala gestión de riesgos psicosociales3. El primer paso para tratarlos es conocer la situación.